Yo dejé a una, que era buen partido, buen sexo, buenas peras, funcionaria, 6 o 7 años más joven que yo, por la Arandina. Tal cual salió la sentencia, me empezó a decir que tenía razón y que blao, blao, y en ese puto momento mi cabeza hizo click y las ganas que tenía de correrme en su boca, que le gustaba mucho, se convirtieron en la realidad, que iba a ser imposible aguantar a esa tía más tiempo, que tarde o temprano la mandaría a la mierda o no me controlaría, y ese encanto de noviete que era para ella, ese al que quería presentar a sus padres, algo que no había hecho y blao, saldría el monstruo que soy y que puedo contener para agradar a una mujer que me la pone como un canto.
Tiempo después me hablando con un amigo, me di cuenta que mi deseo de pillar a una podemita enamorarla y dejarla jodida se había realizado, solo que durante la realización, mi cerebro creó un personaje que se creía que al quería jiji joder si hasta se lo dije y nos fuimos de viaje juntos a Irlanda nada más conocernos. Literalmente hice como en la peli esa de Edward Norton que tiene doble personalidad y creo que una es un asesino y otra un tímido introvertido.
Tú, a pesar de ser un gran tinder hunter, no caíste en que ellas pueden ser tan falsas como nosotros, te quería follar, pero no se quiere follar a uno como tú, por aquello de no poder soportar decirle a sus amigas que está con un tío que piensa que lo de la Manada, o Arandina o lo que sea, no es como dicen sus contactos de twitter, prefiere que la engañen diciendo que son aliados feministas. Aprende para la próxima, porque deberías habértela follado, y unirte al club de machotes que la han usado como receptáculo de semen. Psicóloga joder, pero si esas son todas subnormales.