Empecinado
Asiduo
- Registro
- 5 Feb 2024
- Mensajes
- 936
- Reacciones
- 482
La izquierda española ha tratado de politizar y capitalizar el éxito de la Roja, en esta Euro 24. Pero les ha salido el tiro por la culata.
Todo empezó cuando la eurogarrula de Irene Montero, subió un vídeo que se viralizó en las redes, donde celebraba que España se hubiese clasificado para la final, con dos goles de dos personas "racializadas". Confundiendo a Dani Olmo con Nico Williams. Lo que demuestra que ni siquiera vio el partido, la subnormal de ella. Ella argumentaba que esta selección sí la representaba, porque era diversa, multicultural y maravillosa. Cuando se dio cuenta de su error, fue corriendo a borrar su vídeo. Pero ya era demasiado tarde.
Fueron muchos los artículos de prensa que vi, de diferentes medios, en los que hablaban de los orígenes de Lamine Yamal y Nico Williams, y de su historia familiar. Justo, en un momento en el que España sufre una crisis migratoria como pocas antes se habían visto, y donde el Gobierno socialista está realizando un efecto llamada, distribuyendo a todos estos ilegales por España, dándoles todo tipo de ayudas sociales y regularizando a 500 mil de los que ya estaban en el país. Sin hablar de todos a los cuales están regalándoles la nacionalidad. Esa gente ya puede votar.
No sólo eso, sino que también es común ver fotos, montajes o fan arts, en las redes, donde les dan mucho protagonismo a estos dos jugadores. Como si jugaran solos o fueran las máximas estrellas de nuestra selección. Olvidándose de Rodri, Fabián, Carvajal u Olmo, por ejemplo. Que también fueron cruciales en la consecución del título.
El mismo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, trató de aparecer en las celebraciones junto a los jugadores, en la final, queriendo bajar al césped, junto con el rey Felipe VI y su hija, o entrando en el vestuario. Algo a lo que los capitanes (Morata y Carvajal) se negaron en rotundo.
En la celebración del título, se escuchó a unos jugadores diciendo que "España era el mejor país del mundo", y hasta cantaron que Gibraltar era español, en varias ocasiones. Durante la recepción del presidente del Gobierno, en el palacio de La Moncloa, muchos jugadores se mostraron a disgusto e incómodos frente a Pedro Sánchez. Incluso, Dani Carvajal le dio la mano sin ganas y mirando a otro lado, como señal de desprecio. Algo que fue muy sonado. Todo esto ha hecho que la izquierda mediática (relaciones públicas del Gobierno), y las redes sociales afines, comenzaran a atacar a los jugadores españoles. Especialmente, a Dani Carvajal, al que asocian con figuras y organizaciones que la izquierda desprecia, como al periodista antisanchista Vito Quiles, el activista y político Alvise Pérez o el partido político Vox. De hecho, se ha filtrado que el Gobierno ha ordenado a Hacienda que investigue a este jugador. Así se las gasta el poder. No tengáis ninguna duda. No es el primero ni el último al que han querido joder, con las herramientas del poder estatal. Encima, en su twitter ha puesto 4 imágenes y ha escrito "La Euro es nuestra. La unión hace la fuerza ¡Viva España!". Totalmente repudiable por cualquier traidor izquierdista español.
También tenemos a Luis de la Fuente. Un tipo que siempre ha hablado a favor de la meritocracia (algo que la izquierda odia) y que se ha declarado, abiertamente, cristiano católico.
Luego está Nico Williams, que nació en Pamplona (Navarra). Hijo de inmigrantes africanos. Su madre llegó a España en patera. Resulta que la televisión pública vasca le pregunta si sabe hablar en euskera, teniendo en cuenta que los nacionalistas vascos consideran que Navarra está en su "Euskal Herria", y él contesta que no. Además, hace no mucho, otro medio le preguntó qué le pediría a Pedro Sánchez, y él contestó "que bajara los impuestos". Planchazo TOTAL de la izquierda con la Selección española, que se lo puso muchísimo más difícil que la femenina, que entró totalmente en el juego de estos palurdos. Después de decir lo de los impuestos, la ultraizquierda ha ido a por Nico, llamándolo "privilegiado", por cobrar lo que cobra.
La izquierda no para de sembrar el odio y crear división en la sociedad. Figuras importantes de la izquierda política y mediática, como Juan Carlos Monedero, llamaba "bravucones, chulos y soberbios" a los jugadores españoles. Recordemos que esto lo dice un comunista defensor de dictaduras asesinas, que apoya que se queme la bandera, se insulte al rey o que justifica la violencia política contra el disidente.
La izquierda ha intentado crear una "Selección Woke", como hicieron con la Selección femenina, e infectar al deporte con su basura ideológica socialista y putrefacta. Pero se han dado cuenta de que el deporte sí representa a la verdadera España. A diferencia de lo que sucede con la Selección francesa, llena de hijos de inmigrantes extremadamente politizados.
La Selección española es un ejemplo de meritocracia, valor añadido, trabajo en equipo, esfuerzo y creatividad.
Todo empezó cuando la eurogarrula de Irene Montero, subió un vídeo que se viralizó en las redes, donde celebraba que España se hubiese clasificado para la final, con dos goles de dos personas "racializadas". Confundiendo a Dani Olmo con Nico Williams. Lo que demuestra que ni siquiera vio el partido, la subnormal de ella. Ella argumentaba que esta selección sí la representaba, porque era diversa, multicultural y maravillosa. Cuando se dio cuenta de su error, fue corriendo a borrar su vídeo. Pero ya era demasiado tarde.
Fueron muchos los artículos de prensa que vi, de diferentes medios, en los que hablaban de los orígenes de Lamine Yamal y Nico Williams, y de su historia familiar. Justo, en un momento en el que España sufre una crisis migratoria como pocas antes se habían visto, y donde el Gobierno socialista está realizando un efecto llamada, distribuyendo a todos estos ilegales por España, dándoles todo tipo de ayudas sociales y regularizando a 500 mil de los que ya estaban en el país. Sin hablar de todos a los cuales están regalándoles la nacionalidad. Esa gente ya puede votar.
No sólo eso, sino que también es común ver fotos, montajes o fan arts, en las redes, donde les dan mucho protagonismo a estos dos jugadores. Como si jugaran solos o fueran las máximas estrellas de nuestra selección. Olvidándose de Rodri, Fabián, Carvajal u Olmo, por ejemplo. Que también fueron cruciales en la consecución del título.
El mismo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, trató de aparecer en las celebraciones junto a los jugadores, en la final, queriendo bajar al césped, junto con el rey Felipe VI y su hija, o entrando en el vestuario. Algo a lo que los capitanes (Morata y Carvajal) se negaron en rotundo.
En la celebración del título, se escuchó a unos jugadores diciendo que "España era el mejor país del mundo", y hasta cantaron que Gibraltar era español, en varias ocasiones. Durante la recepción del presidente del Gobierno, en el palacio de La Moncloa, muchos jugadores se mostraron a disgusto e incómodos frente a Pedro Sánchez. Incluso, Dani Carvajal le dio la mano sin ganas y mirando a otro lado, como señal de desprecio. Algo que fue muy sonado. Todo esto ha hecho que la izquierda mediática (relaciones públicas del Gobierno), y las redes sociales afines, comenzaran a atacar a los jugadores españoles. Especialmente, a Dani Carvajal, al que asocian con figuras y organizaciones que la izquierda desprecia, como al periodista antisanchista Vito Quiles, el activista y político Alvise Pérez o el partido político Vox. De hecho, se ha filtrado que el Gobierno ha ordenado a Hacienda que investigue a este jugador. Así se las gasta el poder. No tengáis ninguna duda. No es el primero ni el último al que han querido joder, con las herramientas del poder estatal. Encima, en su twitter ha puesto 4 imágenes y ha escrito "La Euro es nuestra. La unión hace la fuerza ¡Viva España!". Totalmente repudiable por cualquier traidor izquierdista español.
También tenemos a Luis de la Fuente. Un tipo que siempre ha hablado a favor de la meritocracia (algo que la izquierda odia) y que se ha declarado, abiertamente, cristiano católico.
Luego está Nico Williams, que nació en Pamplona (Navarra). Hijo de inmigrantes africanos. Su madre llegó a España en patera. Resulta que la televisión pública vasca le pregunta si sabe hablar en euskera, teniendo en cuenta que los nacionalistas vascos consideran que Navarra está en su "Euskal Herria", y él contesta que no. Además, hace no mucho, otro medio le preguntó qué le pediría a Pedro Sánchez, y él contestó "que bajara los impuestos". Planchazo TOTAL de la izquierda con la Selección española, que se lo puso muchísimo más difícil que la femenina, que entró totalmente en el juego de estos palurdos. Después de decir lo de los impuestos, la ultraizquierda ha ido a por Nico, llamándolo "privilegiado", por cobrar lo que cobra.
La izquierda no para de sembrar el odio y crear división en la sociedad. Figuras importantes de la izquierda política y mediática, como Juan Carlos Monedero, llamaba "bravucones, chulos y soberbios" a los jugadores españoles. Recordemos que esto lo dice un comunista defensor de dictaduras asesinas, que apoya que se queme la bandera, se insulte al rey o que justifica la violencia política contra el disidente.
La izquierda ha intentado crear una "Selección Woke", como hicieron con la Selección femenina, e infectar al deporte con su basura ideológica socialista y putrefacta. Pero se han dado cuenta de que el deporte sí representa a la verdadera España. A diferencia de lo que sucede con la Selección francesa, llena de hijos de inmigrantes extremadamente politizados.
La Selección española es un ejemplo de meritocracia, valor añadido, trabajo en equipo, esfuerzo y creatividad.
Última edición: