Eduardo Vargas
Forero del todo a cien
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- 22 Abr 2006
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Mi primera novia seria. Dos años de relación. La primera vez, inexpertos como éramos, fueron en realidad dos veces. Una semana y la siguiente. Dos años después aún éramos inexpertos en demasiadas cosas. Una de ellas, el sexo anal. -"Oye, no estaría mal probar"- decía yo, curioso como era. -"Por probar que no quede"- respondía ella. Nunca llegamos a hacerlo, rompimos nuestra relación por temas que no vienen al caso.
Más tarde conocí a mi segunda novia seria. Cuatro años de relación. Aquí la inexperta era ella y los alicientes eran otros. Si bien ya no había nervios, inseguridades y, porqué no decirlo, miedo, al menos por mi parte, había cosas que enseñar y siempre hay cosas nuevas que experimentar. Hacia el final, decidimos probar el antiguo arte de los griegos. Como no, la relación acabó a los pocos dias.
Llegamos a este pasado fin de semana. Hay una chica con la que, hasta ahora, tenía bastante claro que iniciaríamos una relación. No una de esas forzadas, en la que uno tiene que convencer al otro, ni una de conveniencia, ni una para dejar de sentirse solo. Nos gustamos, nos admiramos el uno al otro, saltan chispas, et caetera. Este fin de semana, decía, después de hacer mil y una cosas, el tema surgió de forma espontánea y muy natural. Sin decir nada, sin forzar la situación, sin comerlo ni beberlo, de repente, estábamos intentando, con poco éxito, la penetración por la puerta de atrás. Ahora se que todo acabó.
Ese es mi mayor quebranto, hamijos, soy un hombre incapaz de mantener unas relaciones sexuales plenas y sin tabúes. Esa es la forma que tiene la naturaleza de vengarse de mi, oh mísero mortal, que se atreve a desafíar sus más básicas leyes. La sodomía mata el alma y los sentimientos y ahora lo se. No cometais el mismo error que yo. Alejaos del culo, son asuntos sucios. :cry:
Más tarde conocí a mi segunda novia seria. Cuatro años de relación. Aquí la inexperta era ella y los alicientes eran otros. Si bien ya no había nervios, inseguridades y, porqué no decirlo, miedo, al menos por mi parte, había cosas que enseñar y siempre hay cosas nuevas que experimentar. Hacia el final, decidimos probar el antiguo arte de los griegos. Como no, la relación acabó a los pocos dias.
Llegamos a este pasado fin de semana. Hay una chica con la que, hasta ahora, tenía bastante claro que iniciaríamos una relación. No una de esas forzadas, en la que uno tiene que convencer al otro, ni una de conveniencia, ni una para dejar de sentirse solo. Nos gustamos, nos admiramos el uno al otro, saltan chispas, et caetera. Este fin de semana, decía, después de hacer mil y una cosas, el tema surgió de forma espontánea y muy natural. Sin decir nada, sin forzar la situación, sin comerlo ni beberlo, de repente, estábamos intentando, con poco éxito, la penetración por la puerta de atrás. Ahora se que todo acabó.
Ese es mi mayor quebranto, hamijos, soy un hombre incapaz de mantener unas relaciones sexuales plenas y sin tabúes. Esa es la forma que tiene la naturaleza de vengarse de mi, oh mísero mortal, que se atreve a desafíar sus más básicas leyes. La sodomía mata el alma y los sentimientos y ahora lo se. No cometais el mismo error que yo. Alejaos del culo, son asuntos sucios. :cry:
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