Asta
Freak
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Lo que voy a contar a continuación es absolutamente verídico y yo he tenido la posibilidad de comprobarlo personalmente. Ya se que un foro como éste no es lugar para explicar este tipo de sucesos, pero me ha dado la realisima gana contarlo aquí, así que las posibles críticas me van a servir para limpiarme el pecho.
En Montpellier (Francia), llevan ocurriendo extraños sucesos paranormales, algunos de los cuales han ocasionado lesiones e incluso fallecimientos, desde hace aproximádamente cinco años. Al principio se pensó que todo era fruto de la casualidad, pero las declaraciones de un peculiar agricultor ha demostrado que el mal en estado puro existe y que las técnicas de vudú no son precisamente un juego de niños.
Pierre de la Brochette,
el agricultor en cuestión, asegura que todo comenzó cuando uno de sus vecinos decidió usurpar parte de las lindes de su finca poniendo una valla de mallazo. Pierre es un individuo sin pelo en el cuerpo (es totalmente lampiño salvo en la cabeza) y con tres filas de dientes debido a una malformación congénita. Es una persona huraña, sin familia y nadie en la comarca le habla porque él ignora a todo el mundo.
Cuando su vecino realizó lo que él consideró una tropelía, acudió a la biblioteca y se empapó de todo lo que tuviera que ver con magia negra, pues decidió acabar con el pobre hombre, pero empleando las malas artes.
Así, descubrió que en época de los merovingios existió un importante conjunto de pinturas murales al fresco, ubicados en el interior de la basílica paleocristiana de Saint Martin de Tours.
De aquellas pinturas una había sido considerada durante siglos como una pintura maldita a la que acudían los miembros de una especie de logia para invocar al maligno y hacer el mal a sus semejantes.
Se trata de una imágen en el que se representa a un caballo blanco, en el que se palpa el odio detrás de unos ojos espantados.
Pierre se aprendió las invocaciones y viajó hasta dicha basílica, pero descubrío que dicha construcción ya no existe en la actualidad pues fue destruida durante la Revolución francesa. Sin embargo recurrió a buscar la ubicación actual de alguna reproducción de dicho fresco y, tras encontrarlo en los archivos de la Catedral de Tours, pidió ante la imágen que su vecino sufriera una amputación de las piernas.
Cuando regresó a su villa se enteró de que su vecino había tenido un accidente de coche y había perdido ambas extremidades.
Tras pasar mucho miedo al comprobar que había resultado, algo cambió en él y decidió hacer el mal a todos los que le hacían burla, al podólogo que le había quitado una uña encarnada, al panadero porque llevaba mala vida, etcétera. Una lista de maldiciones en las que ha estado involucrado la imágen incluyeron: Impotencia sexual, pésimas cirugías plásticas, gases olorosos, mala reputación, perdida de trabajo, papel de baño enganchado en suelas de zapato, problemas urinarios, gonorrea o herpes.
Yo lo he probado y la maldición funcionó. Otro dia os diré cual fue...
Aquí os pongo una reproducción de la pintura del caballo. Por favor, sed responsables..
En Montpellier (Francia), llevan ocurriendo extraños sucesos paranormales, algunos de los cuales han ocasionado lesiones e incluso fallecimientos, desde hace aproximádamente cinco años. Al principio se pensó que todo era fruto de la casualidad, pero las declaraciones de un peculiar agricultor ha demostrado que el mal en estado puro existe y que las técnicas de vudú no son precisamente un juego de niños.
Pierre de la Brochette,

el agricultor en cuestión, asegura que todo comenzó cuando uno de sus vecinos decidió usurpar parte de las lindes de su finca poniendo una valla de mallazo. Pierre es un individuo sin pelo en el cuerpo (es totalmente lampiño salvo en la cabeza) y con tres filas de dientes debido a una malformación congénita. Es una persona huraña, sin familia y nadie en la comarca le habla porque él ignora a todo el mundo.
Cuando su vecino realizó lo que él consideró una tropelía, acudió a la biblioteca y se empapó de todo lo que tuviera que ver con magia negra, pues decidió acabar con el pobre hombre, pero empleando las malas artes.
Así, descubrió que en época de los merovingios existió un importante conjunto de pinturas murales al fresco, ubicados en el interior de la basílica paleocristiana de Saint Martin de Tours.

De aquellas pinturas una había sido considerada durante siglos como una pintura maldita a la que acudían los miembros de una especie de logia para invocar al maligno y hacer el mal a sus semejantes.
Se trata de una imágen en el que se representa a un caballo blanco, en el que se palpa el odio detrás de unos ojos espantados.
Pierre se aprendió las invocaciones y viajó hasta dicha basílica, pero descubrío que dicha construcción ya no existe en la actualidad pues fue destruida durante la Revolución francesa. Sin embargo recurrió a buscar la ubicación actual de alguna reproducción de dicho fresco y, tras encontrarlo en los archivos de la Catedral de Tours, pidió ante la imágen que su vecino sufriera una amputación de las piernas.
Cuando regresó a su villa se enteró de que su vecino había tenido un accidente de coche y había perdido ambas extremidades.
Tras pasar mucho miedo al comprobar que había resultado, algo cambió en él y decidió hacer el mal a todos los que le hacían burla, al podólogo que le había quitado una uña encarnada, al panadero porque llevaba mala vida, etcétera. Una lista de maldiciones en las que ha estado involucrado la imágen incluyeron: Impotencia sexual, pésimas cirugías plásticas, gases olorosos, mala reputación, perdida de trabajo, papel de baño enganchado en suelas de zapato, problemas urinarios, gonorrea o herpes.
Yo lo he probado y la maldición funcionó. Otro dia os diré cual fue...
Aquí os pongo una reproducción de la pintura del caballo. Por favor, sed responsables..
