Ocurre lo mismo que con el cáñamo. Son semillas y es legal obtenerlas y plantarlas. En cualquier puesto de jardinería decente se compran si mayor problema al igual que en las tiendas de herbodietética. En éstas últimas se venden, como los pétalos de dichas flores, para hacer infusiones tranquilizantes. Resultan más efectivas fumadas.