PAPA NOEL ES UN INDIGENTE BORRACHUZOS

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pratso

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18 Dic 2003
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A>yer me encontre con Papa Noel o Santa CLaus o como ostias se llame tirado en el portal de mi casa.



El tio estaba todo cocido medio en pelotas. Gracias a que hablo perfectamente el idioma de Laponia (el Lapones) me invite a subir a casa que alli estaba dando el cante. El tipo me conto que estaba hasta los cojones, que si leer las cartas de los niños, que si los jugetes, que si la señora Santa no folla. En fin, que un asco de hombre. Le di unos eurillos y una manta vieja que tenia, se la puso en plan poncho.
En fin si le veis decirle que la manta se la regalo, pero los eurillos que me los devuelva.
 
En cierta ocasión, un buen amigo mio sintió la imperiosa necesidad de acabar con su complejo de persona poco útil a la sociedad; y se le ocurrió la brillante idea de confeccionarse un traje de Santa Claus, a base de retales adquiridos en mercadillos de domingo.
Estuvo todo el día en el empeño y, cuando finalizó la confección del traje, fue corriendo al Carrefour más cercano a la busca de cachivaches infantiles. Compró también un gran saco, lo más parecido a un atrezzo navideño, y en él metió los juguetes que había adquirido con el fin de repartirlos aquella misma noche.
Cuando dieron las doce, este buen amigo se enfundó el traje de Papa Noel y llenó el saco con todos los cacharros que cupieron, que no fueron pocos. Al salir a la calle, sacó de un gran bolsillo una guía QDQ y señaló con el dedo el primer domicilio. Pertenecía a un tal Abad Montero, Enrique y, el palomo en cuestión, vivía dos manzanas más abajo. Raudo y veloz, se dirigió a la morada establecida y llamó al timbre con insistencia. Le abrió la puerta un marroquí al que le pudo distinguir perfectamente, como sobresalía de su cintura un aparato electrónico con una maraña de sospechosos cables.
Ahora mi amigo está en Laponia, bueno, al menos en parte.

La moraleja navideña es: haz el bien, pero mira antes que no sea un fundamentalista radical.

POR UNOS REYES MAGOS, ESTE AÑO
 
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