Esto de las propinas es muy curioso y da para mucho.
Lo de que venga en el ticket lo del 10% es una mierda como un piano. Porque tiene un motivo de ser y no es nada agradable. Esa propina no se la queda el camarero, sino que va para el local, porque ese 10% en muchas ocasiones se usa para "completar" el sueldo de los camareros.
No quiero generalizar porque habrá de todo, pero si tenéis ocasión, fijaros la próxima vez y veréis como casi con toda seguridad la propina va para la caja en vez de que quien os ha atendido se lo meta en el bolsillo.
Pensad en por qué si no el local iba a poner ese porcentaje independientemente de como os haya resultado la comida y el servicio.
La putada es que si alguien te ha tratado muy bien y pagas ese porcentaje más que gustosamente, tampoco le estas dando ningún extra a esa persona sino que simplemente se le está ahorrando al dueño tener que pagarle una parte de su salario, porque ya lo hacen en parte los clientes con ese porcentaje.
Por supuesto no es así en todos los locales que muestran porcentaje, pero vamos, que el sistema suele ser ese y está más que aceptado. Es una mierda porque para los pobres camareros no supone ningún extra de forma inmediata ni un premio por hacerlo bien, de manera que tampoco, en teoría, tienen que esforzarse demasiado por una propina que saben que va a caer de forma casi "obligatoria" por parte del cliente.
Así que casi están pendientes más de la cantidad de mesas que de la calidad o atención que ponen a cada una de ellas.
También tengo que decir que en algunos lugares se les dan "bonus", cestas de navidad, detalles... cosas así para compensar un poco o tenerlos motivados.
Otra de las razones por las que ese sistema es una mierda es porque de esa manera las propinas nunca llegan a la cocina.
En los sitios en los que he trabajado en España creo que nunca se repartían con la cocina. A mi me da un poco igual porque ya estamos mejor pagados que los camareros y además yo los respeto, porque aunque los haya muy cucos o sean remolones, al final del día se llevan palos de los dos sitios, desde la cocina y desde el comedor, teniendo que aguantar clientes estirados, insoportables, quejicas, niños, etc...
Por lo general todo eso del 10% se aplica en cadenas de restaurantes, en locales céntricos, sitios con mucha afluencia, etc...
En restaurantes con un poco más de categoría y apartados de los lugares con más afluencia de gente, la cosa es distinta. Y mejor.
No se aplica lo del porcentaje. Porque queda "feo" y antiestético y además el cliente ya lo sabe más que de sobra, no suele ser cliente foráneo. Así que da igual que no venga escrito, la gente da ese 10% de propina y mucho más si queda satisfecha. Y suele quedar satisfecha, porque en esos lugares de más nivel el cliente tiene normalmente más poder adquisitivo, suele ser gente mayor, con más "educación", más modales, más tranquila que la media. Al ser un lugar más caro no acuden allí familias con muchos críos, ni teens, ni... suena clasista, pero es la realidad.
Al ser clientela tranquila y casi siempre en mesas pequeñas de pocos comensales el ambiente es más agradable en la sala, los camareros pueden dar una mejor atención, en la cocina hay más tiempo para poner mimo en los platos, con lo que quedan mejor, el cliente contento, etc, etc... Todos esos factores están relacionados y repercuten normalmente en una mejor experiencia para el comensal.
Con lo que las propinas suelen ser monumentales, sobre todo en fines de semana.
Y lo que es mejor, se reparten con la cocina. Primero, porque la relación camareros-cocina suele ser más estrecha que en cualquier otro restaurante en los que el personal va y viene y hay caras nuevas cada poco tiempo. Y segundo, porque para los dueños de ese tipo de restaurantes/hoteles ese dinero de propinas no le supone nada. Así que todo para los empleados.
Cada uno tiene una bolsita de plástico en la que se le escribe su nombre.
Los camareros, al final del servicio, cuentan y reparten a partes iguales en cada bolsita de la persona que haya trabajado ese turno.
Cuando al pasar días o turnos se acumulan muchas monedas, las van cambiando por billetes, así es más cómodo para recoger la propina y las chicas tienen más monedas sueltas en la caja. Cuestión esta nada baladí. Seguro que a una camarera no le importa que el local arda en llamas, pero como se quede sin monedas en la caja en medio de un servicio...
A veces se ve el pánico en sus ojos cuando están a punto de quedarse sin monedas para el cambio
Normalmente todos confían en todos y no hay problemas. De todas maneras los camareros podrían "robar" y nunca nos daríamos cuenta.
Si hay problemas, todo se complica. Porque los afectados querrían ir al dueño y reclamar, pero nada puede hacer ya que el tema propinas lo deja todo en manos de los propios empleados. Lo único que se haría es quedar todos como niños de guardería.
Y aunque no haya robos, parecerse a una guardería es lo que suele pasar a veces. Ver a gente que tiene un buen sueldo preocuparse por la calderilla que haya acumulado ese día... O sospechar de alguien porque la bolsita de ese alguien abulte algo más de lo que debería...
En fin, supongo que ese comportamiento es inevitable cuando se trabaja con un grupo de gente, cada uno de su madre y su padre.