Eterno Navegante
Asiduo
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Lo que no conduce a nada, es el odio.
Mujeres, reconoced que la actitud de odio hacia vosotras, aunque alguna en particular no tenga la culpa, en general os la habéis ganado a pulso.
Reconoced que ningún chico se atreve ya a enamorarse, que ninguno quiere sufrir más, y se escudan en la actitud “solo quiero sexo y no me voy a implicar más” desde hace mucho tiempo.
Reconoced que cuando a un chico le empezáis a gustar, este corta los lazos (por débiles que sean) con vosotras, porque saben que van a sufrir.
Reconoced que ya nadie quiere compromoterse más allá de una pequeña temporada, porque tiene miedo, y muchas veces con razón.
Y que cuando se atreve a lanzarse, cuando dice “al diablo con todo”, cuando aun así, se lanza y se implica, pasáis de el como de comer mierda.
Reconoced que esto es así, y que la cosa va a ir a peor, porque hoy lo normal es tener una media de tres a cinco novios / as formales antes de casarse, y que la vida media de un matrimonio hoy día no pasa de los diez años.
Y no digo que vosotras no tengáis vuestras penas y sufrimientos y agonías, que las tenéis, no digo que nosotros no estemos también bien jodidos y que seamos unos cabrones y unos cerdos a veces, que lo somos, pero el tema lleva así mucho tiempo, y ya muchos, muchos, están tirando la toalla.
Cada uno se lo toma de una forma, desde buscar en el extranjero (conozco a gente que quiere incluso irse del país, olvidarse de España para siempre), hasta probar su lado homosexual, pasando por amargarse la vida y volverse insensible y misógino. Y eso os causa desprecio, y os da risa.
Las mujeres no andáis muy atrás, y estáis, cada vez más, cogiendo odio a los hombres, acabando hartas de siempre lo mismo, y pasándolo mal. Cuando a partir de cierta edad miráis a vuestro alrededor y veis que no estáis bien del todo, que la soledad acecha, que estáis solas, empezáis a pensar que quizá haya que probar suerte y buscar un chico que sea bueno con vosotras, que os quiera y que por una vez os de la felicidad. Pero la inmensa mayoría de los chicos lo han pasado tan mal con vosotras, son, somos y sois tan exigentes, que tras un corto tiempo de relación, lo acabáis dejando por una tontería, y eso se repite una y otra y otra vez. Y cuando dais con alguien que quiera algo más serio, se acaba estropeando, vuelven los prejuicios y las tonterías de toda una vida.
Es muy triste ver como ya no hay hijos de por medio, como las parejas se casan y no tienen descendencia, por un lado por el maldito y sempiterno tema económico, pero por otro, porque ya no hay confianza, ni ganas, y se escudan en “vamos a disfrutar unos años sin niños”, cuando en realidad lo que pasa es que no quieren tenerlos por miedo.
Luego ya del físico, de buscar la perfección en todo, por fuera lo primerísimo, por dentro después, no dejando pasar la más mínima, cuando en el fondo somos los animales más imperfectos, falibles y contradictorios de toda la naturaleza.
La sociedad está enfermando, y yo ya he perdido la esperanza. Diría que reflexionáramos todos, que no alguno, sino todos, tenemos que dar el paso grande de dejar atrás odios, exigencias, actitudes dañinas del pasado, indiferencias, y un largísimo etcétera, pero ya no me quedan fuerzas.
Si, como ha dicho alguna por ahí, nosotros también amamos y sufrimos, siempre lo hemos hecho, pero si esto sigue así, nos vamos a acabar convirtiendo en los monstruos que decís que somos, en los monstruos que algunos son ya. Así que si alguno os pide una oportunidad, aunque sea de hablar, si alguno os pide que lo escuchéis en lugar de descargar sobre él vuestras inseguridades e historias de novios y desamores, si veis que alguno está mal, o puede llegar a estarlo, o se está aborregando por momentos, haced el favor de dar ese primer paso, porque sabéis mejor que nadie que vosotras sois las que podéis, con la paciencia y el tesón que os caracteriza, cambiar esta sociedad y cambiar a los chicos que en ella viven, podéis y podemos ser felices todos juntos.
Sé que esto os va a rebajar, y que al final, al final, es como dice otra por ahí, que no quedarán hombres para las mujeres de este país, que los inmigrantes heredaran, en unas pocas generaciones, España. Y que nos vamos a acabar extinguiendo, como todos los errores evolutivos que la naturaleza ha creado. Lo único que lamento es lo mucho que vamos a sufrir, por momentos, todos y todas hasta que eso ocurra.
Me muero ya, me estoy muriendo por dentro, como muchos, muchísimos de aquí, y tengo miedo de aquello en lo que me puedo convertir, pero si nadie me ayuda, como siempre, percutador y reincarnation man, e incluso watamir, van a parecer niños inocentes a mi lado, porque ya no puedo más, ya no puedo más, de verdad que no. Os juro que no.
Esta es una llamada de auxilio y socorro, no para mi sino para todos, ¿porqué cuando ya todo está perdido es cuando nos damos cuenta?. Sabeis que si esto continua así, todo acabará muy mal, y aunque se pueda arreglar, es una lástima el estado actual de las cosas. Pensad por una vez, por una sola vez, con poner en práctica la tolerancia a lo que no os gusta, con dar esa oportunidad de sanar a los demás, y que os sanen. Pensad con el corazón.
Mujeres, reconoced que la actitud de odio hacia vosotras, aunque alguna en particular no tenga la culpa, en general os la habéis ganado a pulso.
Reconoced que ningún chico se atreve ya a enamorarse, que ninguno quiere sufrir más, y se escudan en la actitud “solo quiero sexo y no me voy a implicar más” desde hace mucho tiempo.
Reconoced que cuando a un chico le empezáis a gustar, este corta los lazos (por débiles que sean) con vosotras, porque saben que van a sufrir.
Reconoced que ya nadie quiere compromoterse más allá de una pequeña temporada, porque tiene miedo, y muchas veces con razón.
Y que cuando se atreve a lanzarse, cuando dice “al diablo con todo”, cuando aun así, se lanza y se implica, pasáis de el como de comer mierda.
Reconoced que esto es así, y que la cosa va a ir a peor, porque hoy lo normal es tener una media de tres a cinco novios / as formales antes de casarse, y que la vida media de un matrimonio hoy día no pasa de los diez años.
Y no digo que vosotras no tengáis vuestras penas y sufrimientos y agonías, que las tenéis, no digo que nosotros no estemos también bien jodidos y que seamos unos cabrones y unos cerdos a veces, que lo somos, pero el tema lleva así mucho tiempo, y ya muchos, muchos, están tirando la toalla.
Cada uno se lo toma de una forma, desde buscar en el extranjero (conozco a gente que quiere incluso irse del país, olvidarse de España para siempre), hasta probar su lado homosexual, pasando por amargarse la vida y volverse insensible y misógino. Y eso os causa desprecio, y os da risa.
Las mujeres no andáis muy atrás, y estáis, cada vez más, cogiendo odio a los hombres, acabando hartas de siempre lo mismo, y pasándolo mal. Cuando a partir de cierta edad miráis a vuestro alrededor y veis que no estáis bien del todo, que la soledad acecha, que estáis solas, empezáis a pensar que quizá haya que probar suerte y buscar un chico que sea bueno con vosotras, que os quiera y que por una vez os de la felicidad. Pero la inmensa mayoría de los chicos lo han pasado tan mal con vosotras, son, somos y sois tan exigentes, que tras un corto tiempo de relación, lo acabáis dejando por una tontería, y eso se repite una y otra y otra vez. Y cuando dais con alguien que quiera algo más serio, se acaba estropeando, vuelven los prejuicios y las tonterías de toda una vida.
Es muy triste ver como ya no hay hijos de por medio, como las parejas se casan y no tienen descendencia, por un lado por el maldito y sempiterno tema económico, pero por otro, porque ya no hay confianza, ni ganas, y se escudan en “vamos a disfrutar unos años sin niños”, cuando en realidad lo que pasa es que no quieren tenerlos por miedo.
Luego ya del físico, de buscar la perfección en todo, por fuera lo primerísimo, por dentro después, no dejando pasar la más mínima, cuando en el fondo somos los animales más imperfectos, falibles y contradictorios de toda la naturaleza.
La sociedad está enfermando, y yo ya he perdido la esperanza. Diría que reflexionáramos todos, que no alguno, sino todos, tenemos que dar el paso grande de dejar atrás odios, exigencias, actitudes dañinas del pasado, indiferencias, y un largísimo etcétera, pero ya no me quedan fuerzas.
Si, como ha dicho alguna por ahí, nosotros también amamos y sufrimos, siempre lo hemos hecho, pero si esto sigue así, nos vamos a acabar convirtiendo en los monstruos que decís que somos, en los monstruos que algunos son ya. Así que si alguno os pide una oportunidad, aunque sea de hablar, si alguno os pide que lo escuchéis en lugar de descargar sobre él vuestras inseguridades e historias de novios y desamores, si veis que alguno está mal, o puede llegar a estarlo, o se está aborregando por momentos, haced el favor de dar ese primer paso, porque sabéis mejor que nadie que vosotras sois las que podéis, con la paciencia y el tesón que os caracteriza, cambiar esta sociedad y cambiar a los chicos que en ella viven, podéis y podemos ser felices todos juntos.
Sé que esto os va a rebajar, y que al final, al final, es como dice otra por ahí, que no quedarán hombres para las mujeres de este país, que los inmigrantes heredaran, en unas pocas generaciones, España. Y que nos vamos a acabar extinguiendo, como todos los errores evolutivos que la naturaleza ha creado. Lo único que lamento es lo mucho que vamos a sufrir, por momentos, todos y todas hasta que eso ocurra.
Me muero ya, me estoy muriendo por dentro, como muchos, muchísimos de aquí, y tengo miedo de aquello en lo que me puedo convertir, pero si nadie me ayuda, como siempre, percutador y reincarnation man, e incluso watamir, van a parecer niños inocentes a mi lado, porque ya no puedo más, ya no puedo más, de verdad que no. Os juro que no.
Esta es una llamada de auxilio y socorro, no para mi sino para todos, ¿porqué cuando ya todo está perdido es cuando nos damos cuenta?. Sabeis que si esto continua así, todo acabará muy mal, y aunque se pueda arreglar, es una lástima el estado actual de las cosas. Pensad por una vez, por una sola vez, con poner en práctica la tolerancia a lo que no os gusta, con dar esa oportunidad de sanar a los demás, y que os sanen. Pensad con el corazón.