Jose David
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- 2 Jul 2006
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Pese a las numerosas veces Que se ha hablado del tema, nunca se ha desarrollado una guía práctica para quedar con gente que se conoce a través de Internet.
¿Qué para qué una guía de este tipo? Pues para evitar situaciones como las descritas en otros hilarantes hilos, malos rollos, situaciones absurdas y ante todo y sobre todo, buscarse un problema sin venir a cuento.
Se oyen hablar de casos de hombres que quedan con chicas en apariencia muy normales y luego resulta que están locas de atar, o chicas que quedan con chicos majos que luego intentan abusar de ellas sexualmente, o las someten a un acoso y derribo telefónico sin venir a cuento.
¿Qué hacer para evitar estas malas situaciones?
Y también, ¿cómo conseguir que una primera cita sea algo exitoso, divertido y queden ganas de repetir?
Lo suyo pues sería dividir esta guía en dos partes, la primera la llamaremos:
EVITA QUE TE JODAN y la segunda DEJA A TU ACOMPAÑANTE FELIZ Y CALDOSO
EVITA QUE TE JODAN
Esto sirve tanto para hombres como para mujeres, pues muchos chicos creen que ellos no tienen que tomar precaución alguna y luego se encuentran con un marrón que no esperaban, y muchas chicas, ilusionadas y confiadas, acaban decepcionadas y asustadas de la experiencia.
1. Analiza a tu posible cita a través de Internet.
No se trata de ser un psicólogo, sino de comprobar que la persona es, al menos en apariencia, mentalmente saludable y promete una cita normal.
Es importante confiar en la intuición. Si una persona te da “malas vibraciones”, es obvio que en persona te va a dar más mal rollo todavía. No es bueno eso de… “le daré una oportunidad, el beneficio de la duda, que igual en persona es mejor”. NO.
Igualmente importante es observar sus cambios de humor. Si transmite urgencia, impaciencia, se muestra exigente cuando tardas en contestar chateando, se enfada, pierde los estribos, desvaría con temas absurdos, habla sólo de ella misma, etc. Es una mala señal.
Es esencial que esa persona no nos “domine” psicológicamente. Si te convence de cosas que no quieres hacer, si te presiona para que aceptes una cita, etc. Estamos en una posición de sumisión que puede llevar a que, una vez en persona, nos incite a hacer cosas que en el fondo no queremos hacer.
Y una última cosa: no dejes que te convenza nunca de quedar en un sitio solitario y apartado, hablaré de esto más adelante.
Para terminar: nunca reveles datos personales tuyos como tu dirección o tu teléfono personal, o donde trabajas. Una persona desequilibrada puede jugarte una mala pasada por revelar demasiado de uno mismo.
2. Siguiente paso: habla por teléfono.
Si vas a quedar con una persona que nunca has visto excepto en alguna foto (porque SIEMPRE debes pedir varias fotos para saber cómo es, y si es posible, veros por cam), es esencial que hables con esa persona por teléfono.
Hablar por teléfono es lo más parecido a tenerlo cerca sin estar cara a cara. Lo que un texto en una pantalla puede llevar a engaño, hablando se puede aclarar. Mira su tono de voz, su forma de hablar, si se anda por las ramas o si te transmite o no confianza. Hablar por teléfono te dirá muchas cosas sobre esa persona hablando por msn se te pasarán por alto.
Y esa es otra, es conveniente tener un móvil de tarjeta que puedas desconectar de forma permanente, un segundo móvil, por decirlo así, pare evitar a pesados y acosadores (sea hombre o mujer, que de los dos hay) que no saben recibir un no por respuesta o no se dan cuenta de cuando ya no se quiere seguir teniendo contacto con ellos. En caso de apuro, se desconecta el móvil durante algunas semanas y se elimina del msn, y ya está.
Si hay alguna duda o mala sensación hablando por teléfono, se puede posponer la cita indefinidamente hasta que te decidas, o anularla. Más vale echarse atrás que tener que arrepentirse.
3. Preparar la cita.
Como he mencionado anteriormente, es importante aclarar todo antes de quedar en persona.
Lo primero: para qué se va a quedar. Si quieres simplemente tomarte una copa con esa persona, y NADA MÁS. Díselo y asegúrate de que lo entiende. Muchos chicos quedan diciendo que sólo quieren tomar algo, pero su intención es llegar a algo más si surge la oportunidad, y buscan usar ese tiempo tomando una copa como trampolín para tener sexo. Déjale claro que NO habrá nada haga lo que haga. Muchas chicas buscan una relación íntima o formal, igualmente pretenden usar esa copa para insinuarse sexualmente o intimar más de de la cuenta, con el fin de enganchar al chico en cuestión. Otras personas simplemente dirán que sí a lo que sea para luego salir por la vía de tarifa y dar rienda suelta a sus paranoias mentales. Huid de ellos como de la peste.
Lo segundo: quedad siempre en un sitio público con mucha gente alrededor. Es esencial porque hay gente que sencillamente no sabe relacionarse adecuadamente con otras personas, y ha encontrado en Internet el filón para quedar con gente y “hacer amigos” o conseguir sexo, para luego dar como resultado hacer pasar por una mala experiencia al ingenuo que no se ha percatado de que esa persona no anda bien de la olla.
Con gente alrededor, si esa persona se pone agresiva, o le dan puntos raros, normalmente se contendrá, y si no lo hace se puede pedir ayuda explicando rápidamente a cualquier persona lo que ocurre.
Lo ideal: una cafetería a una hora que esté frecuentada. Las pocas veces que he quedado con gente de Internet, he propuesto (y me han aceptado) quedar en un centro comercial, para tomar algo en cualquier bar o cafetería de ese mismo centro. Es ideal, porque los centros comerciales tienen gente a cualquier hora del día, y hay incluso personal de seguridad.
Si la persona con la que vais a quedar pone pegas a eso, e insiste mucho en que os veáis a solas, es conveniente plantearse si renunciar a la cita, incluso si la persona finalmente accede a quedar en sitio público, eso ya lo dejo a vuestra discreción.
Procurad que sea la otra persona quien os diga como irá vestida y no lo rebeléis vosotros, así tendréis la ventaja de que podréis reconocer primero a vuestra cita, y el peor de los casos decidir, en el momento final, si dais el paso y los saludáis u os largáis de allí a toda prisa.
4. La cita en si.
Una vez hechas las presentaciones y en la cafetería o bar en cuestión. Es normal que tanto tú como la otra persona estéis un poco cortados y nerviosos. Cada uno reacciona de una manera, y si es bueno tener un poco de tolerancia, siempre dentro de un límite, claro está.
Lo ideal es mencionar cosas al principio de las que se haya hablado por Internet o por teléfono, para tranquilizar a la persona con la que estáis, como diciendo “tranqui que no somos completos desconocidos, algo ya nos conocemos y sabemos el uno del otro”.
Es importante también dejar que la otra persona tenga su espacio, no os acerquéis demasiado a ella, ni manipuléis la conversación. En ese aspecto, yo suelo, si la otra persona es tímida, hablar un poco más e invitar a que participe en la conversación, o si por el contrario es más extrovertida o está más nerviosa que uno mismo, dejar que hable, preguntándole o invitándole a que cuente alguna cosa que requiera algo más que monosílabos.
Lo esencial es romper el hielo, y una vez tomada la confianza, observar si la conversación es relajada o forzada. Si es forzada, no pasa nada por admitir que uno está un poco nervioso o preguntar si la otra persona está nerviosa o se siente cómoda. El MUY IMPORTANTE ser uno mismo y comportarse de forma natural, no adoptar ninguna pose, y por todos los medios mostrarse relajado y tranquilo, intentando transmitir eso a la otra persona.
A partir de ahí, ya cada uno verá si hay posibilidades de echar un buen rato de conversación con la otra persona, o si la cita ha sido un poco forzada y no llevará a nada. Si la otra persona, en algún momento, se comporta de forma extraña o no nos gusta como se está desarrollando la cita, se puede dar por terminada poniendo como excusa que debes irte por… por infinidad de motivos. Una buena baza es ir al servicio un momento, llamar a algún amigo y decirle que te llame en dos o tres minutos fingiendo ser un familiar o algo así, diciéndote que debes volver a casa por cualquier motivo plausible, como que se encuentra mal.
Si en una primera cita vuestro acompañante os pide que paséis a un terreno “más intimo”… eso ya lo dejo al criterio de cada uno, pero yo aconsejaría, especialmente si esa persona no vive a una gran distancia, dejarlo para una segunda cita al menos. Una persona en público puede tener una cara y en privado otra. Como ejemplo os pongo a los maltratadores que tienen aterrorizada a su pareja mientras sus vecinos y amigos no sospechan absolutamente nada. Precaución siempre.
Si al final decidís, por cualquier motivo, intimar más con esa persona, y pasáis a un terreo más privado para hacer guarreridas españolas , es aconsejable ir a un hotel, nunca perderse por ahí con el coche. En un hotel se puede pedir ayuda, y si es necesario, antes de que la cosa se ponga fea, se puede llamar a la policía. Más vale tener que pedir disculpas después, e incluso quedar mal, que tener que lamentarlo luego.
Si la cita ha ido bien, en una segunda cita se pueden relajar un poco las barreras, pero siempre hay que tener una cierta precaución hasta que se conozca bien, cara a cara, a esa persona, y aun así, y eso vale tanto para gente que conozcáis por Internet como para gente que os hayáis conocido en cualquier otro sitio, tened en cuenta que nunca se conoce del todo a una persona.
Un bechi y felices citas interneteras.
¿Qué tal una quedada, hijos de puta?
Os toca completar esta guía, vuestra opinión y críticas, a poder ser constructivas.
P.D. Es importante aclarar que todas estas precauciones son para prevenir situaciones conflictivas o de riesgo, pero no quieren dar a entender que todas las personas con las que se quede por Internet sean así. La inmensa mayoría es gente relativamente normal, que buscan amistad, o incluso sexo, pero que se alejan de los malos rollos tanto como vosotros. Pero por desgracia hay algunos con una tremenda inadaptación social que pueden hacernos pasar malos ratos (hablo por experiencia) y si se pueden evitar, mejor. Ya que cada uno adopte las precauciones que quiera.
P.D. Aviso para gente “rarita”: si, esto va para vosotros, inadaptados sociales que sabéis que no estáis bien de la cabeza. Si necesitáis amigos, si deseáis sexo, si buscáis una relación social, pero sabéis que no estáis capacitados para encontrarla saliendo a la calle, quedando por Internet no será distinto.
Quedar por Internet es equivalente a que un amigo o familiar llegue y os diga: te presento a esta persona, os dejo solos. Antes de hacer pasar un mal rato a otra persona que NO TIENE LA CULPA DE VUESTRAS NEURAS, buscad ayuda profesional, no es nada malo. Un buen psicólogo puede ayudaros a sentiros mejor con vosotros mismos y a tener unas buenas y normales relaciones sociales. Si forzáis las cosas, como mínimo vais a frustraros y pasarlo mal, y si seguís insistiendo, hay penas muy duras para los cabrones que no entienden que no se puede forzar a otra persona a ser amigos o amantes vuestros. Avisados estáis.
P.D. Aviso para misóginos: aunque sois gente normal que se ha visto jodida en la vida por culpa de las mujeres, o de vuestra actitud hacia ellas, tened en cuenta que alguien que se ve así mismo como misógino NUNCA podrá establecer una relación buena con una mujer hasta que se libere de dicha misoginia. Una cosa es prevenir malas situaciones y otra distinta odiar a la generalidad de las mujeres. Lo primero es lo primero. Y vuestros sentimientos y pensamientos pueden hacer pasar por una mala experiencia a alguna mujer que no tiene culpa de nada. Esto también es aplicable a las feministas que creen sinceramente que los hombres son inferiores a las mujeres.
¿Qué para qué una guía de este tipo? Pues para evitar situaciones como las descritas en otros hilarantes hilos, malos rollos, situaciones absurdas y ante todo y sobre todo, buscarse un problema sin venir a cuento.
Se oyen hablar de casos de hombres que quedan con chicas en apariencia muy normales y luego resulta que están locas de atar, o chicas que quedan con chicos majos que luego intentan abusar de ellas sexualmente, o las someten a un acoso y derribo telefónico sin venir a cuento.
¿Qué hacer para evitar estas malas situaciones?
Y también, ¿cómo conseguir que una primera cita sea algo exitoso, divertido y queden ganas de repetir?
Lo suyo pues sería dividir esta guía en dos partes, la primera la llamaremos:
EVITA QUE TE JODAN y la segunda DEJA A TU ACOMPAÑANTE FELIZ Y CALDOSO
EVITA QUE TE JODAN
Esto sirve tanto para hombres como para mujeres, pues muchos chicos creen que ellos no tienen que tomar precaución alguna y luego se encuentran con un marrón que no esperaban, y muchas chicas, ilusionadas y confiadas, acaban decepcionadas y asustadas de la experiencia.
1. Analiza a tu posible cita a través de Internet.
No se trata de ser un psicólogo, sino de comprobar que la persona es, al menos en apariencia, mentalmente saludable y promete una cita normal.
Es importante confiar en la intuición. Si una persona te da “malas vibraciones”, es obvio que en persona te va a dar más mal rollo todavía. No es bueno eso de… “le daré una oportunidad, el beneficio de la duda, que igual en persona es mejor”. NO.
Igualmente importante es observar sus cambios de humor. Si transmite urgencia, impaciencia, se muestra exigente cuando tardas en contestar chateando, se enfada, pierde los estribos, desvaría con temas absurdos, habla sólo de ella misma, etc. Es una mala señal.
Es esencial que esa persona no nos “domine” psicológicamente. Si te convence de cosas que no quieres hacer, si te presiona para que aceptes una cita, etc. Estamos en una posición de sumisión que puede llevar a que, una vez en persona, nos incite a hacer cosas que en el fondo no queremos hacer.
Y una última cosa: no dejes que te convenza nunca de quedar en un sitio solitario y apartado, hablaré de esto más adelante.
Para terminar: nunca reveles datos personales tuyos como tu dirección o tu teléfono personal, o donde trabajas. Una persona desequilibrada puede jugarte una mala pasada por revelar demasiado de uno mismo.
2. Siguiente paso: habla por teléfono.
Si vas a quedar con una persona que nunca has visto excepto en alguna foto (porque SIEMPRE debes pedir varias fotos para saber cómo es, y si es posible, veros por cam), es esencial que hables con esa persona por teléfono.
Hablar por teléfono es lo más parecido a tenerlo cerca sin estar cara a cara. Lo que un texto en una pantalla puede llevar a engaño, hablando se puede aclarar. Mira su tono de voz, su forma de hablar, si se anda por las ramas o si te transmite o no confianza. Hablar por teléfono te dirá muchas cosas sobre esa persona hablando por msn se te pasarán por alto.
Y esa es otra, es conveniente tener un móvil de tarjeta que puedas desconectar de forma permanente, un segundo móvil, por decirlo así, pare evitar a pesados y acosadores (sea hombre o mujer, que de los dos hay) que no saben recibir un no por respuesta o no se dan cuenta de cuando ya no se quiere seguir teniendo contacto con ellos. En caso de apuro, se desconecta el móvil durante algunas semanas y se elimina del msn, y ya está.
Si hay alguna duda o mala sensación hablando por teléfono, se puede posponer la cita indefinidamente hasta que te decidas, o anularla. Más vale echarse atrás que tener que arrepentirse.
3. Preparar la cita.
Como he mencionado anteriormente, es importante aclarar todo antes de quedar en persona.
Lo primero: para qué se va a quedar. Si quieres simplemente tomarte una copa con esa persona, y NADA MÁS. Díselo y asegúrate de que lo entiende. Muchos chicos quedan diciendo que sólo quieren tomar algo, pero su intención es llegar a algo más si surge la oportunidad, y buscan usar ese tiempo tomando una copa como trampolín para tener sexo. Déjale claro que NO habrá nada haga lo que haga. Muchas chicas buscan una relación íntima o formal, igualmente pretenden usar esa copa para insinuarse sexualmente o intimar más de de la cuenta, con el fin de enganchar al chico en cuestión. Otras personas simplemente dirán que sí a lo que sea para luego salir por la vía de tarifa y dar rienda suelta a sus paranoias mentales. Huid de ellos como de la peste.
Lo segundo: quedad siempre en un sitio público con mucha gente alrededor. Es esencial porque hay gente que sencillamente no sabe relacionarse adecuadamente con otras personas, y ha encontrado en Internet el filón para quedar con gente y “hacer amigos” o conseguir sexo, para luego dar como resultado hacer pasar por una mala experiencia al ingenuo que no se ha percatado de que esa persona no anda bien de la olla.
Con gente alrededor, si esa persona se pone agresiva, o le dan puntos raros, normalmente se contendrá, y si no lo hace se puede pedir ayuda explicando rápidamente a cualquier persona lo que ocurre.
Lo ideal: una cafetería a una hora que esté frecuentada. Las pocas veces que he quedado con gente de Internet, he propuesto (y me han aceptado) quedar en un centro comercial, para tomar algo en cualquier bar o cafetería de ese mismo centro. Es ideal, porque los centros comerciales tienen gente a cualquier hora del día, y hay incluso personal de seguridad.
Si la persona con la que vais a quedar pone pegas a eso, e insiste mucho en que os veáis a solas, es conveniente plantearse si renunciar a la cita, incluso si la persona finalmente accede a quedar en sitio público, eso ya lo dejo a vuestra discreción.
Procurad que sea la otra persona quien os diga como irá vestida y no lo rebeléis vosotros, así tendréis la ventaja de que podréis reconocer primero a vuestra cita, y el peor de los casos decidir, en el momento final, si dais el paso y los saludáis u os largáis de allí a toda prisa.
4. La cita en si.
Una vez hechas las presentaciones y en la cafetería o bar en cuestión. Es normal que tanto tú como la otra persona estéis un poco cortados y nerviosos. Cada uno reacciona de una manera, y si es bueno tener un poco de tolerancia, siempre dentro de un límite, claro está.
Lo ideal es mencionar cosas al principio de las que se haya hablado por Internet o por teléfono, para tranquilizar a la persona con la que estáis, como diciendo “tranqui que no somos completos desconocidos, algo ya nos conocemos y sabemos el uno del otro”.
Es importante también dejar que la otra persona tenga su espacio, no os acerquéis demasiado a ella, ni manipuléis la conversación. En ese aspecto, yo suelo, si la otra persona es tímida, hablar un poco más e invitar a que participe en la conversación, o si por el contrario es más extrovertida o está más nerviosa que uno mismo, dejar que hable, preguntándole o invitándole a que cuente alguna cosa que requiera algo más que monosílabos.
Lo esencial es romper el hielo, y una vez tomada la confianza, observar si la conversación es relajada o forzada. Si es forzada, no pasa nada por admitir que uno está un poco nervioso o preguntar si la otra persona está nerviosa o se siente cómoda. El MUY IMPORTANTE ser uno mismo y comportarse de forma natural, no adoptar ninguna pose, y por todos los medios mostrarse relajado y tranquilo, intentando transmitir eso a la otra persona.
A partir de ahí, ya cada uno verá si hay posibilidades de echar un buen rato de conversación con la otra persona, o si la cita ha sido un poco forzada y no llevará a nada. Si la otra persona, en algún momento, se comporta de forma extraña o no nos gusta como se está desarrollando la cita, se puede dar por terminada poniendo como excusa que debes irte por… por infinidad de motivos. Una buena baza es ir al servicio un momento, llamar a algún amigo y decirle que te llame en dos o tres minutos fingiendo ser un familiar o algo así, diciéndote que debes volver a casa por cualquier motivo plausible, como que se encuentra mal.
Si en una primera cita vuestro acompañante os pide que paséis a un terreno “más intimo”… eso ya lo dejo al criterio de cada uno, pero yo aconsejaría, especialmente si esa persona no vive a una gran distancia, dejarlo para una segunda cita al menos. Una persona en público puede tener una cara y en privado otra. Como ejemplo os pongo a los maltratadores que tienen aterrorizada a su pareja mientras sus vecinos y amigos no sospechan absolutamente nada. Precaución siempre.
Si al final decidís, por cualquier motivo, intimar más con esa persona, y pasáis a un terreo más privado para hacer guarreridas españolas , es aconsejable ir a un hotel, nunca perderse por ahí con el coche. En un hotel se puede pedir ayuda, y si es necesario, antes de que la cosa se ponga fea, se puede llamar a la policía. Más vale tener que pedir disculpas después, e incluso quedar mal, que tener que lamentarlo luego.
Si la cita ha ido bien, en una segunda cita se pueden relajar un poco las barreras, pero siempre hay que tener una cierta precaución hasta que se conozca bien, cara a cara, a esa persona, y aun así, y eso vale tanto para gente que conozcáis por Internet como para gente que os hayáis conocido en cualquier otro sitio, tened en cuenta que nunca se conoce del todo a una persona.
Un bechi y felices citas interneteras.
¿Qué tal una quedada, hijos de puta?
Os toca completar esta guía, vuestra opinión y críticas, a poder ser constructivas.
P.D. Es importante aclarar que todas estas precauciones son para prevenir situaciones conflictivas o de riesgo, pero no quieren dar a entender que todas las personas con las que se quede por Internet sean así. La inmensa mayoría es gente relativamente normal, que buscan amistad, o incluso sexo, pero que se alejan de los malos rollos tanto como vosotros. Pero por desgracia hay algunos con una tremenda inadaptación social que pueden hacernos pasar malos ratos (hablo por experiencia) y si se pueden evitar, mejor. Ya que cada uno adopte las precauciones que quiera.
P.D. Aviso para gente “rarita”: si, esto va para vosotros, inadaptados sociales que sabéis que no estáis bien de la cabeza. Si necesitáis amigos, si deseáis sexo, si buscáis una relación social, pero sabéis que no estáis capacitados para encontrarla saliendo a la calle, quedando por Internet no será distinto.
Quedar por Internet es equivalente a que un amigo o familiar llegue y os diga: te presento a esta persona, os dejo solos. Antes de hacer pasar un mal rato a otra persona que NO TIENE LA CULPA DE VUESTRAS NEURAS, buscad ayuda profesional, no es nada malo. Un buen psicólogo puede ayudaros a sentiros mejor con vosotros mismos y a tener unas buenas y normales relaciones sociales. Si forzáis las cosas, como mínimo vais a frustraros y pasarlo mal, y si seguís insistiendo, hay penas muy duras para los cabrones que no entienden que no se puede forzar a otra persona a ser amigos o amantes vuestros. Avisados estáis.
P.D. Aviso para misóginos: aunque sois gente normal que se ha visto jodida en la vida por culpa de las mujeres, o de vuestra actitud hacia ellas, tened en cuenta que alguien que se ve así mismo como misógino NUNCA podrá establecer una relación buena con una mujer hasta que se libere de dicha misoginia. Una cosa es prevenir malas situaciones y otra distinta odiar a la generalidad de las mujeres. Lo primero es lo primero. Y vuestros sentimientos y pensamientos pueden hacer pasar por una mala experiencia a alguna mujer que no tiene culpa de nada. Esto también es aplicable a las feministas que creen sinceramente que los hombres son inferiores a las mujeres.