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REFRESCOS CASEROS
Puede parecer extraño a la par que extravagante hablar de la elaboración de refrescos en casa, siendo como son un producto intrínsecamente comercial a la par que poco saludable.
Pero afrontemos la realidad: casi todos consumimos refrescos, incluyendo dentro de estos las populares bebidas energéticas como el red bull, las sodas, las tónicas y una amplia variedad de productos carbonatados, con y sin calorías.
Igualmente, el precio de las grandes marcas de refrescos, que son las únicas que tienen cierta calidad y no saben a caca, están por las nubes, y para consumidores habituales de refrescos, son un buen pellizco para el bolsillo al cabo del año o incluso del mes.
Y mi argumento definitivo: Somos foreros.
Bebemos refrescos y comemos risketos, y eso ya es motivo suficiente y necesario para crear un hilo destinado a la creación de refrescos caseros de al menos la misma calidad que las mejores marcas, y ahorrándonos un amplio porcentaje del dinero que gastamos actualmente en ellos.
COMPONENTES DE LOS REFRESCOS
Todo refresco se compone de tres elementos esenciales:
EL AGUA: La base de cualquier refresco, que compone el 95 % de este.
EL CO2: Esta agua suele estar carbonatada en mayor o menor grado, produciendo las conocidas burbujitas que lo hacen tan disfrutable.
EL SIROPE: Cada refresco tiene, según su composición, un sirope o jarabe, que condensa los ingredientes y azucares que componen el refresco.
Estos ingredientes suelen ser celosamente guardados por el fabricante, hasta extremos como Coca Cola y sus ya famosos dos únicos conocedores de la receta, su secretismo en su fabricación y el desconocimiento absoluto por parte de las fábricas de qué compone dicho jarabe.
Para algunos refrescos tradicionales, en cambio, los ingredientes del sirope no son ningún misterio, y forman parte del saber popular cómo se elabora. Siendo este tipo de refrescos normalmente compuestos únicamente por el agua y el sirope disuelto en esta.
Para fabricar refrescos caseros necesitamos una inversión inicial en las herramientas necesarias para fabricarlos, especialmente para el proceso de carbonatado, y por supuesto, necesitaremos tener acceso a los siropes de calidad necesarios para elaborar refrescos indistinguibles de los originales, así como acceso a conocimientos para fabricar nuestros propios siropes personalizados.
Antes de seguir con el hilo, igual habría que hablar de dinero y algunas otras cosas, ya que la pregunta ¿hasta qué punto merece la pena hacer los refrescos en casa? debe ser respondida en tres frentes: El sabor, la comodidad, y el ahorro para el bolsillo.
EL SABOR: Si queréis coca cola, fanta o kas, sprite, red bull, tónica, etc. Es posible hoy día fabricar estos refrescos en casa y no distinguirlos del original.
LA COMODIDAD: Puede parecer más cómodo ir a la tienda y comprar el refresco, tal cual, pero la realidad es que es justo al contrario. Elaborar el refresco en casa puede ser más cómodo y aumentar su calidad ya que nos ahorramos desplazarnos al supermercado o tienda, especialmente esos días que nos hemos quedado sin coca cola y salimos a la calle casi exclusivamente a comprar una botella.
Y la calidad también aumenta, ya que al estar recién elaborado, tiene más sabor y su carbonatación es mayor, o incluso digo más: podemos darle justo la carbonatación que queramos, incluso superior a la que nos venden en la tienda, lo que yo particularmente agradezco, ya que me jode y mucho los productos que pierden CO2 a medida que se van consumiendo, o que ya traen poco de entrada.
EL DINERO: Cada litro de refresco "comercial" (coca cola, fanta, seven up, red bull...) sale por unos veinte céntimos aproximadamente, lo que nos da unos cuarenta céntimos por un refresco de dos litros.
Se podría pensar que eso mismo valen algunos refrescos marca blanca, pero aquí hablamos de un sabor indistinguible o incluso mejor que el de los refrescos más reconocidos, que valen mucho más.
En cuanto a los refrescos personalizados, nos pueden salir a un ridículo precio de cinco céntimos por litro.
Otra cosa es la inversión en la "maquinaria" para fabricar estos refrescos, que no es alta en modo alguno, pero tampoco se puede decir esté tirada de precio. Lo bueno es que una vez adquirida, ya podremos elaborar los refrescos en casa de por vida, y podremos prescindir de los comprados en las grandes superficies.
En cuanto a ventajas añadidas, podemos fabricar una serie de delicatesen que nos será imposible o muy dificil encontrar comercialmente: refresco de café arábico, refrescos de té, y refrescos inexistentes como por ejemplo de melón con caramelo, de platano a la canela, o de fresas y mango. Toda una delicia de combinaciones que nos harán disfrutar mucho más de beber refrescos bien fríos en este verano en el que entramos.
Así pues, y sin dilatar más el asunto, vamos a ver qué necesitamos para su elaboración y cómo fabricarlos en nuestra propia casa.
HERRAMIENTAS NECESARIAS PARA LA ELABORACIÓN DE REFRESCOS
FILTROS DE AGUA:
Para hacer un buen refresco, el agua tiene que estar libre de cal, cloro, sedimentos y demás componentes que alteren su sabor u olor.
Para esto, nada mejor que instalar unos filtros de agua en casa, que nos servirán para purificar el agua del grifo y hacerla apta para el consumo y por supuesto para nuestros refrescos.
Hablo, por supuesto, de zonas donde el agua roza la potabilidad. En ciudades como Madrid o Granada, evidentemente no es necesario, pero en sitios donde habitualmente hay que comprar agua embotellada para consumo humano, lo ideal es tener instalados estos filtros.
La alternativa, por supuesto, es el agua embotellada, preferiblemente de manantial, que nos saldrá más cara pero al menos no necesitamos hacer una gran inversión inicial.
Sea como fuere, debe quedar claro que para la elaboración de un buen refresco, un buen café o una buena cerveza artesanal, es necesaria un agua limpia y de buen sabor, preferiblemente mineral, de manantial, o al menos embotellada de calidad.
El 95 % de nuestro refresco está compuesto del agua que utilicéis, y hasta en los refrescos de marca blanca se usa agua de calidad, para evitar problemas de distorsiones de aroma o cambios extraños y desagradables de sabor.
BATIDORA:
Para la elaboración de siropes, se nos hace imprescindible una batidora, ya sea de brazo o americana, de las de vaso de cristal o plástico.
MENAJE DE COCINA: CAZOS, SARTENES, CUCHARAS DE MADERA, RECIPIENTES HERMÉTICOS DE CRISTAL, ETC.
Desde hacer caramelo tostado con el azucar, hasta diluirla con fruta batida, se hace necesario disponer de materiales de cocina variado.
Igualmente, el almacenaje de los siropes debe ser apropiado, y para ello lo mejor con botes o botellas de cristal.
CARBONATADORA
Lo que vamos a carbonatar, es decir, llenar de burbujitas de CO2, es el agua, para lo cual necesitaremos herramientas que nos permitan hacerlo.
Podemos construir una carbonatadora casera nosotros mismos, no es nada difícil, pero también las hay disponibles en el mercado. Más adelante veremos las dos opciones y cúal de las dos puede ser más conveniente según el caso.
REFRIGERADOR
Es evidente que lo normal es usar el refrigerador normal de casa, pero existen unas alternativas muy curiosas que nos permiten refrigerar dos o incluso una sola botella con un coste eléctrico mínimo, y mantenerla fría durante el consumo, lo cual es ideal en verano.
Para esto, siempre me han gustado los pequeños refrigeradores y los enfriadores de botellas.
Incluso hay mini refrigeradores para latas usb (que normalmente se conectan a la regleta mediante un adaptador de enchufe, no al propio ordenador. Aunque en este caso, al usar como usaremos botellas de al menos un litro de capacidad, no le daremos uso, pero lo pongo por si queréis mantener fría la lata de refresco en vuestra propia habitación.
ELABORACIÓN DE REFRESCOS CASEROS
EL SIROPE:
Es como hemos mencionado antes, un jarabe que se diluye en agua, cuya composición puede ser tan compleja como deseemos, pero que tiene como función la de dar sabor (normalmente dulce) y aroma.
Los elementos más comunes en un sirope de refrescos suelen ser azucares, zumos de frutas, hierbas aromáticas y especias varias (canela, vainilla, etc)
EL AGUA:
Bien filtrada o embotellada, preferiblemente de manantial. Dependiendo del tipo de agua, el sabor e incluso aroma final se verá comprometido a esta.
EL CARBONATADO:
Realizado por métodos naturales (fermentación de azucares) o artificiales (imprimiendo el CO2 en el agua mediante presión)
LA DILUCIÓN Y MEZCLA:
El proceso de la dilución del sirope en el agua debe ser siempre después del carbonatado.
El esquema es el siguiente:
1. Enfriamiento del agua y colocación en la botella a carbonatar.
2. Carbonatación del agua (normalmente por presión mediante gasificador de CO2)
3. Introducción de la cantidad apropiada de sirope en el agua (siempre después del carbonatado) procurando no liberar el CO2. De forma suave y sin agitar de forma brusca la botella.
4. Dejar que el sirope se diluya completamente en el agua carbonatada y consumir, o volver a refrigerar la botella hasta el momento de ser consumido el contenido.
EL PRE Y POST ENFRIADO:
El agua debe enfriarse antes de ser carbonatada para facilitar el proceso de absorción del CO2. Normalmente en el frigorífico o congelador, hasta una temperatura aproximada de dos a cuatro grados 2 ºC - 4 ºC
Una vez carbonatada el agua y mezclado con el sirope, puede ponerse el tapón, dejando hermético el recipiente, y puede volver a refrigerarse si el consumo será recientemente.
Si no se va a consumir en los próximos días, se puede dejar que adquiera la temperatura ambiente, pero es importante volver a refrigerarlo al menos a 4 ºC, para evitar la liberación del CO2 del líquido y disfrutar más de la experiencia del refresco que, como su propio nombre indica, tiene la función de refrescar.
EL CONSUMO:
Normalmente los refrescos caseros se realizan en botellas de uno o dos litros. En cualquier caso, es recomendable consumirlos una vez abierta la botella, pues a mayor cantidad de refresco consumido, más aire quedará en la botella y más CO2 se liberará del refresco restante hasta que la presión dentro de la botella se equilibre.
Una vez mezclado el sirope, no se puede volver a carbonatar la bebida, pues eso puede estropear la máquina gasificadora, y además es mucho más difícil para el líquido con sirope absorber el CO2.
RECETAS DE SIROPES CASEROS
Se podría argumentar que por qué no se añaden los ingredientes del refresco casero directamente al agua carbonatada, y hay que elaborar un sirope.
La respuesta es que si vamos añadiendo ingredientes al agua carbonatada, hay que diluirlos en ella, y a mayor cantidad y variedad, más habrá que agitar y remover dichos ingredientes para que se distribuyan uniformemente, lo que casi con toda seguridad liberará la mayor parte del CO2 del agua, perdiendo el gas.
Si en cambio tenemos preparado el sirope ya batido y líquido, sólo se necesitará dejar que se diluya por sí mismo, quizá con la simple ayuda de poner lentamente la botella cerrada boca abajo y luego, despacio, volver a ponerla de pie.
Además, si realizamos el sirope, sólo necesitaremos hacer el preparado una vez, lo que hace más cómodo la preparación de más refresco, así como asegura que el sabor y aroma de cada refresco elaborado con ese sirope sea idéntico.
CONSIDERACIONES FINALES
Una vez concretado y resumido el proceso y las herramientas necesarias para elaborar el refresco, vamos a ver en siguientes post ejemplos prácticos tanto de las herramientas específicas que podemos comprar (y dónde comprarlos), como de siropes disponibles en el mercado (y, de nuevo, dónde adquirirlos), así como ejemplos prácticos y recetas, para elaborar nuestros propios siropes caseros.
Todo esto con ejemplos prácticos de cómo realizar nuestros refrescos con diferentes instrumentos.
En los siguientes post:
REFRESCOS CASEROS SODASTREAM.
BOMBONAS DE CO2 DE GRAN TAMAÑO.
GASIFICADOR CASERO Y GASIFICADOR SEMIPROFESIONAL.
EMBOTELLADO DE REFRESCOS.
SIROPES ARTESANALES.
GASIFICACIÓN NATURAL.
COMPLEMENTOS Y CURIOSIDADES.
Muerto por dentro
Frikazo
121:121
Muerto por dentro+
Freak
Veterano
Clásico