Lo más parecido al sexo que he tenido yo fue una vez que al terminar la boda de un primo mio se fueron varios de los invitados de putas y me llevaron a un puticlub para que me desvirgaran después de darme toda la noche la vara entre carcajadas con que yo era virgen, y aunque yo dije que no, que había tenido una novia (era falso pero me daba vergüenza reconocerlo), ellos se rieron de mi y me pagaron una prostituta. La prostituta me llevó a un cuarto y al quitarme los pantalones se tapó la nariz al oler mi apestosa zona genital y me dijo que me lavase o no había polvo, yo me fui al lavabo y me puse un poco de agua con colonia. Luego volví a la cama y apenas ella acercó la cabeza a mi erecto pene me corrí, sin tan siquiera haberme tocado.