MELON Y MICROONDAS
Antes de descubrir las real dolls acostumbraba a comprar un melón (cuyo diámetro debía ser mayor que mi pene, es decir unos 13 cms. mínimo) y meterlo en el microondas a temperatura media durante unos 30 minutos. El interior se hacía pastoso pero estaba algo consistente, por lo que yo agujereba el melón con algún sacacorchos e introducía el pene dentro.
No os imagináis el placer si no lo habéis probado: estaba blandito como un coño y, lo que es mejor, calentito. Yo me lo follaba con los ojos cerrados pensando que era alguna chica de mi clase y cuando me corría estaba tan excitado que todavía le seguía dando hasta que se me desempalmaba. Eso sí, cuidado con las pepitas, se te pueden meter por el agujero del prepucio.
Luego acostumbraba a quitar la cáscara del melón y hace un batido con lo de dentro -que contenía mi semen-, ¡y esa noche en mi casa todos tomábamos batido de postre! Me encantaba ver cómo mi madre y mi padre se llenaban los labios de batido y me decían "¡qué rico está!", creyendo que su hijo era inocente e inofensivo.
RATÓN EN EL CULO
Una práctica muy extendida en EEUU, hasta tal punto que alarmó a las protectoras de animales que avisaron al gobierno para que la prohibiera.
La cosa consiste en pillar un ratoncito de campo vivo e introducirlo dentro de un condón de penetración anal (éstos son más gordos: un preservativo corriente lo puede romper con sus uñitas y desgarrarte el ano), y luego introducir el ratón envuelto por el ano.
El recto presiona al ratón, que se va asfixiando poco a poco, y éste no hace otra cosa que patalear y moverse dentro del culo, es lo más. A medida que se va ahogando se retuerce -aconsejo colocarlo cerca de la próstata para mayor placer- y notas cuándo le falta el aire y se está muriendo porque se queda tieso dentro del culo y le dan unos espasmos muy leves. Luego se saca el preservativo y se le da de comer el ratón al perro.
AUTOFELACIÓN
Hace unos cuantos años tenía la flexibilidad necesaria para llegar con mis labios a la punta de mi ciruelo. Era frustante no poder cubrir con la boca más allá del prepucio, pero le saqué buen partido de la siguiente manera: cuando veía que iba a salir el líquido preseminal ponía la boca y lo saboreaba, esto me excitaba sobremanera, me imaginaba que si seguía masturbándome al final iba a salir el lefazo gordo y saborearlo era para mí solito hasta la última gota.
Probar mi propio semen al eyacular me excitaba mucho, me imaginaba que era una actriz porno y estaba siendo sometida por un montón de negros. Lo malo es que como sólo me corría yo la cosa se acababa en seguida, pero yo intentaba alargar el proceso segregando saliva para notarme la boca más llena de mi semen.
También hay que probar lo de poner la cara cerca y eyacularte en ella para que se te manchen los labios, la nariz y los ojos. Yo siempre que hago esto me miro al espejo la cara llena de lefa y me pone un montón.
Una vez intenté eyacular en mi orificio nasal pero me excité mucho con el orgasmo, aspiré y se me metió el semen muy adentro y tardó varios días en salir.
-----------------------------------------------------------
Voy a ducharme y leo vuestros ingeniosos comentarios y vuestras graciosas anécdotas
Antes de descubrir las real dolls acostumbraba a comprar un melón (cuyo diámetro debía ser mayor que mi pene, es decir unos 13 cms. mínimo) y meterlo en el microondas a temperatura media durante unos 30 minutos. El interior se hacía pastoso pero estaba algo consistente, por lo que yo agujereba el melón con algún sacacorchos e introducía el pene dentro.
No os imagináis el placer si no lo habéis probado: estaba blandito como un coño y, lo que es mejor, calentito. Yo me lo follaba con los ojos cerrados pensando que era alguna chica de mi clase y cuando me corría estaba tan excitado que todavía le seguía dando hasta que se me desempalmaba. Eso sí, cuidado con las pepitas, se te pueden meter por el agujero del prepucio.
Luego acostumbraba a quitar la cáscara del melón y hace un batido con lo de dentro -que contenía mi semen-, ¡y esa noche en mi casa todos tomábamos batido de postre! Me encantaba ver cómo mi madre y mi padre se llenaban los labios de batido y me decían "¡qué rico está!", creyendo que su hijo era inocente e inofensivo.
RATÓN EN EL CULO
Una práctica muy extendida en EEUU, hasta tal punto que alarmó a las protectoras de animales que avisaron al gobierno para que la prohibiera.
La cosa consiste en pillar un ratoncito de campo vivo e introducirlo dentro de un condón de penetración anal (éstos son más gordos: un preservativo corriente lo puede romper con sus uñitas y desgarrarte el ano), y luego introducir el ratón envuelto por el ano.
El recto presiona al ratón, que se va asfixiando poco a poco, y éste no hace otra cosa que patalear y moverse dentro del culo, es lo más. A medida que se va ahogando se retuerce -aconsejo colocarlo cerca de la próstata para mayor placer- y notas cuándo le falta el aire y se está muriendo porque se queda tieso dentro del culo y le dan unos espasmos muy leves. Luego se saca el preservativo y se le da de comer el ratón al perro.
AUTOFELACIÓN
Hace unos cuantos años tenía la flexibilidad necesaria para llegar con mis labios a la punta de mi ciruelo. Era frustante no poder cubrir con la boca más allá del prepucio, pero le saqué buen partido de la siguiente manera: cuando veía que iba a salir el líquido preseminal ponía la boca y lo saboreaba, esto me excitaba sobremanera, me imaginaba que si seguía masturbándome al final iba a salir el lefazo gordo y saborearlo era para mí solito hasta la última gota.
Probar mi propio semen al eyacular me excitaba mucho, me imaginaba que era una actriz porno y estaba siendo sometida por un montón de negros. Lo malo es que como sólo me corría yo la cosa se acababa en seguida, pero yo intentaba alargar el proceso segregando saliva para notarme la boca más llena de mi semen.
También hay que probar lo de poner la cara cerca y eyacularte en ella para que se te manchen los labios, la nariz y los ojos. Yo siempre que hago esto me miro al espejo la cara llena de lefa y me pone un montón.
Una vez intenté eyacular en mi orificio nasal pero me excité mucho con el orgasmo, aspiré y se me metió el semen muy adentro y tardó varios días en salir.
-----------------------------------------------------------
Voy a ducharme y leo vuestros ingeniosos comentarios y vuestras graciosas anécdotas