Últ. vez hoy a las...

Sr. Brans

RangoFrikazo
Registro
18 Abr 2009
Mensajes
13.565
Reacciones
9.907
El hombre ha recibido una herramienta. Una herramienta que, creo que como ya he comentado alguna vez por aquí, no sabe usar.

En la era tecnológica en la que estamos a 3 tardes de que Google Glass[SUP]®[/SUP] nos brinde cantidades ingentes de lol, de porno amateur POV desde el baño de la oficina (donde sacamos toda nuestra leche bien espesa), de Kigñé[SUP]®[/SUP] reconociendo si tu amigo está debajo de la cama para ver gratis una película por la que no ha pagado, en definitiva que sabemos todo de todos. Sabemos demasiado.

Qué cojones tiene todo esto que ver con el rapiñas os preguntareis, bien, tiene que ver con que desde que sabemos demasiado gracias a los smartphones, al whatsapp y a su puta madre en bicicleta tenemos más discusiones que nunca.

Fabio Fusaro decía en sus libros que si una ex-novia te veía conectado al messenger era como estar en la puerta de su habitación, te tenía controlado. Y es verdad, nos pasa a todos. Cuando vemos esto
diapo85567c89434a33f26f63b8bfff4ad6dd.png
o esto
diapof398890e46f9d6a2c7beffbf5989e80b.jpg
no pensamos lo lógico, que sería pensar que quien sea está a su rollo y de vez en cuando mirando eso. No, nos pensamos que el/lainterfecto/a está mirando fijamente el teléfono/ordenador, pendientes de todo lo que escribimos o no, y peor aún, nos tomamos esto
diapo85567c89434a33f26f63b8bfff4ad6dd.png
y esto
diapof398890e46f9d6a2c7beffbf5989e80b.jpg
como un dogma de fe infalible.

38278876.jpg


Porque la gente hace con esto como con el informe sobre el tiempo, lo toma como 100% exacto y ni mucho menos.

Volviendo al tema rapiñero, he visto como estas gilipolleces, que normalmente quedarían en un malentendido que haría ruborizar a los afectados de vergüenza por haber discutido por semejante gilipollez, ha sido en no pocas ocasiones objeto de las más iracundas discusiones que recuerdo. Ayer mismo sin ir más lejos, una amiga se cogió un berrinche digno de quinceañera porque su pareja había marcado con un
facebook-boton-me-gusta.jpg
fotos de otra tía. "Es que me dijo que estaba trabajando el muy hijo de puta", claro, todos sabemos que en el curro dejas el teléfono en una caja al entrar y te lo devuelven al salir.

En fin, no me extiendo más con semejante truño de hilo que acabo de cagar, quería desahogarme más que nada. Podeis postear las discusiones más WTF? que hayais tenido/presenciado por culpa de esos inventos del diablo llamados Smarthpone o dejar que el hilo caiga por su propio peso, lo que considereis más oportuno.

BONUS TRACK:
Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.
 
A dios gracias, a mi pareja no le van mucho las nuevas tecnologías y pasa del Whatsapp.
 
Hoy en el metro he puesto la oreja a una conversación que no sabía en qué hilo meter, pero va a ser en este sin duda.

La protagonista llamaba a una amiga suya, con un tono bastante airado, le decía algo así.

-Mireia, ¿tú has borrado mis fotos de facebook? Te lo pregunto porque o has sido tú o ha sido Borja y te llamo a ti primero porque si no has sido tú ha sido él y es que lo mato.

...

La cosa ha seguido y ha sido bastante explicativa, te enterabas de toda la película. Las fotos que faltaban no eran fotos cualesquiera, eran concretamente todas las fotos donde ella aparecía con DANI, su ex. Y ella, que había entrado a enseñar fotos a alguien, se había encontrado con la desaparición cibernética de alguien a quien se suponía que ya no quería.

La tía estaba echa una furia, ha pronunciado frases como "es que lo reviento", "si ha sido él, se acabó, le llamo y se acabó".

Quede claro que me parece muy poco maduro y masculino hurgar en los cajones y, pero aún, enfadarse al encontrarse cosas como si estuvieran puestas ahí a propósito y el olvido o la casualidad no jugasen ningún papel. Que el tal Borja se lo ha buscado y puede ser merecedor de lo que se le viene encima. La verdad es que llamándose Borja no iba a tener mi simpatía, eso también.

Pero el cirio que estaba montando la niñata que llamaba, cómo estaba haciendo partícipe de todo esto a una chica que se tiene que haber quedado con el culo torcido después de esa conversación, diciéndole a ella, una tercera persona, que si a Borja lo reviento y que si le llamo y le voy a dejar, etc.

¿Hasta qué punto se puede llegar la gente a faltar al respeto? ¿Qué clase de personas toleran estas faltas de respeto mutuas y, para terminar de empeorarlo, contestan con otras del mismo calibre?

Con lo poco que le costaba al tal Borja decir: "oye, que me molesta que tengas fotos con tu ex, quítalas". Y ya está. Porque le puede molestar, porque es normal aunque se pueda discutir si es malo o no, pero él tiene su derecho a no estar cómodo con ello y se supone que también tiene derecho a que su novia escuche su opinión al respecto.

Y ya, fin del anecdotón.


------------------


Respecto al whatsapp, alucino bastante con la gente que me cuenta que si tiene problemas, que si les ven a qué hora se conectan y les increpan... Estamos perdiendo el Norte, de verdad. La facilidad que tienen algunos para pensar que pueden exigir explicaciones, perseguir a la gente y todavía sentirse con derecho a demandar y ser quienes señalen con dedo acusador. Ver a alguien "en línea" y exigir su atención, como si estuviera cruzándose con nosotros y no saludando. De verdad, la tecnología se inventó para mejorar nuestra calidad de vida, no para empeorarla, si os pasa lo último es que la estáis usando mal.
 
Tengo deshabilitada la opción de Whatsapp para ver mi última hora de conexión; con las tías que he quedado ultimamente me ha llevado a problemas porque desconfían. Desconfían de alguien que oculta su conexión al móvil, por increible que parezca.
Ya no se desconfía solo si tu ligue o novio sale de noche (con quién, a dónde, hasta cuándo), también cuando no se tiene el control absoluto sobre la privacidad de la persona en su propia casa, y esas mismas cuestiones se trasladan al mundo de los móviles: por qué no quieres que se vea la hora, con quién hablas que no soy yo, hasta qué hora lo hiciste, durante cuánto tiempo, QUÉ O A QUIEN OCULTAS.

En ese sentido soy bastante práctico, y mi vida privada es mía, nadie tiene porque saber a qué hora mandé mi último mensaje, y que te haya follado no te hace más especial ni te otorga ese derecho, no.
Si me lo preguntan, y creedme, todas lo terminan haciendo porque son así de cotillas, les digo claramente que no quiero ser controlado. Y las dos reacciones más inmediatas son SIEMPRE, y por este orden, preguntar por quién. No se plantean que haya un por qué (el resguadar la privacidad, sin ir más lejos) y automáticamente detectan la potencial presencia de otra persona (una mujer, mala, evidentemente) que podría interponerse. La segunda reacción es preguntar y cómo lo puedo hacer yo. Así de hipócrita y así de patético: "Desconfío de ti por algo que estás ocultando, pero necesito conocer cómo poder hacerlo también yo".
 
La historia de los móviles...

Sr. Brans rebuznó:
El hombre ha recibido una herramienta. Una herramienta que, creo que como ya he comentado alguna vez por aquí, no sabe usar.

Un día, en una de las empresas con las que trabajaba la mía, observé un curioso fenómeno.

Cuando conocía a las personas que curraban, advertía lo siguiente, cuanto más abajo estaban en el escalafón, más completo y carisímo era el móvil que tenían.

Las chicas jovencitas, recién entradas, competían por el móvil de última generación, ganaban apenas 900 boniatos y no tenían otra cosa que el último móvil recién salido del horno. Estaban todo el día enganchadas con cientos de aplicaciones, y tremendamente controladas por sus siguentes responsables, si eran comerciales, tenían que reportar con toda clase de fotos y texto directamente a la red de la oficina principal allá donde estuvieran...en fin, ellas mismas eran el mejor sirviente de un Gran Hermano...

Luego estaban los mandos intermedios, con unos móviles digamos no último smartphone, pero con ciertas prestaciones, todos ellos caros por supuesto, pero sin los mecanismos para que los controlaran del todo, una vez salían del curro, lo dejaban encendido lo justo, no vaya a ser que les dieran la lata con temas del chollo, y sobre todo, un jefazo, que hay que contestar sí o sí...

Los siguientes en escalafón eran los jefecillos, los reyes que no movían un dedo de la oficina...TODO lo hacían con el teléfono fijo de la oficina o con su portátil, que se llevaban a casa, y del que mandaban mails a horas intenpestivas a los intermedios y a algún currillo conectado 24/7...

Por último estaban los superjefazos, iban sin móvil directamente, si querían localizarlos era su puto problema, ellos pasaban a una hora por el curro, y luego por el mismo restaurante a comer, me imagino que sí tendrían un móvil, quizás para la cachonda con que le pondrían los cuernos a la legitima...

Y yo le pregunté, ¿Don XXX, porqué usted no tiene móvil, como se las arregla?, y me contestó, "El móvil es de subalternos, yo tengo secretaria y valoro mi tiempo libre, la mitad de las veces me llamarían para problemas que al final o arreglan ellos mismos o se arreglan solos, para el resto, que dejen recado a mi secretaria", y acto seguido me guiñó ojo, supongo que la secretaria era la única que tenía su número de móvil, y además era la cachonda a la que ser tiraba....

Pues el que quiera que saque sus conclusiones...
 
Vamos a dar un pasito más en este embrollo de las nuevas tecnologías, y vamos a rizar el rizo con lo que, actualmente, incluso es considerado delito penal que puede constituir, en algunos casos, un problema considerable.

¿Quién de entre los presentes no se ha sentido tentado de mirar el móvil de su parienta o pariente allí encima de la mesa, mientras ella o él se duchan? ¿Quién no se ha sentido tentado de hurgar en el portátil encendido de nuestra costilla mientras ella iba a hacer una necesidad básica o ha salido a comprar una barra de pan? ¿Quién no se ha conectado con el Msn de otro o ha mirado las conversaciones de Whatsapp del menda del que dice tener la mayor confianza, lealtad, sinceridad y fidelidad de este mundo? Deja un móvil encima de un mueble, "fotografíalo" mentalmente en su posición exacta, vete 10 minutos y muy posiblemente, cuando regreses, te lo encuentres que está ligeramente movido o cambiado de sitio...

Ya no es sólo que miremos a ver si recibió o no el mensaje, si lo leyó o no, sino incluso infiltrarnos dentro de la vida privada del otro y rastrear entre sus emails o mirando los agregados del Line. Esto no está conduciendo a una auténtica paranoia mental sin precedentes históricos. No es ya sólo el "me gusta" a alguien que nos cae mal o algún comentario improcedente a la novia de alguien que nos cae peor, sino todo en general lo que está relacionado con este perverso mundo cibernético.

ILG posiblemente recuerde muy bien de qué estamos hablando...
:face:
Quien esté libre de pecado, incluyéndome a mí mismo, que tire la primera piedra...
 
AhoraEsEM rebuznó:
Vamos a dar un pasito más en este embrollo de las nuevas tecnologías, y vamos a rizar el rizo con lo que, actualmente, incluso es considerado delito penal que puede constituir, en algunos casos, un problema considerable.

¿Quién de entre los presentes no se ha sentido tentado de mirar el móvil de su parienta o pariente allí encima de la mesa, mientras ella o él se duchan? ¿Quién no se ha sentido tentado de hurgar en el portátil encendido de nuestra costilla mientras ella iba a hacer una necesidad básica o ha salido a comprar una barra de pan? ¿Quién no se ha conectado con el Msn de otro o ha mirado las conversaciones de Whatsapp del menda del que dice tener la mayor confianza, lealtad, sinceridad y fidelidad de este mundo? Deja un móvil encima de un mueble, "fotografíalo" mentalmente en su posición exacta, vete 10 minutos y muy posiblemente, cuando regreses, te lo encuentres que está ligeramente movido o cambiado de sitio...

...

Quien esté libre de pecado, incluyéndome a mí mismo, que tire la primera piedra...

lapidacion001.jpg


Nunca he mirado conversaciones de móvil, emails, facebook ni nada. He podido hacerlo un millón de veces, por casualidades, descuidos y porque es fácil si sabes cómo.

Soy una persona curiosa, me gusta saberlo todo, menos lo que una persona en la que confío quiere ocultarme. Porque si confío, espero que si me oculta algo sea por mi bien. Si me miente, es porque se lo permito, porque le quiero creer y prefiero seguir engañado. Y si dudo, si ya no confío, no hace falta que invada su privacidad, directamente es el momento de pensar por qué he llegado a estar así, si no será cosa mía o consecuencia de algo que no tiene por qué involucrar a terceros.

Ir por la espalda, hacerse el espía y buscar pruebas, sólo lleva a encontrar cosas. Cosas que a menudo no significan lo que se supone, cosas que pueden estar ahí por cualquier otra razón, pero es que si estás buscando algo, todo te lleva en esa dirección. No hagas preguntas para cuyas respuestas no estés preparado, no hagas preguntas si la respuesta que quieres es la mala, no las hagas si la buena te va a hacer desconfiar más.

A mí me lo han hecho varias veces, varias personas. Siempre han encontrado algo que malinterpretar y siempre se han equivocado. Pero era lo que buscaban y no hay explicación que valga.

Una vez, en una carpeta, una foto que yo ni sabía que estaba en un compartimento que no sabía ni qué contenía. Será que no soy el mejor estudiante del mundo. Será que cuando se acaba una relación no me molesto en tirar nada, pasar página implica olvidar, no hacer memoria de dónde estaba cada recuerdo para así quemarlo en un ritual poco purificador. Nunca se me perdonó y nunca se me creyó. Y de ahí en adelante fui un mentiroso a sus ojos. Ser un sospechoso habitual es algo que cansa mucho, agota decir la verdad una y otra vez y ser tachado de traidor. Porque todos mienten y, como todos han mentido antes que tú en situaciones similares, tú también.

De verdad, no seáis esa persona. No seáis quien hace preguntas cuya respuesta no importa porque ya está en su cabeza. No hagáis que alguien tenga que pensar que ser un hijo de puta con vosotros os iría como anillo al dedo porque es lo que buscáis, porque necesitáis que os traicionen y parece que castiguéis que os sean leales.

Si no puedes confiar en alguien, no se te ocurra decir que le quieres, porque no tienes ni puta idea de lo que hablas.
 
Este hilo me trae recuerdos sobre mi anterior pareja.

Ella era una persona celosa compulsiva. Cualquier mensaje de Whatsapp que me llegaba me preguntaba por quien era y si era alguna chica. Controlaba mi facebook y al ver que tenía muchos contactos, entre ellos bastantes chicas que no eran de mi circulo de amistades, me pedía que las borrase. Como no cedía al chantaje me amenazaba con dejarlo constantemente. Al final, después de mucho tiempo, cuando ya no estaba con ella, me di cuenta de que esa sinceridad y fidelidad que pregonaba se la había saltado.

Y como extra, decir que un tiempo después de dejarlo, cuando ella me mareaba constantemente con volver, y ante la duda de sí seguiría tomándome el pelo, recurrí a un keylogger para acceder a su cuenta de facebook y confirmar mis sospechas.

La tecnología de la comunicación es algo positivo. El problema está en que hay personas que por su personalidad desequilibrada les lleva a tener comportamientos problemáticos. Pero con gente así da igual que sea a través de redes sociales o en convivencia perdidos en el monte. Problemas seguirá habiendo.
 
El caso de Whatsapp es más alarmante aún, porque es una herramienta diaria que prácticamente se antoja necesaria para tu círculo de conocidos y por ende, en una relación, si bien obviamente no es una herramienta crucial en el desarrollo, sí lo puede ser para plantearse una conclusión.

Las notificaciones de Whatsapp sobre tu estado pueden llegar a ser devastadoras. Recuerdo una vez en la que bloqueé la pantalla del móvil con una conversación de Whatsapp abierta, con lo cual al parecer yo seguía ''en línea'' y además, teniéndolo abierto, no recibía notificación ni sonido alguno al recibir mensajes.

Cuando volví, tenía unos 10 mensajes amenazantes de la tía con la que entonces tenía algo, diciéndome que con quién hablaba tanto tiempo, que no la ignorara, que me la estaba buscando, que a qué jugaba, que más valía que le diera una explicación después, etc. y por más que le expliqué después, la sospecha y la paranoia que una simple circunstancia casual provocada por un aparato electrónico arraigaron en ella, continuaron esporádicamente durante mucho tiempo, si no hasta el final. Y como dice Iskariote, es estresante y agotador decir la verdad y sufrir aún así de la desconfianza, como si tu palabra no tuviera valor alguno. Y joder, en mi caso, mi palabra es sagrada.
 
Texas Hold´em rebuznó:
El caso de Whatsapp es más alarmante aún, porque es una herramienta diaria que prácticamente se antoja necesaria para tu círculo de conocidos y por ende, en una relación.

Este es el verdadero problema, que nos han colado en el coco a la gran mayoría (Y me incluyo aunque sigo arrastrando un Sony Ericsson sin android ni pollas a la crema) que sin whatsapp/Line/messenger del facebook/kakaceitetalk no se puede vivir, y no es así.

La respuesta de raizen me ha recordado un caso similar pero a la inversa, era el tío el que no quería que la pareja agregase a tantos maromos y lo que hacía directamente era con un keylogger borrarla inmediatamente cualquier red social. Ella pensaba que tenía un virus al principio hasta que descrubrió el pastel. :lol:
 
Sr. Brans rebuznó:
Este es el verdadero problema, que nos han colado en el coco a la gran mayoría (Y me incluyo aunque sigo arrastrando un Sony Ericsson sin android ni pollas a la crema) que sin whatsapp/Line/messenger del facebook/kakaceitetalk no se puede vivir, y no es así.

No se puede vivir, pero tienen su utilidad, yo por suerte con el whatsapp siempre he advertido a todo con el que me comunico por esta vía, que pone nervioso el estar pulsando las teclas del móvil y me disculpo previamente si resulto muy escueto. La verdad es que no me ha dado ningún problema en ese aspecto.
 
Dos móviles, amigos, dos móviles, esa es la respuesta...

Movil de la pareja / trabajo.

Movil del zorrerío / porno / ladillas como centollos
 
Cuando estuve como embajador representando a los arumbayas en el congreso internacional de amerindios el problema no era el exceso de comunicación, sino la falta de ella. En época de lluvias la yesca no prendía bien y todo el humo salía blanco, que los sioux interpretaban como "ataque inminente de lobos". Al tercer día nos dieron una tunda por cansinos y se follaron a nuestras mujeres.


La culpa es vuestra y sólo vuestra, en primer lugar por tener whatsapp, en segundo lugar por dejarlo encendido hasta dos segundos antes de iros a dormir, que viene a ser el equivalente cibernético a dejar la puerta de vuestra casa abierta para curiosos, lo cual, ya os advierto de paso, es desastroso para el SNC. Y en tercer lugar, en el caso de que no tengáis whatsapp porque os obligan las circunstancias sociales, sino porque os sale de la punta de la polla, la culpa es también vuestra por darles la razón implícitamente al permitir que os pidan explicaciones sobre lo que hacéis en momentos de vuestra vida que son privados, pero que los subnormales ultrainformatizados interpretan como públicos por la mera ventana de comunicación que abre la tecnología, aunque esta no sea consentida. Es como si mientras estáis leyendo un amigo vuestro mete la cabeza por la ventana y os acusa de no invitarlo a pasar y ponerle unas pastitas.

"No te hablaba porque en ese momento no tenía ganas". No es necesario más.
 
Menudos MARICONES dando explicaciones.

"Perdona cari, es que estaba hablando con mi santa madre"

-PUES ANDA QUE NO HABLA TU MADRE.

"Uis, perdona, es que estaba agotándose la batería y no quería gastarla"

-Y CON QUIEN QUERÍAS GASTARLA?

Y así miles enviais cada día...

Que paz, que libertad, que energía da leer un mensaje y responderlo, si es que tienes ganas y te acuerdas, a los dos horas con un "ok", o un "no voy a poder ir" o "no". Increíble. No os tose ni vuestra puta madre.

Pero ahí estais vosotros, maricones, que habéis quedado con un amigo para tomar unas cervezas y hablar de fútbol a voces en el bar, ahí estáis, maricones los dos, cada uno con su móvil, mirando a la pantalla que os tiene agarrado por los cojones, escribiendo, respondiendo a la PUTA de vuestra novia/rollo/badulera con buenas palabras, sirviéndola los pensamientos, diciéndola lo mucho que la quieres.

"Cuanto te falta?"

"Pues le faltan 10 minutos al partido, en cuanto acabe salgo de aquí"

"Ah"

"Que?"

"No nada"

"Como que nada? tardo 15 minutos en llegar a casa, en 20 estoy allí"

"Ok"

.....

"Que haces? te digo ok y no me respondes?"

"Perdona cari, es que..."

Os reventaba a hostias a todos vosotros, hijos de la grandísima puta castrados.

Ayer me escribió mi becaria, que, no se, estamos tonteando, y me dice que si jiji jaja, que si iba a ir a trabajar... La respondí a las 2 horas, cuando vi el mensaje, porque no estoy CONSTANTEMENTE mirando el móvil a ver si me han escrito, y le dije un escueto que no iba.

Y no me respondió. La conozco, se que le picó. Es la típica que se tira toda la puta tarde con el móvil, vibrando constantemente. Mil babosos regalándole los oídos. Y hay un hijo de puta en bulking perenne que no la hace ni puto caso.

Mi profesora de química igual. El otro día me hizo un feo que no viene a cuento. Y a las 2 horas me escribe al wasap, con alguna absurdez, da igual el que. Y no la respondí. Y al día siguiente igual. Y al siguiente. Y al siguiente. Ahí tenéis una conversación entera de ella contra una pared.

Que quieres, que ahora te cuente chistes y gracias para que te rías porque estás sola?

Que te jodan, a ti y a todas, y a todos los que no podéis vivir sin estar pegados al esmarfon. Que hijos de puta, tienen la santa cara de decir smartphone en vez de móvil. Que hijos de puta. Yo os mataba a todos.
 
rendder rebuznó:
Menudos MARICONES dando explicaciones.

"Perdona cari, es que estaba hablando con mi santa madre"

-PUES ANDA QUE NO HABLA TU MADRE.

"Uis, perdona, es que estaba agotándose la batería y no quería gastarla"

-Y CON QUIEN QUERÍAS GASTARLA?

Y así miles enviais cada día...

Que paz, que libertad, que energía da leer un mensaje y responderlo, si es que tienes ganas y te acuerdas, a los dos horas con un "ok", o un "no voy a poder ir" o "no". Increíble. No os tose ni vuestra puta madre.

Pero ahí estais vosotros, maricones, que habéis quedado con un amigo para tomar unas cervezas y hablar de fútbol a voces en el bar, ahí estáis, maricones los dos, cada uno con su móvil, mirando a la pantalla que os tiene agarrado por los cojones, escribiendo, respondiendo a la PUTA de vuestra novia/rollo/badulera con buenas palabras, sirviéndola los pensamientos, diciéndola lo mucho que la quieres.

"Cuanto te falta?"

"Pues le faltan 10 minutos al partido, en cuanto acabe salgo de aquí"

"Ah"

"Que?"

"No nada"

"Como que nada? tardo 15 minutos en llegar a casa, en 20 estoy allí"

"Ok"

.....

"Que haces? te digo ok y no me respondes?"

"Perdona cari, es que..."

Os reventaba a hostias a todos vosotros, hijos de la grandísima puta castrados.

Ayer me escribió mi becaria, que, no se, estamos tonteando, y me dice que si jiji jaja, que si iba a ir a trabajar... La respondí a las 2 horas, cuando vi el mensaje, porque no estoy CONSTANTEMENTE mirando el móvil a ver si me han escrito, y le dije un escueto que no iba.

Y no me respondió. La conozco, se que le picó. Es la típica que se tira toda la puta tarde con el móvil, vibrando constantemente. Mil babosos regalándole los oídos. Y hay un hijo de puta en bulking perenne que no la hace ni puto caso.

Mi profesora de química igual. El otro día me hizo un feo que no viene a cuento. Y a las 2 horas me escribe al wasap, con alguna absurdez, da igual el que. Y no la respondí. Y al día siguiente igual. Y al siguiente. Y al siguiente. Ahí tenéis una conversación entera de ella contra una pared.

Que quieres, que ahora te cuente chistes y gracias para que te rías porque estás sola?

Que te jodan, a ti y a todas, y a todos los que no podéis vivir sin estar pegados al esmarfon. Que hijos de puta, tienen la santa cara de decir smartphone en vez de móvil. Que hijos de puta. Yo os mataba a todos.

Estás que quieres pegarte hasta con las farolas por no poder atiborrarte a donuts... pero la CETOSIS bien lo merece, no sucumbas ahora
 
Estoy escribiendo esto desde el móvil. He leído todo el hilo y tengo un par de whatsapp arriba a los que no he hecho caso, porque en estos momentos estoy haciendo otra cosa, por absurda que sea. La gente debería entender eso, y el que no entienda que una persona no puede estar todo el día pendiente de otra, tiene un problema. Pero no con la tecnología, si no en su vida en general.
Aunque esto ha pasado siempre, ahora se nota bastante más. Cuando no existía whatsapp y estaba con algún amigo hablando y me llamaban, o la llamada era de vida o muerte, o no la contestaba. Ahora es más exagerado. Sólo hace falta ir a un bar y ver el uso que la gente hace del móvil para descubrir gilipollas.
Si a alguno le interesa, si desactivas los datos puedes leer un mensaje de WhatsApp sin problemas y sin aparecer en línea. Y si tenéis Android con las notificaciones emergentes podéis leer los mensajes sin entrar en la aplicación, pero como han dicho por ahí si alguien exige explicaciones por la conexión de WhatsApp (algo que ni siquiera es fiable) es para replantearse la relación con esa persona más que el funcionamiento de la aplicación.
 
iskariote rebuznó:
Soy una persona curiosa, me gusta saberlo todo, menos lo que una persona en la que confío quiere ocultarme. Porque si confío, espero que si me oculta algo sea por mi bien. Si me miente, es porque se lo permito, porque le quiero creer y prefiero seguir engañado. Y si dudo, si ya no confío, no hace falta que invada su privacidad, directamente es el momento de pensar por qué he llegado a estar así, si no será cosa mía o consecuencia de algo que no tiene por qué involucrar a terceros.

Ir por la espalda, hacerse el espía y buscar pruebas, sólo lleva a encontrar cosas. Cosas que a menudo no significan lo que se supone, cosas que pueden estar ahí por cualquier otra razón, pero es que si estás buscando algo, todo te lleva en esa dirección. No hagas preguntas para cuyas respuestas no estés preparado, no hagas preguntas si la respuesta que quieres es la mala, no las hagas si la buena te va a hacer desconfiar más.

[....]

De verdad, no seáis esa persona. No seáis quien hace preguntas cuya respuesta no importa porque ya está en su cabeza. No hagáis que alguien tenga que pensar que ser un hijo de puta con vosotros os iría como anillo al dedo porque es lo que buscáis, porque necesitáis que os traicionen y parece que castiguéis que os sean leales.

Si no puedes confiar en alguien, no se te ocurra decir que le quieres, porque no tienes ni puta idea de lo que hablas.

A mí me gustaría pensar que alguien me es leal y que puedo confiar en ella, pero porque es leal y porque puedo realmente confiar en ella, no porque yo imagine que es leal y porque yo desee confiar en ella. Espero que se aprecie la sutileza de la diferencia, que por otra parte es abismal. No quiero imaginar que alguien es leal, sino tener la seguridad de que es leal. No quiero pensar que es fiel, sino tener la absoluta seguridad de que lo es. No es en absoluto lo mismo creerse lo que uno desea sentir que la realidad, que la realidad misma, como no es lo mismo decir que hacer.

Recordad la famosa frase: "Por sus hechos los conoceréis..." Me resulta muy curioso, y no lo digo por ti iskariote, sino en general que la gente prefiera vivir en la "confianza" que otorga la duda, en la "tranquilidad" que proporciona no saber ni ver lo que sucede, porque "ojos que no ven, corazón que no siente".

Yo he vivido esa situación y no hay golpe más duro que darte cuenta un día, de improviso, en un golpe glacial que te deja malherido y con cicatrices que parece que jamás van a sanar, que esa persona en quien habías depositado toda tu confianza durante años, que imaginabas que jamás te engañaría, con quien creíste que ibas a pasar el resto de tu vida en pareja, te traiciona a tus espaldas. Pensad.... Pasan los días, no sabes nada, no has llegado aún a dilucidar la verdad, no existe sospecha alguna, no tienes motivos para pensar que nada ha cambiado realmente, pero transcurren las semanas, pasan los meses y esa persona, un día, te pide que te sientes delante de ella y te confiesa esa traición, dejándote helado, destrozado, con el corazón arrancado de cuajo y, entonces, te das cuenta de que has estado autoengañándote durante días y semanas, porque un sexto sentido casi imperceptible te decía que había algo "diferente", algo que sí había cambiado, que las cosas eran distintas; que había pequeñas y sutiles diferencias a las que no quisiste prestar atención, a las que no diste importancia porque pensabas que nunca podía suceder nada en esa balsa de aceite de tu propia tranquilidad donde todo era perfecto, y donde la fidelidad, la lealtad, la seguridad de que no ibas a ser engañado, era una constante que sentías indestructible, que jamás podría hundirse.

Dices "espero que si me oculta algo sea por mi bien. Si me miente, es porque se lo permito, porque le quiero creer y prefiero seguir engañado", pero piensa bien en lo que has expresado por escrito. Quieres decir que quieres creer que te ha mentido piadosamente e, incluso, crees que es porque tú se lo permites (¿?), luego dudas, pero en el fondo concluyes que deseas seguir viviendo engañado, porque no las tienes todas contigo mismo y, en el fondo, percibes que no es esa simple mentira piadosa que a veces contamos a otros (niños, ancianos, enfermos...) por no hacerles daño inútilmente, sino por no querer aceptar ver la dureza, el puñal desnudo, desgarrador, que es descubrir y sentir el golpe brutal de la verdad que no esperábamos.

A mí no me gustaría tener que castigar a alguien porque crea que me es leal, lo que me duele es pensar (más bien sentir) que me es leal, para encontrarme de cara con la puta y dura realidad de descubrir que mi ingenua idea de fidelidad era mentira.

"La mentira es dulce y la verdad es un puñal desnudo que se vuelve contra uno mismo." Desgraciada o afortunadamente, yo soy de los que prefieren vivir desgarrados en la Verdad y aceptar esa puñalada profunda, mortal, inapelable de la verdad. La verdad suele ser dolorosa, porque no queremos mirarla, porque la verdad nos muestra la ficción de nuestro ser, la fragilidad de nuestro amor, lo efímero de nuestra existencia, lo vano de nuestras promesas (de esas maravillosas promesas del pasado), y sólo nos deja con la certeza de la muerte y lo pasajero de la vida y de todas las cosas. El Amor vive de la verdad y el resto, incluyendo la mentira y el autoengaño nos pone de cara directamente frente la Muerte y nos deja en el más doloroso vacío.

Rehacerte de algo así, volver a poder confiar, pensar que no te va a volver a suceder es difícil. Hay que dar un gran margen de tiempo y de confianza y esperar no sentir nunca más esas señales difusas, de ese sexto sentido que no queremos escuchar, que te dice muy sutilmente al oído que estás engañándote a ti mismo. Ojalá no vuelva a suceder.
 
Verdades, aquí van dos que tengo muy presentes y que explican un poco mejor mi post anterior.

Sólo alguien en quien confías te puede traicionar.

La única cosa 100% segura es la muerte.


Por eso parece que digo que prefiero vivir engañado cuando en realidad sólo estoy asumiendo que es posible que así sea. Por supuesto que prefiero la Verdad, claro que tengo la seguridad de que no se me ha mentido, pero siempre hay una incertidumbre, una posibilidad. Ese pequeño margen de error tortura a muchos y les hace mirar móviles, instalar keyloggers y otras lindezas de quinceañero celoso. Para descubrir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad, curiosa forma de hacerlo, a escondidas, a hurtadillas y sin el consentimiento de alguien de quien se espera la Verdad y a quien se supone que sí se la hemos contado. Una traición para descubrir otra, ironías de la vida en pareja.

Cuando digo que se me ocultan cosas que creo que es mejor que no sepa me refiero a cosas que son inevitables. Yo no le pongo un burka a una persona a la que quiero. Y si yo la quiero, si yo la deseo, es, entre otras muchas cosas, porque es atractiva. Otros también la desean y, sin que ella tenga que hacer nada malo, otros intentarán robármela. Basta con ser lo bastante listo como para no juntarse con la que persigue esos intentos, saber distinguir cuándo los esquiva elegantemente y cuándo los incentiva y, en lugar de enamorarse de las que hacen lo segundo, premiar a quien hace lo primero y además tiene la deferencia de ahorrarnos los detalles. No necesito tener ganas de matar a cada imbécil que le dice alguna lindeza a una mujer que considero mía, no me hace falta saber la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad, porque ya me la imagino, no es preciso un análisis forense si el veredicto es el mismo y los pormenores sólo traen innecesaria ira.

Si cometes el error de querer a alguien que es propenso a la traición, que trama a tus espaldas, que teje redes ajenas a ti y que le esperan atentamente para cuando caiga de tu trapecio, te has metido tú solito y probablemente porque te gusta, ya que nadie te obliga. Sigo viendo como una tortura innecesaria el buscar pruebas, cuando la sola actitud ya es evidente, cuando el delito más grave no es que tontee con Fulano o Mengano, es que te va a traicionar se ponga quien se ponga por delante, porque no sabe vivir sin hacerlo.

Yo asumo que existe un margen de error, una posibilidad de estar siendo engañado. Vivo en mi realidad alternativa donde creo que no lo soy, donde, si lo soy, se me está engañando lo bastante bien. La imaginación juega malas pasadas y, por experiencia, sé que la mía no piensa nada bien. Prefiero no pensar. Prefiero creer. Porque si quisiera dudar, si quisiera darle vueltas a las cosas, no habría vivido ni habría sido feliz como he sido. Y al final se acabó y no descubrí ninguna trama, pero fue tan desolador como si lo hubiera hecho. Al fin y al cabo, pensaba que eso duraría para siempre, pensaba que eso era amor, fui engañado como todos.
 
suburba rebuznó:
Estoy escribiendo esto desde el móvil. He leído todo el hilo y tengo un par de whatsapp arriba a los que no he hecho caso, porque en estos momentos estoy haciendo otra cosa, por absurda que sea. La gente debería entender eso, y el que no entienda que una persona no puede estar todo el día pendiente de otra, tiene un problema. Pero no con la tecnología, si no en su vida en general.
Aunque esto ha pasado siempre, ahora se nota bastante más. Cuando no existía whatsapp y estaba con algún amigo hablando y me llamaban, o la llamada era de vida o muerte, o no la contestaba. Ahora es más exagerado. Sólo hace falta ir a un bar y ver el uso que la gente hace del móvil para descubrir gilipollas.
Si a alguno le interesa, si desactivas los datos puedes leer un mensaje de WhatsApp sin problemas y sin aparecer en línea. Y si tenéis Android con las notificaciones emergentes podéis leer los mensajes sin entrar en la aplicación, pero como han dicho por ahí si alguien exige explicaciones por la conexión de WhatsApp (algo que ni siquiera es fiable) es para replantearse la relación con esa persona más que el funcionamiento de la aplicación.

puerca asquerosa de mierda.
 
rendder rebuznó:
Mi profesora de química igual. El otro día me hizo un feo que no viene a cuento. Y a las 2 horas me escribe al wasap, con alguna absurdez, da igual el que. Y no la respondí. Y al día siguiente igual. Y al siguiente. Y al siguiente. Ahí tenéis una conversación entera de ella contra una pared.

Que quieres, que ahora te cuente chistes y gracias para que te rías porque estás sola?
Hombre, ya tardaba de en salir la causa de tu odio y, como siempre, es la misma de siempre.

Tío, pasa página ya.
 
Dicho lo cual, Miguel Ángel no habría pintado la Capilla Sixtina si el puto móvil hubiera estado sonando cada 5 minutos.
 
suburba rebuznó:
Estoy escribiendo esto desde el móvil. He leído todo el hilo y tengo un par de whatsapp arriba a los que no he hecho caso, porque en estos momentos estoy haciendo otra cosa, por absurda que sea. La gente debería entender eso, y el que no entienda que una persona no puede estar todo el día pendiente de otra, tiene un problema. Pero no con la tecnología, si no en su vida en general.
Aunque esto ha pasado siempre, ahora se nota bastante más. Cuando no existía whatsapp y estaba con algún amigo hablando y me llamaban, o la llamada era de vida o muerte, o no la contestaba. Ahora es más exagerado. Sólo hace falta ir a un bar y ver el uso que la gente hace del móvil para descubrir gilipollas.
Si a alguno le interesa, si desactivas los datos puedes leer un mensaje de WhatsApp sin problemas y sin aparecer en línea. Y si tenéis Android con las notificaciones emergentes podéis leer los mensajes sin entrar en la aplicación, pero como han dicho por ahí si alguien exige explicaciones por la conexión de WhatsApp (algo que ni siquiera es fiable) es para replantearse la relación con esa persona más que el funcionamiento de la aplicación.

Sigues diciendo gilipolleces dignas de un chaval de 15 años. Qué coño es eso de inventarse métodos o excusas pata que nadie se enfade conmigo si no leo lo que me mandan al momento, qué coño es eso de justificarse uno por ser como es. Si no lo leo ahora, no lo leo y punto, es lo que hay.

El que quiera algo, que me llame y, como nadie me llamaría 20 en un día, nadie tiene que esperar que si me manda 20 Whatsapp en un día vaya a responder al momento. Que no, pesado.
 
Los peligros de las redes fecales y de hacer el gilipollas con los wassup, el tuiter, el caralibro...

Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.


Da que pensar, ¿eh?
 
Spawner rebuznó:
El que quiera algo, que me llame y, como nadie me llamaría 20 en un día, nadie tiene que esperar que si me manda 20 Whatsapp en un día vaya a responder al momento. Que no, pesado.

suburba rebuznó:
el que no entienda que una persona no puede estar todo el día pendiente de otra, tiene un problema

Lee bien lo que he escrito, anda. Sólo he puesto cómo hacer para que no salga la hora de conexión por si a alguien le interesa. Los métodos no son míos los conozco porque trabajo en telefonía
 
Lo mejor es tener un teléfono de pantalla LCD monocromo, si wathsapp ni mierdas cibernéticas.
 
Atrás
Arriba Pie