Filimbi
Muerto por dentro
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Hola hamijos, no recuerdo a ciencia cierta si os conté cuando participé en hermano mayor, porque yo soy de letras. O cuando ayudé a Julián Muñoz a salir de Alhaurín con la ayuda de Michael Scofield. Lo conoceréis porque es un hombre al que le sale antes la barriga que el pelo.
Ayer hice un hilo donde recibí muchas lamidas, si no me tiré al público fue por respeto a mi novia. Aunque todo gran hombre tiene sus detractores. Gente envidiosa.
Podría poner muchas citas importantes, de grandes hombres. Podría decir una, a bote pronto, como la de Pau Gasol con su novia.
Hace poco, un forero de esta casa, Cáncer de Colon. Puso mis fotos en un foro de gitanos amenazándolos de muerte. Pues bien, esta tarde, de la que venía de levantar 250 kg en press banca, me asaltaron unos cuantos en un semáforo. Yo no me había dado cuenta hasta que me soltaron una hostia como un piano - no lo digo porque me dejó los dientes como teclas -. Del viaje que me pegó, se me cayeron las gafas al suelo. Miré a ver si las patillas estaban bien y no me las habían jodido, pero no, estaban bien, no me las había cortado al afeitarme esa mañana.
Yo me di prisa en bajar del coche, miré el nivel del aceite, miré a ver la junta culata, apagué la radio, guardé las gafas en la funda, quité el contacto y bajé del coche. El gitano, acojonado al ver mis abdominales tonificados con el AB Shaper de la tienda en casa, salió corriendo y yo no tuve más remedio que ir detrás.
Se escondió en un portal y lo cerró, yo, que soy más listo y fuerte que un roboc, piqué al tercero y dije "Oiga, ¿ahí lavan la ropa? Pues que cerdos. Pero no, no funcionó, no me abrieron la puerta. No me quedó otra que utilizar la técnica definitiva, y no, no es romper el portal de una hostia. Volví a picar, esta vez al segundo, pero dije que era el cartero. Me abrieron y empecé a pegarle un par de combos al gitano. Hice tanto ruido que bajó el presidente, que resulta que era negro. Empezó a gritarme y a tocar la bocina como en la Copa Confederaciones y no me dejó más remedio que darle de medio lao.
Después de haber soltado un par de hostias, fui a comprar el pan. Allí había un boliviano que se había enganchado el brazo en la máquina. El empresario me ofreció el pan gratis si le ayudaba a tirar el brazo en un contenedor cercano. Yo le dije que vale, pero que no fuera un contenedor de reciclaje que hay que cuidar la ecología. De la que iba a tirar el brazo al contenedor, comprendí cómo se hace el brazo de gitano. Para que digan que no se aprende nada de estas razas nuevas que van surgiendo con la globalización.
Allí en el contenedor había de todo, había unos chavales tirando una chica con pelo cenicero, una madre de un forero tirando unos cepillos llenos de nocilla, Bear Grylls tardó poco en comerse el brazo que tiré... Aquí unas imágenes :
Esto me proporcionará muchas proteínas y muchos nutrientes. Sobre todo con lo que tiene entre las uñas. Sabe un poco amargo, así como ahumao.
Hecho el trabajo, volví a mi C2, de la que iba, me topé a Turbo hablando con unas putas y diciéndolas que si les apetecía trabajar y salir en la televisión conquense, que si les apetecía hacer de pilladas, aunque con lo gordo que está turbo no me parece a mí que le apetezca mucho jugar a pillar, como mucho al escondite. Cuando llego, al coche le faltaban un par de piezas. No tenía ruedas, capó, techo, puertas. Sólo quedaba el freno de mano, y ahora sí que era de mano. Pero bueno, no me importó y fui conduciendo hasta casa. No hay nada indispensable en la vida.
Acabo de llegar y os cuento la historia, verídica 100%. Aunque bueno, mentí, al final el hijo puta del empresario me cobró el pan.
Ayer hice un hilo donde recibí muchas lamidas, si no me tiré al público fue por respeto a mi novia. Aunque todo gran hombre tiene sus detractores. Gente envidiosa.
Podría poner muchas citas importantes, de grandes hombres. Podría decir una, a bote pronto, como la de Pau Gasol con su novia.
Hace poco, un forero de esta casa, Cáncer de Colon. Puso mis fotos en un foro de gitanos amenazándolos de muerte. Pues bien, esta tarde, de la que venía de levantar 250 kg en press banca, me asaltaron unos cuantos en un semáforo. Yo no me había dado cuenta hasta que me soltaron una hostia como un piano - no lo digo porque me dejó los dientes como teclas -. Del viaje que me pegó, se me cayeron las gafas al suelo. Miré a ver si las patillas estaban bien y no me las habían jodido, pero no, estaban bien, no me las había cortado al afeitarme esa mañana.
Yo me di prisa en bajar del coche, miré el nivel del aceite, miré a ver la junta culata, apagué la radio, guardé las gafas en la funda, quité el contacto y bajé del coche. El gitano, acojonado al ver mis abdominales tonificados con el AB Shaper de la tienda en casa, salió corriendo y yo no tuve más remedio que ir detrás.
Se escondió en un portal y lo cerró, yo, que soy más listo y fuerte que un roboc, piqué al tercero y dije "Oiga, ¿ahí lavan la ropa? Pues que cerdos. Pero no, no funcionó, no me abrieron la puerta. No me quedó otra que utilizar la técnica definitiva, y no, no es romper el portal de una hostia. Volví a picar, esta vez al segundo, pero dije que era el cartero. Me abrieron y empecé a pegarle un par de combos al gitano. Hice tanto ruido que bajó el presidente, que resulta que era negro. Empezó a gritarme y a tocar la bocina como en la Copa Confederaciones y no me dejó más remedio que darle de medio lao.
Después de haber soltado un par de hostias, fui a comprar el pan. Allí había un boliviano que se había enganchado el brazo en la máquina. El empresario me ofreció el pan gratis si le ayudaba a tirar el brazo en un contenedor cercano. Yo le dije que vale, pero que no fuera un contenedor de reciclaje que hay que cuidar la ecología. De la que iba a tirar el brazo al contenedor, comprendí cómo se hace el brazo de gitano. Para que digan que no se aprende nada de estas razas nuevas que van surgiendo con la globalización.
Allí en el contenedor había de todo, había unos chavales tirando una chica con pelo cenicero, una madre de un forero tirando unos cepillos llenos de nocilla, Bear Grylls tardó poco en comerse el brazo que tiré... Aquí unas imágenes :

Esto me proporcionará muchas proteínas y muchos nutrientes. Sobre todo con lo que tiene entre las uñas. Sabe un poco amargo, así como ahumao.
Hecho el trabajo, volví a mi C2, de la que iba, me topé a Turbo hablando con unas putas y diciéndolas que si les apetecía trabajar y salir en la televisión conquense, que si les apetecía hacer de pilladas, aunque con lo gordo que está turbo no me parece a mí que le apetezca mucho jugar a pillar, como mucho al escondite. Cuando llego, al coche le faltaban un par de piezas. No tenía ruedas, capó, techo, puertas. Sólo quedaba el freno de mano, y ahora sí que era de mano. Pero bueno, no me importó y fui conduciendo hasta casa. No hay nada indispensable en la vida.
Acabo de llegar y os cuento la historia, verídica 100%. Aunque bueno, mentí, al final el hijo puta del empresario me cobró el pan.