La justicia debería de dejarse en manos de los pueblos y no monopolizarla por parte del Estado; menos aún acojonando a la gente de bien, para que no tome venganza. En un pueblo pequeño, lleno de cazadores, ese tipo no hubiese perpetrado el crimen si la gente no estuviera asustada por las consecuencias en sus vidas, pues ya le habrían tirado a alguna cuneta años atrás, a la mínima de cambio. No sé si lo he contado ya, pero en un pueblo, un gitano se llevó a una chica a su covacha y el pueblo salió, le obligaron a dejar a la chica y le quemaron la casa. De eso no hace tampoco demasiados años.
Estos tipos de la zamorana, eran evidentemente unos cobardes, porque se acercaban a mujeres solas, que seguro no tenían el respaldo de un hombre detrás. Si la chica hubiese estado con su novio, no le hubiera ocurrido, pues no se hubieran atrevido ni a mirarla.