S
surucucu
Guest
En una botella de aceite vacía echar:
unas 5 guindillas (pequeñitas, de las que se echan a las angulas)
unas 15 bolitas de pimienta
una cucharada de especia para pasta (sazonador italiano, arrabbiatta... a elegir)
otra cucharada de aglio italiano (si no se encuentra, también vale un diente de ajo bien picado)
y aceite hasta casi el borde.
Agitar bien y dejar que repose durante 2 días mínimo.
PASTA PARA SER REHOGADA EN EL SUSODICHO ACEITE
En una cacerola echar 2 vasos y medio de agua y llevar a ebullición.
Cuando hierva, reducir el fuego y echar:
un chorreón del susodicho aceite
una pastilla de caldo de carne
200 gramos de pasta (una ración: yo suelo usar o spaghetti o tornillos de colores).
Que hierva a fuego medio unos 10-15 minutos.
Escurrir. Mientras se escurre la pasta, en una sartén grande calentar un chorreón generoso del susodicho aceite.
Echar la pasta bien escurrida y rehogar a fuego medio procurando que quede crujiente.
Mientras se rehoga la pasta, en una taza echar una pella de queso al ajo y perejil, y dos cucharadas de salsa para pasta (se recomienda un sabor fuerte, tipo siciliana, con aceitunas o pimientos). Mezclar bien y echarlo en la sartén, que se impregne bien con la pasta y el aceite.
Servir.
unas 5 guindillas (pequeñitas, de las que se echan a las angulas)
unas 15 bolitas de pimienta
una cucharada de especia para pasta (sazonador italiano, arrabbiatta... a elegir)
otra cucharada de aglio italiano (si no se encuentra, también vale un diente de ajo bien picado)
y aceite hasta casi el borde.
Agitar bien y dejar que repose durante 2 días mínimo.
PASTA PARA SER REHOGADA EN EL SUSODICHO ACEITE
En una cacerola echar 2 vasos y medio de agua y llevar a ebullición.
Cuando hierva, reducir el fuego y echar:
un chorreón del susodicho aceite
una pastilla de caldo de carne
200 gramos de pasta (una ración: yo suelo usar o spaghetti o tornillos de colores).
Que hierva a fuego medio unos 10-15 minutos.
Escurrir. Mientras se escurre la pasta, en una sartén grande calentar un chorreón generoso del susodicho aceite.
Echar la pasta bien escurrida y rehogar a fuego medio procurando que quede crujiente.
Mientras se rehoga la pasta, en una taza echar una pella de queso al ajo y perejil, y dos cucharadas de salsa para pasta (se recomienda un sabor fuerte, tipo siciliana, con aceitunas o pimientos). Mezclar bien y echarlo en la sartén, que se impregne bien con la pasta y el aceite.
Servir.