Hay muchos que gritarán pidiendo libertad para entrar en el Retiro y luego serán los primeros que si les cae una rama encima pondrán el grito en el cielo pidiendo responsabilidad al Estado y solicitando una indemnización. Mientras la Ley ampare a las víctimas lloricas entiendo que el Estado se proteja cortando por lo sano. No lo apoyo, pero lo comprendo.
La sociedad se mueve en un equilibrio entre libertad y seguridad que en las últimas décadas se ha movido hacia la seguridad. Esto se ha conseguido a base de propaganda terrorista, terrorista sí, en el sentido estricto de crear terror. Nos acojonan cualquier ridícula amenaza mediante horas y horas de televisión. Vivimos instalados en el miedo a perder la vida, el patrimonio, las amistades, etc. El miedo a perder nos está predisponiendo a entregar pequeñas parcelas de cada una de ellas con la promesa (falsa) de que no habrá más riesgo.