Jose David
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- 2 Jul 2006
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Me han invitado a una cacería humana, no es coña.
La cosa va así.
Somos cinco hombretones, no homogayers, que conocemos un terreno de abundante vegetación y sitios de interés turístico - rural.
Un sexto hombre, EXPERTO en supervivencia y tal, accede a ser "la liebre", y con un equipo de supervivencia mínimo, sin armas excepto una pequeña navaja, y con un pequeño mapa del terreno, pasará TRES DIAS, SETENTA Y DOS HORAS, recorriendo el terreno con dos objetivos primarios.
1. Que no le demos alcance.
2. Llegar a un objetivo prefijado, ganando "el juego" y cobrando una buena suma, una porra que hemos hecho entre todos.
Si le damos caza, la porra es para el que acierte (o acierten hasta dejarlo inerte) en el blanco.
POR SUPUESTO, las armas disparan proyectiles de pintura, y ya las habréis visto en innumerables películas.
Pese a todo, ES PELIGROSO, pues él no llevará casco ni un equipo de protección realmente adecuado para parar esos proyectiles.
Bien, el tema es que aunque dentro de dos findes se celebra "el evento", tengo algunas "dudas éticas" de que lo que vamos a hacer sea apropiado, incluso cuando todos estamos de acuerdo, "liebre" incluida.
Se me antoja un poco fuerte la cosa, y si ya de por si la cacería normal no me gusta mucho, esta, que presumiblemente no acabará con vida alguna, extrañamente me gusta menos aun.
Tengo la sensación de que no la voy a disfrutar mucho, pese a que la idea de la hoguera nocturna y las charlas entre hombretones rudos me atrae sobremanera.
En fin, ¿voy o no voy?.
Y ya de paso, decidme si este tipo de prácticas puede rentabilizarse, creando una empresa o algo que se dedique a eso.
La cosa va así.
Somos cinco hombretones, no homogayers, que conocemos un terreno de abundante vegetación y sitios de interés turístico - rural.
Un sexto hombre, EXPERTO en supervivencia y tal, accede a ser "la liebre", y con un equipo de supervivencia mínimo, sin armas excepto una pequeña navaja, y con un pequeño mapa del terreno, pasará TRES DIAS, SETENTA Y DOS HORAS, recorriendo el terreno con dos objetivos primarios.
1. Que no le demos alcance.
2. Llegar a un objetivo prefijado, ganando "el juego" y cobrando una buena suma, una porra que hemos hecho entre todos.
Si le damos caza, la porra es para el que acierte (o acierten hasta dejarlo inerte) en el blanco.
POR SUPUESTO, las armas disparan proyectiles de pintura, y ya las habréis visto en innumerables películas.
Pese a todo, ES PELIGROSO, pues él no llevará casco ni un equipo de protección realmente adecuado para parar esos proyectiles.
Bien, el tema es que aunque dentro de dos findes se celebra "el evento", tengo algunas "dudas éticas" de que lo que vamos a hacer sea apropiado, incluso cuando todos estamos de acuerdo, "liebre" incluida.
Se me antoja un poco fuerte la cosa, y si ya de por si la cacería normal no me gusta mucho, esta, que presumiblemente no acabará con vida alguna, extrañamente me gusta menos aun.
Tengo la sensación de que no la voy a disfrutar mucho, pese a que la idea de la hoguera nocturna y las charlas entre hombretones rudos me atrae sobremanera.
En fin, ¿voy o no voy?.
Y ya de paso, decidme si este tipo de prácticas puede rentabilizarse, creando una empresa o algo que se dedique a eso.
