Nuestro insigne prócer, el nunca bien ponderado Turbo, luz de luces, rey de reyes, ese Scorsese del porno, ese gordo cabrón, colocaba uno de sus incalificables vídeos con poco éxito de seguimiento. Valga ese poco éxito para tomar esta noche las riendas del asunto y aprovechar el título del hilo: cámara oculta.
Ni qué decir tiene que colocar una cámara oculta en los servicios públicos, en la piscina, en el baño de casa o en cualquier otro lugar se escapa al forero medio por una cuestión de pereza. Todos somos mitad ingeniero aeronáutico mitad Jason Bourne, pero no la ponemos por que no nos sale de los cojones. Meridiano. En cambio, sí tenemos unos prismáticos en casa. Incluso un telescopio con el que meternos en la vida de las vecinas y esperar, literalmente polla en mano, a que la chorba de enfrente llegue de trabajar y se desvista. O en el mejor de los casos, se zumbe a su novio en el sofá del salón con las luces encendidas.
Sentado la semana pasada que estamos en condiciones de cambiar la denominación de forero medio por manflorero a medias, es hora de continuar con nuestro experimento arqueológico. Al maricón que suscribe le gustaría saber si ustedes pecan de voyeurismo como yo he pecado, oh Turbo.