Tom Bombadil
Clásico
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- 4 Jun 2005
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Mucho se ha hablado por aquí sobre los comportamientos del sexo opuesto que odiamos y nos parecen rechazables, pero bastante menos de las que no tragamos y que son habitualmente realizados por los de nuestro propio género.
Hay dos de ellos que me parecen especialmente repelentes:
-Ser un arrastrado: Son aquellos que muestran una total ausencia de orgullo, y que con tal de mojar el churro son capaceas de autohumillarse y de convertirse en esclavos del chocho que tienen más cerca, se les puede identificar fácilmente revoloteando alrededor de cualquier chica mínimamente mona (o no) y acudiendo en su llamada siempre que ella lo precise, dispuestos a cumplir cualquier capricho de ella, son capaces de pasarse años sin darse cuenta de que así no van a mojar.
-Ser un pesado: Son aquellos que siguen insistiendo por mucho de que la chica en cuestión les demuestre por activa y por pasiva que pasa cuarenta mierdas de él, se caracterizan por una incapacidad absoluta para darse cuenta de que están molestando, o quizás si se dan cuenta pero les da igual.
Creo que los dos tipos anteriores son de los principales culpables de la gran cantidad de tías bordes que campan por el mundo.
Hay dos de ellos que me parecen especialmente repelentes:
-Ser un arrastrado: Son aquellos que muestran una total ausencia de orgullo, y que con tal de mojar el churro son capaceas de autohumillarse y de convertirse en esclavos del chocho que tienen más cerca, se les puede identificar fácilmente revoloteando alrededor de cualquier chica mínimamente mona (o no) y acudiendo en su llamada siempre que ella lo precise, dispuestos a cumplir cualquier capricho de ella, son capaces de pasarse años sin darse cuenta de que así no van a mojar.
-Ser un pesado: Son aquellos que siguen insistiendo por mucho de que la chica en cuestión les demuestre por activa y por pasiva que pasa cuarenta mierdas de él, se caracterizan por una incapacidad absoluta para darse cuenta de que están molestando, o quizás si se dan cuenta pero les da igual.
Creo que los dos tipos anteriores son de los principales culpables de la gran cantidad de tías bordes que campan por el mundo.