Nuestros gobernantes, no os engañéis, actúan como idiotas, parecen idiotas, pero es que en el fondo son idiotas. Y lo peor, enfrente son tan o más idiotas.
Lo último, obligar a los currelas a irse para casa gastando los putos días de vacaciones. Así por la jeta. Aquí se está dejando únicamente en manos de los ciudadanos de a pie la responsabilidad de parar la epidemia, con ayuda de los pobres médicos desbordados. Medidas tarde y mal. Como en verano no palme solo el bicho, mal futuro.
A ver si por lo menos, de todo esto sacamos un modelo de seguimiento de epidemias vía digital, a poder seguir clases en modo online (que no es ciencia ficción, salvo para nuestro ministerio de transición digital), y sobre todo, a tomar decisiones duras ANTES de que se descontrole. Ahora se ponen a cancelar vuelos con Italia, cuando tenemos encima 1.700 casos y 35 abuelos embolsados. Pero ya veréis como en la próxima estamos igual.
Yo llevo días diciendo lo que va a pasar, pero es que cualquier subnormal lo podría ver. Contagios progresando sin control, hundimiento de bolsa y ahora pánico en la gente cuando ve como van las cosas. Espera tú que la tercera pata serán los ERES ahí a la vuelta de la esquina. Sector turismo, sector servicios.