Finkikula
Maná, relámpago, vas
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- 10 Jul 2008
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I. Introducción
Salve, PLEBE:
Vuelvo a vosotros en la APOTEOSIS de mi ya de por sí portentosa existencia. Hay momentos en la vida de un hombre en los que parece que lo ha alcanzado todo y no le quedan ya cumbres que escalar, tierras que conquistar o rectos de efebos que hollar. Esto puede ser medianamente perdonable en el ciudadano de a pie, aquél por cuyas venas corre sangre plebeya, que cree haber alcanzado la plenitud al disponer de un trabajo estable, un chamizo bajo el que cobijarse y un coche con el que sacar a pasar a su fértil mujer en edad reproductora. Confundido, se abandona entre los AFRENTOSOS y desarrollados pechos de esa perra impía, deshonrando con sus libidinosos actos miles de años de tradición: esa noble y pura relación que profesaba el erastés a su enómero. Muchos y muy válidos prohombres vivieron, lucharon y murieron para que perviviera un estilo de vida hoy desaparecido bajo la insultante crisis de valores de nuestros días. ¿O acaso creéis que la valerosa resistencia en el paso de las Termópilas tenía algún otro propósito más allá de la pervivencia de esa honorabilísima causa? No te levantes todavía a quemar tu libro de Historia, todavía no. Puede que seas un asno, pero como tal tienes la ventaja de que bajo el aleccionador golpe de mi vara puedes volver a la senda correcta de la virtud.
Sí, amigos, mi misión aquí es en parte moralizante, y por ello quizá he desviado mi discurso inicial hacia un ardoroso elogio del amor cortés. Pero también lo es propagandística y glorificadora de mi EXCELSA persona. Primero, porque me lo he ganado por propio derecho, y segundo, porque no es justo que la Humanidad se vea privada de semejante epopeya, espejo indudable para generaciones venideras. Como decía al principio, si eres parte de la plebe y no procedes de una respetable familia patricia, es posible que te acomodes y pienses que ya no te queda nada más por hacer. Pero, en un caso como el mío, cuyo linaje encuentra su origen en la mismísima diosa Venus, es una auténtica IGNOMINIA la laxitud en la voluntad de seguir haciendo cosas importantes, que sirvan de inspiración a poetas y merezcan ser escritas en los ANALES.
Algo así me sucedió a mí, aunque sirva como descargo mi singular currículum en aquellos momentos:
- Exitoso empresario, propietario de un CUASI-MONOPOLÍSTICO emporio de tiendas cartas de Magic: The Gathering, recuérdese el conocido dicho acuñado allá en los lejanos noventa: “No se abre un sobre de Visiones en la península sin que Finkikula se entere”, aquellos que por entonces jugaban seguro que lo recuerdan con cariño y sobre todo TERROR.
- Vencedor moral y OFICIAL del GP de Madrid de hace un par de años, erigiéndome como adalid del juego limpio y la Verdad frente a la mafiosa organización DCI, quedando desde entonces expuestos sus sucios ardides, y por ende su autoridad y credibilidad.
- Retirada invicta del mundo de Magic: The Gathering profesional después de haber hecho una auténtica fortuna, dilapidada una buena parte de ella en billeteras, al reventar una tras otra ante el OMINOSO caudal de efectivo que generaban sus victorias.
- Auténtico renovador de las técnicas aplicables a los juegos de azar, haciendo ganar verdaderas morteradas desinteresadamente a cientos de personas, con la única de ayuda de INCONTROVERTIBLES demostraciones matemáticas. Según ha llegado a mis oídos, la Finkingala se está empezando a impartir en las facultades de Ciencias Exactas, en el área de teoría de juegos y demás.
- Causa de una probada crisis en el mundo del poker digital, al convertirme nada más entrar en escena en el más temido GRINDER de internet, llegando a vaciarse casi instantáneamente mesas de high stakes con mi sola presencia en ellas, poniendo en fuga a supuestos talentos como durrrr, urindanger, Chris Patrick… quedando retratados como los sucios leavers que son. Como consecuencia, forzando las más importantes salas de juego online del mundo dirigen sus ruegos hacia diversas autoridades mundiales para conminarme a abandonar discretamente mis actividades ante las evidentes pérdidas que podrían generarse de seguir arrollando a los jugadores, con sus consiguientes abandonos.
- Prestidigitador.
- Animador infantil.
- Amante hijo.
Impresionante, ¿verdad? Normal que una vez recorrido todo ese trecho decidiera tomarme un respiro en la que por entonces creía mi cima, y atraído por la impecable factura de la escena de la sodomización de un imberbe adolescente en uno de sus capítulos, decidiera ver la serie Roma. Deslumbrado por el impecable rigor histórico de la trama, véome reflejado a medida que transcurren los capítulos (me falta el último de la primera temporada) en la figura del grandioso César, y comprendo que, al igual que él mismo estaba tocado por la Fortuna, mis logros tampoco han sido casuales, y que también yo tengo a la Diosa de mi lado. Pero no sólo eso. Tras una ardua, reposada y humilde reflexión, llego a la lógica conclusión de que soy la REENCARNACIÓN de CAYO JULIO CÉSAR, y debo igualar mis gestas de hace algo más de dos mil años en este podrido mundo de hoy.
Como dije al principio, ahora sí creo hallarme en el zénit de mi andadura vital, habiendo derrotado a mis enemigos y sido nombrado dictador vitalicio. La búsqueda ha sido larga y tediosa, pero en este tiempo he encontrado multitud de señales que corroboraban mi tesis y se entroncaban con los tiempos remotos. Una evidente, es que por aquel entonces me paseaba por el foro romano y hacía vida pública. Éste que visitáis ahora es su inequívoco equivalente, y es en él donde narraré mi PRODIGIOSA historia.
Dejo por último un útil enlace para aquellos que tengáis que refrescar un poco la memoria sobre historia romana: wiki
Salve, PLEBE:
Vuelvo a vosotros en la APOTEOSIS de mi ya de por sí portentosa existencia. Hay momentos en la vida de un hombre en los que parece que lo ha alcanzado todo y no le quedan ya cumbres que escalar, tierras que conquistar o rectos de efebos que hollar. Esto puede ser medianamente perdonable en el ciudadano de a pie, aquél por cuyas venas corre sangre plebeya, que cree haber alcanzado la plenitud al disponer de un trabajo estable, un chamizo bajo el que cobijarse y un coche con el que sacar a pasar a su fértil mujer en edad reproductora. Confundido, se abandona entre los AFRENTOSOS y desarrollados pechos de esa perra impía, deshonrando con sus libidinosos actos miles de años de tradición: esa noble y pura relación que profesaba el erastés a su enómero. Muchos y muy válidos prohombres vivieron, lucharon y murieron para que perviviera un estilo de vida hoy desaparecido bajo la insultante crisis de valores de nuestros días. ¿O acaso creéis que la valerosa resistencia en el paso de las Termópilas tenía algún otro propósito más allá de la pervivencia de esa honorabilísima causa? No te levantes todavía a quemar tu libro de Historia, todavía no. Puede que seas un asno, pero como tal tienes la ventaja de que bajo el aleccionador golpe de mi vara puedes volver a la senda correcta de la virtud.
Sí, amigos, mi misión aquí es en parte moralizante, y por ello quizá he desviado mi discurso inicial hacia un ardoroso elogio del amor cortés. Pero también lo es propagandística y glorificadora de mi EXCELSA persona. Primero, porque me lo he ganado por propio derecho, y segundo, porque no es justo que la Humanidad se vea privada de semejante epopeya, espejo indudable para generaciones venideras. Como decía al principio, si eres parte de la plebe y no procedes de una respetable familia patricia, es posible que te acomodes y pienses que ya no te queda nada más por hacer. Pero, en un caso como el mío, cuyo linaje encuentra su origen en la mismísima diosa Venus, es una auténtica IGNOMINIA la laxitud en la voluntad de seguir haciendo cosas importantes, que sirvan de inspiración a poetas y merezcan ser escritas en los ANALES.
Algo así me sucedió a mí, aunque sirva como descargo mi singular currículum en aquellos momentos:
- Exitoso empresario, propietario de un CUASI-MONOPOLÍSTICO emporio de tiendas cartas de Magic: The Gathering, recuérdese el conocido dicho acuñado allá en los lejanos noventa: “No se abre un sobre de Visiones en la península sin que Finkikula se entere”, aquellos que por entonces jugaban seguro que lo recuerdan con cariño y sobre todo TERROR.
- Vencedor moral y OFICIAL del GP de Madrid de hace un par de años, erigiéndome como adalid del juego limpio y la Verdad frente a la mafiosa organización DCI, quedando desde entonces expuestos sus sucios ardides, y por ende su autoridad y credibilidad.
- Retirada invicta del mundo de Magic: The Gathering profesional después de haber hecho una auténtica fortuna, dilapidada una buena parte de ella en billeteras, al reventar una tras otra ante el OMINOSO caudal de efectivo que generaban sus victorias.
- Auténtico renovador de las técnicas aplicables a los juegos de azar, haciendo ganar verdaderas morteradas desinteresadamente a cientos de personas, con la única de ayuda de INCONTROVERTIBLES demostraciones matemáticas. Según ha llegado a mis oídos, la Finkingala se está empezando a impartir en las facultades de Ciencias Exactas, en el área de teoría de juegos y demás.
- Causa de una probada crisis en el mundo del poker digital, al convertirme nada más entrar en escena en el más temido GRINDER de internet, llegando a vaciarse casi instantáneamente mesas de high stakes con mi sola presencia en ellas, poniendo en fuga a supuestos talentos como durrrr, urindanger, Chris Patrick… quedando retratados como los sucios leavers que son. Como consecuencia, forzando las más importantes salas de juego online del mundo dirigen sus ruegos hacia diversas autoridades mundiales para conminarme a abandonar discretamente mis actividades ante las evidentes pérdidas que podrían generarse de seguir arrollando a los jugadores, con sus consiguientes abandonos.
- Prestidigitador.
- Animador infantil.
- Amante hijo.
Impresionante, ¿verdad? Normal que una vez recorrido todo ese trecho decidiera tomarme un respiro en la que por entonces creía mi cima, y atraído por la impecable factura de la escena de la sodomización de un imberbe adolescente en uno de sus capítulos, decidiera ver la serie Roma. Deslumbrado por el impecable rigor histórico de la trama, véome reflejado a medida que transcurren los capítulos (me falta el último de la primera temporada) en la figura del grandioso César, y comprendo que, al igual que él mismo estaba tocado por la Fortuna, mis logros tampoco han sido casuales, y que también yo tengo a la Diosa de mi lado. Pero no sólo eso. Tras una ardua, reposada y humilde reflexión, llego a la lógica conclusión de que soy la REENCARNACIÓN de CAYO JULIO CÉSAR, y debo igualar mis gestas de hace algo más de dos mil años en este podrido mundo de hoy.
Como dije al principio, ahora sí creo hallarme en el zénit de mi andadura vital, habiendo derrotado a mis enemigos y sido nombrado dictador vitalicio. La búsqueda ha sido larga y tediosa, pero en este tiempo he encontrado multitud de señales que corroboraban mi tesis y se entroncaban con los tiempos remotos. Una evidente, es que por aquel entonces me paseaba por el foro romano y hacía vida pública. Éste que visitáis ahora es su inequívoco equivalente, y es en él donde narraré mi PRODIGIOSA historia.
Dejo por último un útil enlace para aquellos que tengáis que refrescar un poco la memoria sobre historia romana: wiki