Si es que esto me pasa por meterme donde no me llaman. Ayer le pedí el teléfono a una chica que trabaja en un bar donde suelo tomar café. Me lo dio, pero cometí la tontería de darle un toque en ese momento para ver si me lo había dado bien.
Total, que me acababa de llamar, directamente, sin mensaje ni nada, para tomar algo. Por salir del paso (aparte de que es la pura verdad), le he dicho que tendría que ducharme y arreglarme un poco, vestirme, etc.
Me dice que vale, que luego sale con sus amigas y que ya me manda un mensaje para que me pase por donde están ellas.
Le pregunto que su novio… bueno, ¿qué cojones ocurre con su novio? ¿pasa de él o que? (evidentemente no con esas palabras). Y me suelta que han discutido y que hoy sale con sus amigas.
Vale, pues como lo ha dejado todo en el aire, no le he dicho directamente que no, pero como además de tener planes propios, paso de historias y de tener que tomar café en otro sitio, creo que directamente pasaré del tema poniendo alguna excusa. Si se pone en plan lianta pues le recitaré el punto uno del Decálogo de la amiga, a ver que tal.
Perfectamente me puede decir que he sido yo el que he iniciado esto, pero leñe… ¿Quién iba a esperar algo así después de casi dos años de sequía?.
Cosas que pasan, me voy a una timba de póquer semiprofesional con los seiscientos euros que hacen falta para entrar y otros doscientos para copas, en este momento me motiva mucho más.
Toma ya.