A ver, ridícula, que eres una ridícula. Si te tiran un billete de cincuenta a la puta cara y dicen "chúpame la polla" y tu te hincas de rodillas a chuparle la polla eres tú y sólo tú la que te arrastras, eres tú y sólo tú la que la chupas por dinero, eres tú y sólo tú la que eres inferior de los dos y tú y sólo tú la que pones el culo; tan inferior eres, tanto te arrastras y tanto pones el culo que, LITERALMENTE, es así como te ganas la vida.
Imagina a uno que tira una moneda al suelo con desprecio y otro se tira al suelo a por ella. ¿Quién es el muerto de hambre, el que la tira o el que se arrastra?
Es que ya está bien, coño. Ya está bien con que nos intentes hacer ver lo blanco negro, ya está bien con pretender engañar a todo el mundo con que vuestra vida es maravillosa y un sinfín de diversión y alegría cuando no es más que un mar de miseria humana, moral y personal como bien claro dijo evita en el post ese que tanto niega ahora, ese en el que califica su vida de la peor de sus pesadillas, ese en el que confiesa llorar por las noches, ese en el que dice haber perdido infinidad de cosas, ese en el que teme las reacciones de los demás cuando lo sepan, ese en el que reza por poder hacer otra cosa, ese que parece ahora que nunca escribió o que nunca fue verdad cuando resulta que es la única verdad que ha contado de su vida de puta, que es la misma que la tuya. Ya es suficiente con que os traigáis este paripé que no se cree nadie (y vosotras mismas tampoco) como para que encima vengas con soplapolleces de que "já, si te la chupé fue por dinero" y pretendas salir de digna en vez de salir de puta.