E
El Varón Salvaje
Guest
Hará de esto unos diez meses, finales de septiembre de 2020.
Contacté con ella en Sustitutas.com, que es donde más me gusta por los filtros y la info.
Una española de veintitantos, me pide que vaya a buscarla a un hotel porque acaba de terminar un servicio, así que sin problema.
Bajita, pero tiene buen tipo.
Por el camino me pide tomar un pequeño desvío para pillar farla y no me importa, muchas de ellas son consumidoras habituales y se ponen muy cachondas yendo encocadas.
Llegamos a su pensión, que es donde vive y ejerce.
Me cobra lo acordado y se queda en topless, una tetitas muy ricas; sin embargo, yo estoy esperando a que se vaya a duchar: ¡acaba de follarse a otro!
En lugar de eso se pone a dar la chapa y, cuando le pregunto si se va a ir a duchar, dice que en breves.
Me pregunta que si no le importa que consuma, le digo que adelante, y la tipa se saca un papel de plata y una botella de amoniaco.
No doy crédito.
Se va de la cama, se sienta en un cojín, se acerca una mesilla y a darle a la base.
Un olor insoportable a químicos, le pido que abra la ventana.
Le digo que he venido para recibir un masaje terminado con francés natural, y ella que esté tranquilo, que se está poniendo a tono.
Yo pasivo, esperando.
La tía comienza a ponerse de chungo, la cara descolocada y soltando idas de olla dignas de un psicótico deliroide.
Le insisto y me contesta de malas maneras: "has pagado por una hora y llevas casi tres".
Yo pase de que monte el lío, me denuncie por viogen y encima me encasquete la droja.
La tranquilizo y le digo que no pasa nada, que realmente estoy más a gusto así charlando, todo mentira.
Cuando se le acaba la farla se fuma un porro de hierba hasta arriba y se queda medio inconsciente al lado mío en la cama, así comienzo a meterle mano y ella totalmente pasiva.
Me pongo un condón y se la meto, pero eso está más dado de sí que una media de tubo en la cabeza de un atracador de los noventa. Enseguida se la meto por el culo haciendo la cucharita, ella ni siente ni padece.
Y después me quedo allí dormido con ella, porque casi está amaneciendo y no puedo con el cansancio, como para ponerme a conducir.
Me despierto a las doce y pico, por mi ciclo de sueño.
Ella está K.O., está acostumbrada a despertarse a las tantas de la tarde.
Sintiéndome estafado por un mal polvo y tener que aguantar semejante espectáculo, miro en su bolso, que está lleno de billetes. Cojo mis 100€ y me marcho de allí, bloqueando Whatsap, llamadas y SMS.
Ni sé ni quiero saber qué habrá sido de ella.
De lo más sórdido que he vivido jamás.
No vayáis nunca con putas españolas, toman a los clientes por idiotas.
Contacté con ella en Sustitutas.com, que es donde más me gusta por los filtros y la info.
Una española de veintitantos, me pide que vaya a buscarla a un hotel porque acaba de terminar un servicio, así que sin problema.
Bajita, pero tiene buen tipo.
Por el camino me pide tomar un pequeño desvío para pillar farla y no me importa, muchas de ellas son consumidoras habituales y se ponen muy cachondas yendo encocadas.
Llegamos a su pensión, que es donde vive y ejerce.
Me cobra lo acordado y se queda en topless, una tetitas muy ricas; sin embargo, yo estoy esperando a que se vaya a duchar: ¡acaba de follarse a otro!
En lugar de eso se pone a dar la chapa y, cuando le pregunto si se va a ir a duchar, dice que en breves.
Me pregunta que si no le importa que consuma, le digo que adelante, y la tipa se saca un papel de plata y una botella de amoniaco.
No doy crédito.
Se va de la cama, se sienta en un cojín, se acerca una mesilla y a darle a la base.
Un olor insoportable a químicos, le pido que abra la ventana.
Le digo que he venido para recibir un masaje terminado con francés natural, y ella que esté tranquilo, que se está poniendo a tono.
Yo pasivo, esperando.
La tía comienza a ponerse de chungo, la cara descolocada y soltando idas de olla dignas de un psicótico deliroide.
Le insisto y me contesta de malas maneras: "has pagado por una hora y llevas casi tres".
Yo pase de que monte el lío, me denuncie por viogen y encima me encasquete la droja.
La tranquilizo y le digo que no pasa nada, que realmente estoy más a gusto así charlando, todo mentira.
Cuando se le acaba la farla se fuma un porro de hierba hasta arriba y se queda medio inconsciente al lado mío en la cama, así comienzo a meterle mano y ella totalmente pasiva.
Me pongo un condón y se la meto, pero eso está más dado de sí que una media de tubo en la cabeza de un atracador de los noventa. Enseguida se la meto por el culo haciendo la cucharita, ella ni siente ni padece.
Y después me quedo allí dormido con ella, porque casi está amaneciendo y no puedo con el cansancio, como para ponerme a conducir.
Me despierto a las doce y pico, por mi ciclo de sueño.
Ella está K.O., está acostumbrada a despertarse a las tantas de la tarde.
Sintiéndome estafado por un mal polvo y tener que aguantar semejante espectáculo, miro en su bolso, que está lleno de billetes. Cojo mis 100€ y me marcho de allí, bloqueando Whatsap, llamadas y SMS.
Ni sé ni quiero saber qué habrá sido de ella.
De lo más sórdido que he vivido jamás.
No vayáis nunca con putas españolas, toman a los clientes por idiotas.