Curiosamente a mí también me regalaron un husky cuando el chucho era un cachorro. 14 años vivió.
En verano me lo llevaba al Pirineo o a un chalet donde el clima era más benigno, y si nos pillaba en casa solía tener el AA encendido.
Un perro de esas razas necesita mucho ejercicio al día, al ritmo ese que llevan rapidillo. Entre semana salía bastante a menudo a la calle (4 veces mínimo), y los findes a la montaña o a la marjal, a que se cansase. Por la zona de los Altos del Toro suele nevar varias veces al año, con un frío de cojones y se tiraba en la nieve y se metía en los ríos. A pesar del curioso carácter de los huskies diría que es el mejor perro que he tenido, junto a una pastor alemán.
En una zona de montaña cerca de Sagunto conocí a uno que tenía seis o siete y los entrenaba para carreras de trineos en la nieve.
Pero
@Ferris, precisamente a esas razas les afecta aún más el azúcar; ya vivió bastante la pobre me parece a mí.