Aún recuerdo cuando se fumaba en los garitos, restaurantes y discotecas (...)
Y ascensores, autobuses de línea, aviones, los profesores en clase, en los hospitales, en el coche... una asquerosidad. La primera vez que estuve en EE.UU. (año '98) nos alojamos mi mujer de entonces y yo en un hotel en Nueva York (el Milford Plaza) que tenía en la entrada esos macroceniceros que ahora se ven por aquí, pero entonces nos pareció curioso cuando menos. Había
entonces la posibilidad de pedir habitación para fumadores, cosa que hicimos porque fumábamos (aunque poco) y nos la dieron en lo más alto (habitación ya abuhardillada); nada más salir del ascensor, un olor nauseabundo nos embargó porque estaba metido hasta en la moqueta. Y la habitación todavía peor y encima con las ventanas condenadas (no se podían abrir, no sé si para evitar
accidentes), un horror.
En muchos países más avanzados que el nuestro está prohibido fumar en terrazas y espacios al aire libre en general habiendo zonas apartadas reservadas para tal fin (en algunos casos con pantallas de metacrilato perimetrando el pequeño área).
¿Sabéis qué? Poco se habla de los puros, y aún quedan vivos unos cuantos carcamales aficionados a esa hediondez.
Estaba yo el otro día en una terraza tomando unas tapas (...)
Hace no mucho estaba en una terraza y al lado una
dama fumando y dos fulanos. Por la brisa me llegaba
algo de humo, pero da por terminado el cigarrillo, lo tira sin apagar cayéndome a menos de 1 m y entonces sí que me llegaba de pleno, me levanto y de un certero puntapié lo lanzo y les cae justo en medio de donde estaban los tres. Algo balbuceó que no sé porque ni la miré. Después se cambiaron a otra mesa más alejada y ella siguió fumando (uno tras otro).
El día anterior en otra terraza, tres
damas fumando al lado (obviamente vinieron después de mí). Una se pone a escasa distancia, brazo derecho extendido y con la uña del pulgar dando toques para hacer saltar la ceniza a sólo cm de mi pierna. Le digo:
-Me está viniendo todo el humo
-¿?
-
Y me vas a acabar quemando el pantalón...
¿es que no lo ves?
-Mimimimimimimi (o algo así)
Otra vez (hace años) en la playa, voy a recoger y veo que tengo 3 hermosos agujeros en la toalla (era día ventoso). Un fumador que había habido cerca ejerciendo su libertad y el viento completando el efecto. Por no hablar de los
cerdos que dejan la playa llena de colillas.
Yo lo dejé en 2002 y no soy de la liga antitabaco, pero sí de la liga contra los que molestan (ojo: sólo pretendo lo mismo que yo a ellos dado que
no les molesto), así que los que fuman... que se vayan a donde no molesten...