En el primer sitio estuve un par de días porque aquello me escamaba y no iba mucho conmigo, no era posible llevar un perfil bajo como me gusta a mí. En el segundo sitio estuve un poco más de un més porque calaron en mí las promesas de dinero en abundancia del primer sitio. No sé si recuerdas esa época
@ilovegintonic ,hablábamos mucho por messenger y yo te cantaba canciones de Héroes del Silencio. En el primer sitio estuve en marzo aproximadamente y en el segundo en diciembre. Era 2008, Estados Unidos estrenaba presidente nicra y Lehman Brothers acababa de cerrar, la tormenta de caca se empezaba a atisbar en el chorizonte. Ya en el primer trabajo advertí que los que habían entrado conmigo no eran más que unos golfillos. No tenía mucho que ver con ellos, yo tenía otro estilo más nerd. Recuerdo que uno se presentó con traje combinado con unas nike cortez, puro lol. En este primer sitio, que estaba en el barrio de Salamanca, había una sala bastante grande, supongo que un vistoso salón de la alta burguesía en otros tiempos convertido en una "sala de ventas" con una campanilla que se tocaba cuando alguien vendía ago, detalle que comenté a ILG por el mencionado msn, pareciéndole gracioso y molongui. Nos dieron un guión que teníamos que memorizar del que no recuerdo más que versaba sobre las bondades de las acciones de timofónica y el símil del terreno para explicar el apalancamiento financiero.
Este dichoso apalancamiento financiero era la clave de bóveda de estos chiringuitos. En este primer lugar el apalancamiento era con
warrants, en el segundo con
opciones. Son cosas muy parecidas pero había diferencias muy sutiles que no recuerdo bien. Se explicaba con un burdo ejemplo de un terreno por el que das una señal para obtener el derecho de compra por un precio, luego llegas a un acuerdo de venta por más dineuros y dindindindin ganas euros por doquier porque eres listo como un roboc. Aquello olía a culo y engaños y antes de que me hicieran contrato y mierdas me largué de ahí.
Como no encontraba lugar alguno en el que emplearme, en otoño volví a la carga por el lol y me busqué otro trabajo de estos en otro sitio. Fue muy fácil encontrarlo puesto que en aquella época infojobs rebosaba con ofertas de "asesor financiero" para trabajar ¡en la bolsa! y ganar mucho dinero. Empezamos muchos, como 15 gilipollas con trajes baratos con las mangas llegando a los nudillos. La mayoría tenía experiencia como comercial de puerta fría y cosas así. Nadie tenía estudios y si los tenían no estaban relacionados con la economía, ni mucho menos. A los tres días quedábamos sólo cuatro y una vez efectuada la criba nos hicieron contrato y nos aseguraron como dios manda, todo hay que decirlo.
El trabajo era cosa de llamar por teléfono una y otra vez durante las 8 horas. Había una especie de cestas llenas de tarjetas de cartón que eran las fichas de los clientes ya quemados por varias promociones de "asesores financieros" previas. Los clientes frescos que hacían en el departamento de marketing (unas chonis que se pillaban las páginas amarillas y llamaban a todos los teléfonos que había) se los daban a los veteranos. Con estos mimbres poco se podía hacer, y si a eso le sumamos que la inversión mínima eran 15.000€ la cosa se volvía difícil no, LO SIGUIENTE. Lol. Las tarjetas tenían escrito a modo de título "no me leas, llámame". La idea era pillar una y llamar, luego ya podías leer o no las anotaciones previas. Recuerdo que en algunas habían escrito cosas como "le llamo y se pone a golfear" o "me empieza a insultar y cuelga". En una ponía simplemente "bestia parda". Al llamar comprobé que efectivamente ela persona que contestó era muy bestia, por la forma en la que gritaba debía ser uno de esos vascos que levantan piedras a pulso. Y así ocho putas horas, una llamada tras otra, negativa tras negativa, a veces con insultos y a veces dando una mínima oportunidad para vomitar las cosas que habías memorizado del guión que dieron el primer día.
Los futuros inversores que eran captados firmaban un contrato con la empresa por el asesoramiento y luego se les abría cuenta en el Lloyds Bank y otra en un broker alemán. El dinero estaba siempre a nombre del cliente, nadie metía la mano ahí pero un tonto y su dinero no están mucho tiempo juntos. Lo sorprendente es cómo engañaban a gente pudiente. La venta era muy agresiva, se usaba un tono de voz "directivo" y se pasaba por encima de toda formalidad. A mí, que soy de natural educado y de PERFIL BAJO me llegaron a coaccionar los "ejecutivos" (los jefecillos que andaban por la sala metiendo caña) para que insultara a la gente, supongo que para foguearme y perder el decoro. El que se encargó de la formación de mi grupo era un tipo que reconocía abiertamente haber sido traficante de droga y consumidor de dicha droga. Contaba anécdotas lol como que una vez, emparanoiado por la drogaína, se puso a dar vueltas a una columna de garaje pistola en mano convencido de que un ladrón estaba detrás. Decía tener una novia rusa que era modelo internacional y haber ganado 60k€ en un mes en su buena época. A mí me llegaron a enseñar la fotocopia de una nómina de 110k€, lo que un asesor del departamento de reinversiones ganó un mes bueno que tuvo. De ese tío, que era PCM y venía en moto a la oficina, decía el drogainómano que había comprado una casa en Brasil a tocateja. Repetían muchas veces que ese trabajo te cambiaba la vida, que si te lo tomabas en serio podías ganar muchísimos dineuros. Una vez que coincidí en el ascensor con el PCM de la casa en Brasil me preguntó que qué tal lo veía y me animó diciendo que viera la peli El Informador, la misma que han mencionado ahí arriba.
Nos pusieron este vídeo, más a la española.
Risitas de condescendencia y aprobación. El informador es mucho más sofisticada, el PCM tenía más clase que los jefecillos de sala, por eso estaba en reinversiones ganando cantidades ingentes de dinero.
El desánimo y la ansiedad me comían vivo y empecé a flaquear hasta que un día ya dije que no quería seguir. No vendí nada, por supuesto. Pensaba que lo que estaba haciendo estaba MAL, estaba intentando ENGAÑAR a la gente. Tuvieron el detalle de darme los papeles del paro, un gesto cojonudo, en ese sentido se comportaron de manera impeclable. El finiquito, que fueron 60€, lo empleé en comprar esa misma mañana el Call of Duty: World at War. Me fui dando un buen paseo al fnac de callao esa fría mañana, y casualmente una zorrita de la radio estaba entrevistando a la gente. Me interpeló haciéndome unas preguntas que curiosamente ibasn sobre términos financieros que yo desconocía. Como soy gilipollas finalicé la entrevista, que estaba siendo grabada con magnetófono, diciendo que justo me acababan de despedir de una empresa del sector bancario, subrayando mi ignorancia de un modo extraño. Gilipollas perdido.
Después de unos años pasé casualmente por el edificio donde estaba y había un cartel de "se alquila" en la ventana de la oficina. Busqué en internet y vi que habían salido en los papeles porque habían sido denunciados por unos cuantos desgraciados que habían palmado muchísima pasta.