Señor administrador Ilovegintonic.
Conocida la mano de hierro con la que maneja las riendas de la diligencia enloquecida que es Esta Santa Casa en ocasiones, sabiendo cómo corrige la velocidad de la misma cuando nos aproxima al abismo, tengo a bien dirigirme a usted con humildad, pero con firmeza, para solicitarle dos baneos:
1. En primer lugar, el del autor de este nauseabundo relato. La historia del increíble niño menguante no sólo es inverosímil, sino que está escrita por un chimpancé o por un ser humano que no ha superado la capacidad cognitiva de un chimpancé. Si en dos años de forero no ha logrado llegar a producir nada mejor, este clon decididamente no sirve.
2. Al autor de este post (y de 56 similares) por motivos evidentes: