Partido disputado de igual a igual, con un Sevilla dominador en la primera parte y un Madrid que ha sabido guardar la ropa en el segundo tiempo para meterle una marcha más en los últimos 15 minutos que han pillado un poco desfondado al equipo andaluz.
El chicharro de Vini es solo otra constatación más de que el brasuca ha venido para quedarse, ya no se discute si el chaval vale para el Madrid o no, ahora hay que calibrar el nivel de estrella que va a llegar a ser. Hoy el cerdilla lo ha anulado prácticamente durante todo el encuentro de manera admirable y en cuanto le han aflojado la correa se ha sacado un par de acciones de peligro y la jugada del chicharro. Esa influencia solo está al alcance de los elegidos, ya solo queda esperar si rompe en crack mundial o se queda en gran jugador de destellos o de figura de andar por casa.