Yo pensaba que aparte del físico o la vestimenta, la mujer se podría sentir atraida por otras cosas, pero ya esta claro que no hay nada que RASCAR ni TRUCO
que lanzar.
Pero qué cojones, cómo eres tan sinvergüenza de venir y solar esa frase queriéndote ir después tranquilamente.
En cada hilo que has soltado tus dudas e incredulidades sobre el acto de la seducción se te ha explicado aquí lo que hay en ello. Tú, siempre y cada una de las veces, has entendido lo que te ha dado la puta gana y te has quedado con lo que te favorecía de lo que te hemos dicho numerosas veces numerosas personas de este santo foro: ninguna. Y como era ninguna tu lógica te dice que todos estamos locos y equivocados, que somos poco menos que los caballos de los jinetes de los toros: personas con los ojos tapados de manera que sólo podemos ver un único camino, imposibles de ver los demás.
Y, mira chico, no. No es así. Aquí se te ha dicho lo que hay, el camino que hay que recorrer, las zapatillas que tienes que llevar, por explicar se te ha explicado hasta que para andar primero tienes que mover una pierna y luego la otra para que tu cuerpo siga el proceso. Pero siempre has preferido negar la realidad que se te mostraba de frente. ¿Por qué? Porque está mejor pensar que todo el mundo está jodido y funciona mal a admitir que de tu mala situación el causante y principal problema eres tú.
Siempre buscas un clavo ardiendo al que agarrarte para dar la escapa madre hasta que vuelves a aparecer para contarnos, otra vez, los mismos errores en cómo afrontas cualquier 'ligue' y nosotros, inocentes, otra vez, te leemos, discurrimos y aconsejamos cómo tienes que corregir estos errores, te indicamos que ese camino que crees que está asfaltado y es una autopista alemana en el fondo es un puto camino de cabras con baches, raíces de árboles y cuestas que lo hacen impracticable. Pero tú erre que erre.
¿Lo peor? Que no quieres aprender ni aceptar que lo que aquí se te dice es real. ¿Te acuerdas lo que pasó con la dedos gordos esa, la del garaje, que el anormal de Edelgays intentó ser un caballero blanco con ella? Tú te las dabas de triunfador ante nosotros, te decíamos
eso huele mal, amigo o
ese detalle al que no prestas atención te da mucha información y no precisamente buena, por ejemplo, pero tú nos respondías riéndote de nosotros que
sabías lo que hacías, que a esa dama la tenías comiendo de tu mano. ¿Qué pasó? ¿Lo recuerdas? Cuando le dijiste que a ver qué pasa aquí, se folla o no se folla, te dijo bien claro que claro que se folla pero CONTIGO NO.
¿Quién te dijo que se venía venir eso? ¿Quién? ¿El comando kaleji o tus hermanos foreros? ¿Quién no te bailó el agua y te dijo la realidad para que cogieras el toro por los cuernos ya que estabas a tiempo para corregirlo? Pues tus hermanos foreros. Esos mismos a los que vuelves cada cierto tiempo y en vez de mandarte a tomar por culo, como hará mucha gente de tu entorno social y con razón, te volvemos a escuchar, te volvemos a explicar las señales que estás obviando y te volvemos a dar las pautas para que pongas fin de una vez a esa espiral autodestructiva que llevas en tu vida sexoafectiva.
Porque a ti te gusta follar, quieres follar. No eres como
@Max_Demian o
@BILBOKOA que pasan de follar. No, tú eres como yo, como
@miliu, como
@Sonic88, como
@naxo, como
@ilovegintonic y como cualquier otro puto forero que nos gusta meter la polla aunque sea un maricón como
@John McClane. Te gusta tanto follar que estás dispuesto a bailarle el agua a la cerda de la dedos gordos por la esperanza de que te haga una paja con esos dedos rechonchos, dispuesto a ir desde Cuenca hasta a Atocha para tomar un café con una vieja de +60 años a la que no habías visto en la vida por si te la podía chupar y notar sus encías masajeándote la polla, irte a un narcopiso tutelado por Asuntos Sociales no vaya a ser que la yonki esté por la labor de dejar que se la metas, o hacerte sin ninguna puta necesidad un viernes por la tarde más de 40 kilómetros en coche para cenar con una cincuentona la tristeza de menú que nos enseñaste.
Hostia, ¿quieres follar? Aquí te explicamos cómo: no hay secretos, no hay trucos, no hay atajos más allá de las putas, no existe chasquear los dedos y ya tener una tía dispuesta a follar.
Hay muchísimo que rascar pero tú no quieres, cabrón.