Davenport necesitaba ese cuello para poder tragar whoppers sin necesidad de masticar, cual anaconda.
Hablando de la Martínez, creo que fue ella la que dijo en una entrevista, siendo preguntada por el fenómeno kournikova, que esta tenía la costumbre de pasear totalmente desnuda por los vestuarios, a la vista de todas y por joder, nada mas, lo que era motivo de envidias y admiración. Recordar que en aquella época se debatía sobre su valía como tenista y su alejamiento de las pistas por modelar y tal.
No se que habría pasado si se encuentra sola en el vestuario con una mauresmo con los cuernos retorcidos.