No soy discípulo de Rand, maldito senil.
Sólo te pongo un ejemplo de cómo no es necesario ser "rojo" para ser ateo o agnóstico.
De hecho es a la inversa.
Pero mira, te hago un rastro secular de obras en las que el cristianismo se convierte en puro colectivismo moderno:
La República (Platón, 375 a.C.), La Biblia (recopilada y seleccionada por neoplatónicos, 325), La Ciudad de Dios (San Agustín, 426), Regla de San Benito (Benito de Nursia, 530), Summa Theologiae (Tomás de Aquí no, 1274), El Espejo de los Pecadores (Pedro de Luxemburgo, 1390), Utopía (Tomás Moro, 1516), La ciudad del sol (Tommaso Campanella, 1602), La Nueva Atlántida (Francis Bacon, 1627), La ley natural (Richard Cumberland, 1672), Código de la naturaleza (Morelly, 1755), La Nueva Jerusalén (William Blake, 1804), Manifiesto del Partido Comunista (Karl Marx y Friedrich Engels, 1848), El cristianismo primitivo y el socialismo moderno (Friedrich Engels, 1894).
Así que la próxima vez que vayas a soltar que el ateísmo es cosa de "rojos", mírate en el espejo, y repásate primero un poco la historia y filosofía de tu propia religión.