Objetos cotidianos confundiplas

Tengo un nectarino junto a un rosal, indivisibles. Ambos de más de 3m.
Viniendo de una boda de una prima le dimos la rosa a mi suegra quien la clavó en un tiesto. Otro dia se comió una nectarina y echó el güito el el tiesto.
Agarraron.
Al año siguiente los planté en mi casa.
.Cada dos años da una cosecha enorme de nectarinas riquisimas.

Fin del offtopic.
Foto de eso. Se ve que tu suegra está bendecida por la diosa de la fertilidad, cosa que ya sospechaba a tenor de las tetas de tu mujer y de la nena. Que se la folle Curro si es que quiere ser padre de una vez.
Por cierto, sabrás que ese rosal se mantendrá vivo mientras el amor del matrimonio perdure, si ves que se seca es que el divorcio está próximo.
 
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Yo a veces confundo a las personas con bichos.

A mí una vez Almirante Farlopas me mandó una foto suya así de espaldas con todo el pelazo rubio por el que tantos foreros han perdido la cabeza.

Noté los brazos un poco raros pero no dije nada.

También le sugerí que podía dejarse el pelo un pco más largo, que le quedaría bien.

Fue entonces cuando me dijo que en la foto ella estaba de frente con el pelo echado hacia delante tapándole toda la cara.

Salí del paso como pude, abochornado, y así terminó nuestra historia de amor.

Me alegro que no tenga los brazos deformes, menuda confusión más tonta.
 
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En la calle, iba hablando por el selular, me dirijo a mi coche que estaba aoarcado. Lo abro, me siento, sigo hablando por el.móvil.
Meto la llave en el contacto. No arranca , le cuesta girar la llave, meneo un poco el.volante. No va.

Me había metido en el coche de otro. Un Xsara gris igual al mio, aparcado tras el mio.

Lo curioso es que la llave me abrió la puerta

Ka®ma despistá




brí

Me pasó lo mismo con mi ford Escort rojo del 88, solo que yo lo tenía aparcado en paralelo y no en línea. Iba con un colega y nos dimos cuenta al montar que el coche estaba más limpio. Al levantar la vista ya vimos a una mujer que venía corriendo hacia el coche. Menos mal que giré bien la llave, porque si la llego a girar al revés le hubiera cerrado el coche, las llaves de Ford cerraban todos los Ford, ya que había dejado sus llaves puestas en el contacto.
 
Yo he dado la mano por la calle a mujeres y niños que no eran los míos. A veces hubiera salido ganando con el cambio y otras no. Lo peor es que llevaba las gafas puestas.
 
Si consideramos objetos a las personas, entonces vale como anécdota. O defecto. O maldición, a saber.

En cualquier grupo humano con el que tengo que relacionarme, inicialmente, mi cerebro es totalmente incapaz de retener los nombres. Eso sí, funciona lo suficientemente bien como para poner motes a todos y recordarlos sin problema alguno.

Claro, que en vez de entrenar el memorizar los nombres, he entrenado el asociar los motes a los nombres, con lo que cada vez que me dirijo a alguien, me toca buscar la equivalencia y aplicarla.

Y no, no he llamado a nadie por su mote, nunca, ni siquiera cuando sus motes son "puta", "hijo de puta", "comepollas", etc, aunque sí que he llamado a alguien por un nombre que no es el suyo a sabiendas y repetidamente, pero es por dar por el culo y que se note.
 
Espero no ser el único que ha saludado efusivamente a alguien por error, preguntandole por su vida y temas random, y él contestar dubitativo, y a mitad de la conversación darte cuenta de que te has confundido de persona y que el otro piensa que estás loco y te está siguiendo la corriente.

Es algo bastante perturbador.
 
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Que malvado el tío.

Maldad es aderezarlo, no se confunda. Algo así como entrar en el ascensor con "el follaperros subnormal del quinto", al que conoce perfectamente por las reuniones de propietarios y que se llama, pongamos, Cándido.

-Buenas tardes, Plácido.
-Buenas tardes, pero me llamo Cándido, como muy bien sabes.
-Lo siento, Plácido, esta memoria...¿qué tal tu perro Nabucodonosor III, y la listeriosis que se agarró la primavera pasada?

En ese plan, le quiero decir.
 
Me hace eso a mí un vecino y de la hostia que le suelto se traga las muelas. Vamos, que eso se lo harás a algún tonto, porque las personas normales no aguantamos los vaciles ni las gilipolleces a nadie.
 
Espero no ser el único que ha saludado efusivamente a alguien por error, preguntandole por su vida y temas random, y él contestar dubitativo, y a mitad de la conversación darte cuenta de que te has confundido de persona y que el otro piensa que estás loco y te está siguiendo la corriente.

Es algo bastante perturbador.

Día random de hace unos cuantos años, voy a poner gasolina y tal y de repente veo que un pelirrojo conocido sale de un coche de al lado. Nos quedamos mirando, me sonríe, le sonrío, nos acercamos afables, nos chocamos las manos y tal:

Pelirrojo: Hey tío, qué tal estás
Césped: Bien, ¿y tú figura?
Pelirrojo: Muy bien, la verdad, cuánto tiempo, cómo va la vida.
C: Pues nada, aquí saliendo de currar. ¿Y tú?
P: Aquí, haciendo mis cosas
C: ¿Cómo acabaste la universidad? (era un compañero de clase de antaño)
P: Qué dices loco, si yo nunca he ido a la universidad. Veo que sigues teniendo el mismo humor
C: (Bastante desconcertado) Sí sí, ya sabes, bueno, voy a pagar y tal...

Cada vez que me cruzo con un pelirrojo (menos mal que no es a diario) me acuerdo de esa conversación, y no consigo recordar quién coño era. Porque mi compañero de clase no era...
 
Día random de hace unos cuantos años, voy a poner gasolina y tal y de repente veo que un pelirrojo conocido sale de un coche de al lado. Nos quedamos mirando, me sonríe, le sonrío, nos acercamos afables, nos chocamos las manos y tal:

Pelirrojo: Hey tío, qué tal estás
Césped: Bien, ¿y tú figura?
Pelirrojo: Muy bien, la verdad, cuánto tiempo, cómo va la vida.
C: Pues nada, aquí saliendo de currar. ¿Y tú?
P: Aquí, haciendo mis cosas
C: ¿Cómo acabaste la universidad? (era un compañero de clase de antaño)
P: Qué dices loco, si yo nunca he ido a la universidad. Veo que sigues teniendo el mismo humor
C: (Bastante desconcertado) Sí sí, ya sabes, bueno, voy a pagar y tal...

Cada vez que me cruzo con un pelirrojo (menos mal que no es a diario) me acuerdo de esa conversación, y no consigo recordar quién coño era. Porque mi compañero de clase no era...

A mí me han confundido varias veces con otros.

En una ocasión en la universidad me confundieron con uno que por lo visto era el encargado de llevar las bebidas a una fiesta de la primavera o algo así.

Total que el mamón me dio una lista de las bebidas que tenía que pedir al proveedor y el teléfono del tipo y ya, y que lo llamase ese mismo día que no se me olvidase.

Por supuesto tire el papel ese a la papelera y reflexione sobre lo raro que es todo.

A la fiesta no fui, esperemos que no faltase bebida.
 
Ah, y otra vez le di dos besazos a una señora mayor que confundí con mi tía, a la que veía muy de vez en cuando.

Ni recuerdo que le dije, algo así como "usted perdone que creo que la he confundido con mi tía"

La pobre mujer soltó una risa nerviosa que a saber lo que había pensado al darle los dos besos...
 
Me lave los dientes con un pomada para las heridas.

La metí en un culo pensando que era un coño.

Pelé un platano y lo tiré quedándome con las cáscara en la mano como un imbécil.

He comprado varias veces discos que ya tenía... Y solo me he dado cuenta al guardarlos y ver una copia idéntica
 
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Día postcogorza meter botellines vacíos en el lavavajillas. Mear al lado de la taza al ver el borde y apuntar hacia el lado de fuera.
No he confundido a nadie salvo una vez en Hacienda que un tipo que no conocía y que hacía cola me ayudó amablemente y al salir creí encontrármelo de nuevo y le di las gracias. Me contestó pero no era el mismo, seguía en la cola, solo que ese también llevaba gafas y barba.
 
Pelé un platano y lo tiré quedándome con las cáscara en la mano como un imbécil.


:lol::lol:

Me pasó algo parecido una vez. Había parado en un área con otro de la empresa que había aparcado allí también, y al levantarnos por la mañana saco una bolsa con la basura para tirarla a la papelera en una mano y la cartera en la otra para ir al bar a tomar café antes de salir.

Tiro la cartera a la papelera grande y me quedo con la bolsa de basura en la mano como un subnormal.

Cuando el compañero se acerca me ve rebuscando entre la basura y me suelta "Illo, tanta hambre tienes? Si quieres te dejo veinte euros.

Estuve toda la mañana riéndome como un retarded.
 
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Cada vez que me cruzo con un pelirrojo (menos mal que no es a diario) me acuerdo de esa conversación, y no consigo recordar quién coño era. Porque mi compañero de clase no era...
Tal vez fuese una confusión recíproca. Usted lo confundió con otro y él a su vez con usted. Difícil pero no imposible, se puede dar. Algo así como un doble knock out.
giphy.gif


No he confundido a nadie salvo una vez en Hacienda que un tipo que no conocía y que hacía cola me ayudó amablemente y al salir creí encontrármelo de nuevo y le di las gracias. Me contestó pero no era el mismo, seguía en la cola, solo que ese también llevaba gafas y barba.
Me pasó algo parecido. Estuve en un trabajo varios meses viendo a dos compañeros en momentos diferentes pensando que eran la misma persona. Eran de otro turno y los veía de refilón sin tener trato practicamente. El lol fue cuando los vi juntos dándome así cuenta de que eran dos personas distintas. No, no eran gemelos ni nada. Tenían cierto parecido físico pero no eran clavados.
 
Yo confundía a @Lebrom con @HerbMan hasta el cojagate, ya sé distinguir uno del otro.
Como objetos confundiplas, he confundido más de una vez el móvil con el mando a distancia de la tele o el del aire acondicionado, sobre todo cuando estoy echado en el sofá en plan viejo con la manta.
 
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Yo una vez iba colocado de hongos. Estaba en el parque, en lo alto de una loma, dibujando. En la ladera adyacente al lago había grupos disfrutando del día soleado. De repente llegó un grupo con un GIGA perro. Yo, con mi colocón, lo veía como un león de grande. No me terminaba de gustar que una criatura que podría matarme de un bocado anduviese por ahí suelta oliendo culos, pero bueno. Se acercó a un pastor alemán y este se veía ridículamente pequeño a su lado. Era una bestia formidable. Posiblemente un mastín napolitano. El caso es que me quedé con la copla; se llamaba Hitler el monstruo aquel.
Un día, semanas más tarde, saliendo del supermercado me cruce con el perrito y su dueño.
-Heeeeey Hitleeer, que taaal?
No, no era el mismo perro, ni el mismo dueño. Y me miró bastante mal, claro.
 
Una noche que iba bien tomado, en un disco club, fui a mear y para no dejar la cermeza la lleve conmigo, total que mientras meaba me dispuse a echar un trago, al final me bebí mi nabo y mee la cerveza, confundí el botellín con el miembro y la volqué como si estuviera meando.

Pues yo eso lo he visto hacer delante de mis ojos.

Un amigo que era un cachondo (ese día entre otras cosas, se dedicaba a robar la bayeta sucia de la barra de la discoteca y se la ponía en el hombro a desconocidos que iban con americana, un puto descojone para nosotros ver a un tio bailando con el cubata en la mano, intentando ligar con una bayeta en el hombro :lol:) pues luego se meó en un tubo de cerveza a medio acabar, y lo dejó al lado de la tarima donde bailaban los de nuestro grupo de amigos y conocidos. Uno que estaba en la tarima se agachó y cogió el vaso y se lo llevó mientras le hacíamos que no que no con las manos, entre la oscuridad y la música a toda hostia no se dio cuenta y le metió un buen sorbo al vaso. En seguida se dio cuenta que algo pasaba y dejó el vaso otra vez con la mirada perdida y expresión en los ojos de "diosss me acabo de beber un meao, como salgo de esta...?" siguó bailando unos segundos y se marchó rápido al lavabo.

Los dos colegas y yo por el suelo literalmente descojonándonos con la mandíbula desencajada. :137:Nunca le dijimos nada.

True story.
 
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Taba yo con mi hermano mayor, siendo niños, en casa. Y voy yo y le pido algo, ya ni me acuerdo, me lo da, y como nunca me daba las gracias cuando yo le prestaba algo y como un resorte me salió un ME DAS LAS GRACIAS, NO? Y me las dio, y yo de dije que de nada. A los pocos segundos, el pobre diablo cayó en cuenta de que lo habíamos hecho al revés y vino a decirme que lo repitieramos pero esta vez diciéndolo bien. Cosas de niños. A lo cual yo me reía y decía que nanai. Entonces corrió hacia mí me cogió del cuello con fuerza y me dijo con mucha seriedad y cierta agresividad contenida VAMOS A HACERLO AL REVÉS Y BIEN. Yo callé unos instantes y dije no sin cierta malicia, suavemente pero con firmeza: "No". Aquellos golpes no fueron bromas, la violencia se desató sin piedad. Muebles volcados, sangre en el piso, Frases como "Helter skelter" y "political piggy" pintadas en las paredes del salón. Perros de vecinos aullando... Lo más inverosímil de todo, es que cuando nuestra madre nos preguntó por separado que por qué lo habíamos hecho, quedó estupefacta al escuchar la misma frase idéntica en sus dos retoños: "porque es un cerdo".

Chabules, no confundáis las cosas.
 
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