Recuerdos de una crisis que nunca terminó

No sé con qué tipo de gente os habéis juntado, la verdad. Todo el rato se reían de vosotros. Si se iban a Londres a fregar platos se reían de vosotros porque os quedabais en España, si se compraban un piso por un precio disparatado se reían de vosotros porque vosotros no, si se compraban un BMW se reían de vosotros porque llevabais un polo, si no tenían estudios se reían de vosotros porque ellos se sacaban morteradas de dinero mientras vosotros erais ratillas de biblioteca.
Vaya ojo clínico para elegir amistades
En la época previa al petardazo, todo aquel que disfrutaba de una buena situación por estar subido en la burbuja miraba por encima del hombro al que no.

El comercial de perilla recortada y pelopincho de Tecnocasa iba de tiburón de Wall Street con corbata verde y zapatos de punta, y te mostraba como un puto logro el haber vendido un piso, como si hubiera negociado la fusión de dos corporaciones multinacionales. Se presentaba como un hacha de los negocios, un Gordon Gekko redivivo, cuando la realidad es que cualquiera con un piso lo vendía porque el dinero para comprarlo era gratis.

Cualquier encofrador hacía ostentación de billeteh, llavero de BMW y comilonas. El que compraba un piso se ufanaba de que por fin él también era propietario y de que mañana, literalmente mañana, su piso valdría veinte mil euros más porque los pisos no bajan de precio nun-ca, por lo que además de propietario era también un avispadísimo inversor. Y, por un piquín más en la hipoteca, además se iba a Punta Cana a celebrarlo, y tú tranquilo, que si mañana la cosa va mal lo vendo y me gano un 50%, que te repito que los pisos nunca bajan.

Eh, y no hacía falta tener amistades para oír esto. A ver si es que ahora hace falta ser amigo de nadie para que llegue un tío a darse pisto en tu cara.
Por dios,los de podemos
Los de Podemos no pintan una puta mierda en este hilo que habla de los recuerdos de la crisis del 2008. A ver si aprendes de una putísima vez a no engancharte en todos los putos offtopics, que esto no va sólo de no provocarlos, sino también de no seguirlos.
 
Creo que las dos opiniones, la mía y la vuestra (@yonoloestoy lo ha expuesto un poco antes) son compatibles. Estoy totalmente de acuerdo en que no nos gusta ver en qué se desperdicia y desvía el dinero que ponemos sobre la mesa, como también nos disgusta ver que, una vez malgastado o directamente robado, no se depuran todas las responsabilidades adyacentes (empezando por exigirlas nosotros mismos como contribuyentes). Lo que añado es que, además de ese desagrado en dar dinero a sabiendas de que no se va a gastar adecuadamente, llevamos de serie un chip para ser más listos y no pagar. Pero vamos, que no sucede sólo con las cuentas, el gen pícaro español opera del mismo modo en otros muchos ámbitos: tú tira, tú dale, tú hazlo, que nadie nos está viendo. Yo el primero, el más listo, que los demás son tontos si no lo hacen. Si puedes, te cuelas en la cola del supermercado, reservas plaza en la playa pinchando la sombrilla al despuntar el sol, te pones a adelantar a150 km/h o das 50 céntimos de menos en la vuelta.

Lo de las normas no va con nosotros. Tenemos un grave problema de educación. Y una sociedad que ni paga ni reclama, poco puede hacer contra una clase política que roba y malgasta.
En plena crisis pedí un permiso de obras para arreglar una entrada a un terreno. Se me denegó por que esta dentro de una zona de protección arqueologica y no se podían hacer obras. Yo solo iba a extender un camión de hormigón a la entrada para entrar bien con el coche y ya esta. En el despacho estaban el alcalde y el aparejador municipal.

Hay dos maneras de hacer las cosas en esta vida, pidiendo permiso y pidiendo perdón, les dije.
Que quieres decir con eso? Me preguntó el aparejador
Que ya he pedido permiso.
Ahhhhh.... murmuro
Oh. Respondí yo

Me fui mosqueado y saliendo del ayuntamiento pedí la cuba de hormigón. Al día siguiente a las diez de la mañana ya estaba extendido y estábamos comiendonos un almuerzo de los currantes en un bar el que me ayudó y yo.

Eso si, no voy a negar que pase un par de semanas con el culo apretado por si me denunciaban.
 
Va mucho con la idiosincrasia española reírse de los estafados y no señalar y castigar al estafador

Podemos darle la vuelta, y señalar que sabemos que el estafador y castigador es el mismo al que votamos cada cuatro años, y que por qué tenemos que subvencionar la estupidez de los subnormales. Mire si tiene lecturas este tema.

De los que dice Naxo yo también conozco unos cuantos. Gente a la que le decías que eso era un error, que mirara un piso en otro pueblo que había mas baratos y mas cercano a su trabajo. Que la cosa se estaba poniendo fea, que no se metiera en esa trampa... Coño, para eso están los amigos. A veces solo necesitas que alguien te de un consejo, un aviso para que abras ojos o te plantees las cosas de otra manera. Y en mi caso, puedo decir que algunos se plantearon las cosas al hablar con ellos, pero uno de ellos me mandó a la mierda y no me habla desde entoces

La codicia, estimado, es un tumor cerebral. Se aloja, la hija de puta, y ya no sale, a nada atiende, ni a amigos, ni a razones.
Los ludópatas saben tanto de ella como los arrendadores de pisos y, en la época a la que nos referimos, se marcó un lésbico con la envidia para premio.
 
Un par de precisiones:
- @curro_jimenez haría bien en sacarse el graduado en escribir porque correctamente, es el título que le falta
- no se rescató a los bancos, se rescató a las CAJAS DE AHORRO que habían sido administradas por políticos. Y seguimos teniendo políticos que dicen que hay que crear bancos públicos y los podemitas les apoyan.

La gestión pública es un desastre en España, desde el clientelismo, al enchufismo, pasando por la corrupción pura y dura. Sin embargo, mágicamente, no cala la idea de que estaríamos mejor con un Estado más pequeño, por la simple ecuación de que cuanto menos dinero manejen los políticos, menos robarán y menos malgastarán.

Darle dinero a un político es darle cerillas a un pirómano pero la gente sigue queriendo que el Estado ocupe más facetas de la vida, se piensan que lo que ofrece el Estado es gratis. Son estúpidos y tienen lo que se merecen.
 
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