Pues hoy me ha tocado ir al médico de cabecera tirando de seguro, y me ha salido el médico (el tratamiento, no el efebo) y los medicamentos gratis.
Tenía cierto dolor en los senos paranasales, y como ya me ha pasado otras veces pues he dado parte al seguro. Se han puesto en contacto conmigo a través sus compis en Japón y me han buscado una clínica y una farmacia a 5 minutos de casa con todo cubierto.
La clínica tenía una sala de espera con peluches basados en personajes de anime japonés, y batería para cargar el móvil con clavija de iPhone y de Android. Rellenado el formulario previo, p'adentro.
Una vez en consulta, me recibe un jambo en chándal Adidas, con un reloj
Taj Jaguer, y un bolígrafo con Mickey Mouse y otro con el Pato Donald, así como una linterna similar a la de los mineros en la cabeza.
Me han hecho radiografías y una entrevista con mi traductora personal, y hemos ido comentando la jugada con el doctor que tenía conocimientos de inglés, así como de vocabulario médico que se parecía bastante al español debido a que el latín manda y no tu banda.
Al final me han encasquetado antibióticos para 5 días y me han dispensado la dosis exacta. Nada de llevarte la caja entera, que es lo que se estila en España, para luego volver a hacer el subnormal con los antibióticos restantes, aunque sea para una infección vírica.
En lo que instalaciones se refiere España no tiene nada que envidiarle a Japón, Alemania o Inglaterra, que son países en los que me ha tocado ir al médico, a veces por lo privado y a veces por lo público, tanto en España como en el extranjero.
Una batallita más para contar en el talego el día que vea que acabo debajo del puente. Ese día y no otro, ajustaré cuentas con ciertos personajes y me iré haciendo a la idea de cadena perpetua.
Buenas noches.