Vamos a ver, yo no pretendo establecer una guerra de sexos, sino dejar las cosas en su sitio. El afirmar que nunca han habido grandes mujeres al nivel de los grandes hombres, porque la historia ha discriminado a la mujer, no se sostiene ni dándole mil vueltas al argumento. Ninguna nación, ninguna raza, ningún sexo ha estado tan subyugado y humillado en la historia de la humanidad como el pueblo judío. Dispersos, sin patria y privados de derechos civiles, los judíos son, sin duda, los grandes parias de la historia. A la mujer nunca se la discriminó tanto como a ellos. Sin embargo, pocos pueblos han proporcionado tantos genios a la humanidad como el pueblo judío. David Ricardo (economista), Albert Einstein (físico), Mendelssohn (músico), Weininger (filósofo), etc, todos son primerísimas figuras en sus correspondientes disciplinas científicas. Los judíos, en la adversidad, crean; las mujeres, no, ¿por qué? Muy simple, porque la mujer, incapacitada para la vida en soledad, nunca se podrá emancipar del hombre.