Creo entender al apreciación de Elmer y me aventuro a postearla antes de que él tenga a bien aclararnos su razonamiento.
A ver si acierto:
El forero tetófilo, obsesionado con la calidad de las mamas de la hembra, es una persona de carácter débil, retraido, victimista, llorón e insatisfecho.
Su pasión por los pechos grandes nace de una tremenda necesidad de afecto. Afecto en su acepción mas tierna, amor crudo, orgánico, irracional, maternal, el calor del abrazo de una madre. Dos pechos calientes que envuelven al forero en una amalgama de carne suave y que este chupa casi con frenesí en búsqueda de una experiencia lactante.
Entendemos pues que este tipo de individuo proviene de una infancia marcadamente matriarcal, en donde la presencia de una figura paterna ha sido casi inexistente.
Educado en un ambiente sobreproteccionista, siempre respaldado por una madre posesiva y manipuladora, el forero tetófilo apenas concibe la vida sin unos pechos a los que satisfacer y obedecer en todo momento, es por lo tanto un pusilánime pagafantas.
Por otro lado, el forero con marcada admiración hacia las nalgas, el ano y la proporción cintura-caderas es el auténtico macho. El hombre que empieza a juzgar a la mujer por su valor como producto, como vulva, como ser a penetrar, cabalgar, doblegar y gobernar.
Este forero culófilo entiende que la mujer es el complemento perfecto para sus embestidas pélvicas y busca en ella por encima de todo satisfacción secsual.
Ignorando intencionadamente la sección frontal superior de la fémina, entendemos que a este forero lo que diga, piensa, haga la hembra en cuestión le importa menos que un pedo vaginal, él va a lo suyo que es bombear ese trasero y deleitarse con las sacudidas de sus nalgas y el rebote de sus cojones en el frontón. El forero culófilo es atrevido y sabe tratar a las mujeres como se merecen.
Si me he acercado, hacédmelo saber.