Esto ha pasado, y ha seguido pasando, pese a las advertencias y denuncias de ABUSOS SEXUALES desde hace mucho tiempo, porque ese campemento es de elles, del colective, al que, como todos sabemos, se le permite TODO, y con el que, siempre, se hace la vista gorda.
Cualquier denuncia contra un campamento normal por estos hechos, hubiera tenido como consecuencia la actuación inmediata y su cierre. Pero como son ELLES, todos han mirado para otro lado. Y aquí, el responsable es el PNV, que gobierna las tres diputaciones, y que no sólo no han hecho nada, sino que han maniobrado para esto no saliera a la luz.
Ahora la fiscal de Vitoria admite que el caso lleva parado meses en los juzgados y pide, ahora, que se ponga todo en marcha y se tomen medidas. Durante todo este tiempo, y después de todas las denuncias habidas, 'alguien', mandó meter los papeles del caso en un cajón, para que se pudriera en el limbo.
La Ertzaintza llevaba investigando esto desde el mes de enero, pero aquí también, 'alguien', mandó parar y congelar las investigaciones.
Ahora que todo ha reventado, los políticos que han mirado para otro lado, han tapado el caso y han paralizado el desarrollo normal de investigaciones y procesos judiciales, salen como pollos sin cabeza a decir lo de siempre: que ellos no sabian nada. Tal es su descaro y desvergüenza, que la diputada de Aĺava (PNV) salió con chulería a decir que " a ver si ella tenía que ir campemento por campamento para vigilar"...
Y así es todo en este país.