El Guerra, que en su día era para echarle de comer aparte, demuestra que hoy día sigue sin tener pelos en la lengua, y, lo que es mejor, tiene un puto quintillón de veces más vista, más lucidez, más altura de miras, más sentido de estado y más de todo que cualquiera de los políticos actuales del panorama constitucional. Pero mucho más. Es que no me jodas la diferencia entre lo que dice este y lo que dice su homólogo de veinte años después. Qué degradación en tan poco tiempo.
Jamás creí que fuera a aplaudir a Guerra en su día; hoy me quito el sombrero ante lo que dice en esas declaraciones. Espero que los de su partido tomen buena nota de lo que hay que hacer.