Así que el cine gritaba "Jódete Serrano" cuando le dan matarile a Utrilla, ¿eh? Qué divertido, todos los amigotes ahí vociferando porque le rajan el pescuezo al padre de Guille y Currito, ¿eh? Porque claro, Resines no es un actor con 50 películas a sus espaldas. Resines es un señor que tiene una taberna en Santa Justa, cuya mujer palmó, se casó de nuevo y uno más uno son siete con Fran Pereza a la guitarra.
Menudos palurdos que no sabéis distinguir a un actorazo de los buenos cuando lo tenéis delante. No, tiene que ser un Sean Penn, un Gabriel Byrne o cualquier otro más feo que picio con aire de torturao el que haga de chungo en una peli para que os resulte creíble. Qué asco de país de caínes.