Sir Ano de Bergerac
La becaria de Aramís Fuster.
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Como meter "puto" con calzador en cada puta frase. Un, dos, tres, responda otra vez.
Cuando un personaje en un videojuego tiene un glitch y se empiezan a asomar los mimbres de su construcción, siento un patetismo muy intenso, algo de lástima. Bajo las sutilezas de sus imitaciones de lo humano se manifiesta el código burdo y fallido que los constituye, es como una revelación macabra.
Pues algo así siento cuando alguien a mi lado entra en una espiral de tics y coletillas, me pone algo nervioso. Es la misma sensación de fallo del sistema macabro. No pueden avanzar en su manejo lingüístico sin el apoyo de residuos expresivos, que más que apoyar, lastran la comunicación y acaban enredados en bucles esquizofrénicos, autohumillantes.
En mis relaciones con peñita guay o peñita de escena, compruebo cómo una forma común de cohesión de grupo es adoptar rápidamente las tendencias expresivas del momento. Esto hace que las coletillas cambien cada dos años y la gente tenga que estar al día para expresarse como dictan los cánones. Hace un tiempo uno no dejaba de escuchar por ahí "en plan esto" "en plan lo otro" o el gran éxito "rollo nosequé", de un uso muy similar. También entró con fuerza a mi círculo el utilizar "me refiero" en mitad de una frase como forma de atajar la encerrona que uno se está haciendo a sí mismo cuando uno no consigue hacerse entender para enmendarlo con otra frase más sencilla. Todo ello es un desastre desde el punto de vista gramatical.
¿Existen coletillas foriles? No me refiero a expresiones de moda que los foreros aprovechan para introducir siempre que pueden para resultar graciosos. Hablo de tics, de residuos lingüísticos sin los cuales uno no puede hacer avanzar su discurso.
Cuando un personaje en un videojuego tiene un glitch y se empiezan a asomar los mimbres de su construcción, siento un patetismo muy intenso, algo de lástima. Bajo las sutilezas de sus imitaciones de lo humano se manifiesta el código burdo y fallido que los constituye, es como una revelación macabra.
Pues algo así siento cuando alguien a mi lado entra en una espiral de tics y coletillas, me pone algo nervioso. Es la misma sensación de fallo del sistema macabro. No pueden avanzar en su manejo lingüístico sin el apoyo de residuos expresivos, que más que apoyar, lastran la comunicación y acaban enredados en bucles esquizofrénicos, autohumillantes.
En mis relaciones con peñita guay o peñita de escena, compruebo cómo una forma común de cohesión de grupo es adoptar rápidamente las tendencias expresivas del momento. Esto hace que las coletillas cambien cada dos años y la gente tenga que estar al día para expresarse como dictan los cánones. Hace un tiempo uno no dejaba de escuchar por ahí "en plan esto" "en plan lo otro" o el gran éxito "rollo nosequé", de un uso muy similar. También entró con fuerza a mi círculo el utilizar "me refiero" en mitad de una frase como forma de atajar la encerrona que uno se está haciendo a sí mismo cuando uno no consigue hacerse entender para enmendarlo con otra frase más sencilla. Todo ello es un desastre desde el punto de vista gramatical.
¿Existen coletillas foriles? No me refiero a expresiones de moda que los foreros aprovechan para introducir siempre que pueden para resultar graciosos. Hablo de tics, de residuos lingüísticos sin los cuales uno no puede hacer avanzar su discurso.