Un tío que hacía negocios con el tal de Castro, tenía negocios con los otros supuestos culpables denunciados por el trolero de Juan Ignacio Blanco ( Calvé y un primo de Javier Solana), y fue el que le metió al periodista por la cabeza esa teoría sin pies ni cabeza porque por culpa de ellos perdió una clínica o algo así.
Todo el mundo le dijo a Juan Ignacio Blanco que si estaba loco porque esa teoría era un disparate y obviamente una vendetta del ex socio, hasta gente muy metida en la investigación de Alcasser y amigos cercanos de Juan Ignacio Blanco se lo dijeron, que eso era una gilipollez.
Adivina a quién le había alquilado una propiedad el tío que le metió esa teoría a Juan Ignacio Blanco por la cabeza.
A Alejandro Amenábar para que rodara tesis, y fue a partir de eso que la teoría snuff empezó a circular por boca de Juan Ignacio Blanco influenciado sin duda por este tío...qué casualidad.
Todavía hay gente que cree que ese periodista era íntegro cuando no dejó de mentir una y otra vez, y es que el dinerito que le daba Pepe Navarro era muy goloso.
Que llegó a decir que tenía una cinta snuff con el asesinato de las niñas, para luego decir que no, que lo que salía era una ceremonia en la que se veía a una de las niñas viva atada en una camilla pero que no la mataban y que había visto esa cinta en compañía del padre de Miriam, Fernando.
Luego le preguntaron al Fernando y dijo que eso era completamente mentira, no se ponían ni de acuerdo entre ellos, eso sí: el Fernando García se lo llevó crudo con su asociación niñas de Alcasser, estafando un montón de pasta.
A ver si despertáis que lo de Alcasser únicamente son dos oportunistas que se encontraron con la gallina de los huevos de oro, incluso aunque uno de ellos fuera el padre de una de las víctimas.
El periodista y criminólogo Juan Ignacio Blanco falleció la semana pasada a los 63 años de edad, tras padecer un cáncer. Se hizo popular por sus p...
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