Anoche estuve de boda,
he ido a muchas bodas a lo largo de mi vida, todas heterosexuales, pero la de ayer era diferente porque se casaban dos hombres. El novio, mi amigo, es un antiguo compañero de facultad y bueno, en la facultad no ligaba mucho pero como éramos todos informáticos no nos extrañaba verle sin novia porque casi nadie tenía nunca. Después de la carrera le perdí la pista porque entró al ejército y un día por facebook me enteré que le iban las pollas.
El otro novio, es en realidad la novia. Mientras que mi amigo es un militar reputado de carrera y un señor homosexual, su pareja es un peluquero con más pluma que un desfile de ocas. Una putísima locaza alborotadora que se casó vestido de rosa, mientra mi amigo iba con su uniforme militar. La extraña pareja.
Los casó en un palacete un funcionario del gobierno o enlace del ayuntamiento o algo así. No me enteré muy bien porque conforme llegué al recinto me puse a beber y no me enteraba de casi nada. Traté de jugar a ver qué invitados venían por parte del novio o de la novia, es algo a lo que siempre juego en las bodas pero en este caso era muy aburrido porque había o gente vestida de militar o formal o putísimilas locazas. Había un pavo que iba con vestido de mujer y un gilipollas rollo Bob Pop con chaqueta rosa, camisa ¿turquesa?, pantalones amarillos y zapatos blancos que no paraba de gritar, ¡guapoooos, guapooooos! cada 5 segundos o así.
Después de que el notario ese los casase, se pusieron los anillos y nos movimos a unas mesitas altas para el convite con unos canapés. Mis antiguos compis de facultad y yo nos agrupamos en una de las mesitas mientras picoteábamos canapés y a ver la cantidad de locazas que había por ahí nos escudamos como los 300 espartanos en la batalla final contra los persas, levantando sólo el escudo para pillar algún trozo de jamón (mal cortado), queso o gamba rebozada de los camareros que iban pasando con bandejas.
Ver el archivos adjunto 119488
Llega POR FIN el momento de sentarse en las mesas para el banquete y veo que la mía está bastante alejada de todo. Bien. Pero justo espalda contra espalda tengo al gilipollas de la chaqueta rosa que he dicho antes. Mal. Cómo grita el hijo de puta. Al poco de sentarnos empieza a sonar Saoko de Rosalía y todo el mundo se levanta y empieza a agitar pañuelos. El subnormal que tengo a la espalda se levanta de golpe, derramándome la cerveza, le iba a decir algo pero el imbécil estaba como loco agitando el pañuelo gritando ¡GUAPOOOOS, GUAPOOOOS! Me va a dar la puta noche este, ya verás.
Los novios empiean a pasar por todas la mesas saludando hasta que se sientan. El tontolculo que tengo detrás sólo sabe hablar gritanando y le escucho a él más que a mis compañeros de mesa, cada dos por tres hace como para levantarse y me choca la silla, le digo un par de veces que tenga cuidado y me dice Ay perdona guapo. Me da grima.
Se van sucediendo entrantes, primer plato, sorbete, segundo plato y es un no parar de ¡que se beeesen, ¡que se beeesen! En una de estas, cuando me vuelve a dar con la silla por quinta o sexta vez el pavo que tengo detrás mía, con unas 12 cervezas que llevo entre pecho y espalda, me levanto y aprovechando que está todo el mundo distraído aplaudiendo a los novios que se besaban, agarro por la pechera al maricón, me lo acerco y le digo al oido "como me vuelvas a dar con la silla te meto dos ostias"
El pobre se queda blanco y nos sentamos. Nos traen el postre y veo que se levanta (con cuidado de no darme) y se va a saludar gente, por suerte ya no me lo crucé más en toda la noche. Al rato vienen los novios, les saludmos y pasamos al baile nupcial. Pues una puta mierda de baile, qué queréis que os diga y yo voy por la cerveza 15 o así e intento integrarme y bailar un poco, pero nunca se me ha dado bien.
Ver el archivos adjunto 119490
Pensaba que eso era un desmadre de maricones bailando, pero era sólo el principio. Entre media noche y la 1 se empezaron a ir los padres y la gente mayor. Una vez que los maricones se quedaron solos empezó la bacanal.
Una tras una cantidad ingente de litros de alcohol, cocaína (se metían rayas ahí mismo) y todas las canciones de mierda de Gloria Gaynor, Bad Bunny y otros del palo, los maricones, una vez vieron que tenían libertad para descontrolarse, empezaron a despelotarse y a bailar sin camiseta o en ropa interior, restregándose entre ellos, gritando, gimiendo, haciendo cosas. El DJ no levantaba la cabeza de la mesa de mezclas rezando porque no se le acercase nadie y los camareros de la barra libre así
Llega un momento en el que digo: Vale, sufciente, me voy. Me despido de mis compañeros y paso por el baño a mear antes de volver a casa. Cuando entro, voy a los urinarios y hay un tio sentado en uno de los urinarios del final haciéndole una mamada a otro. Me pongo lo más lejos posible y comienzo a mear, el mamado me mira, me sonrié y me saluda. Le doy las buenas noches, me la enfundo y me marcho.
Ver el archivos adjunto 119487
Me alejo caminando de la muchedurme, suena Bad Gyal de fondo y todos siguen bailando, los novios tienen contratado todo hasta las 7 de la mañana. Estoy tentado de quedarme, tiene que ser bonito ver el amancer en el palacete con toda esa gente saliendo de ahí arrastrándose en plan Walking Dead, pero tengo mucho sueño y decido que en mi camita estoy más agusto, así que me marcho.