@Tunak Tunak Tun se nota que conoces poco a los peruanos.
Todos los latinoamericanos siguen el mismo esquema que todo lo que le atribuyes a los mexicanos.
El cuento de que los españoles tienen la culpa de todo. De que lo nuestro es lo mejor. De que aquí todo está perfecto, si no fuera "por", que a menudo viene a ser algo similar a afirmar que "el portero de 'Aqui no hay quien viva' no está bueno porque no tiene la cara de Brad Pitt, que si llega a tenerla sería el tio más bueno del mundo'.
El no tener noción del valor de, por ejemplo, su fútbol, y tenerla sobrevalorada.
Es decir, para ellos cualquier futbolista tuercebotas de su país es poco más o menos que Messi.
Para los mexicanos, Cuauhtémoc Blanco, que fue la nada en el fútbol, pero NADA, es una de las joyas más importantes de la historia de ese deporte. Y ojo, que si no fuera porque "tal", ya habría sido directamente el mejor.
Pero eso te lo dicen los peruanos, los colombianos o los chilenos con tios que por calidad a lo sumo podrían jugar de suplentes en el Elche pero en su cabeza, al ser esos tuercebotas de lo mejor que han tenido en su país, son igual de buenos que Luis Figo, o quizá estén incluso un poco por encima de Luis Figo.
Entonces cuando tú discutes con ellos que Cuauhtémoc Blanco ha sido un
futbolista de medio pelo, que Valderrama lo mismo pero lo recuerdas porque tenía un peinado raro, o que Eduardo Vargas no ha empatado con nadie, y compruebas su reacción absurda, negando la realidad y situándose en una realidad paralela, te das cuenta de que para todo hacen lo mismo.
"Tenemos la mejor cocina del mundo". "En Venezuela tenemos las mujeres mas lindas del mundo". "Las mujeres latinas son hogareñas" (JAJAJAJA!)... son todo mitos que ellos repiten millones de veces para autoconvencerse.
Ellos tienen la facultad de ir todos a una, no solo para difundir estos falsos mitos que les sirven para elevar su ego nacional. También funcionan unidos cuando por poner un ejemplo, en España la policía se los quiere llevar detenidos por liarla. Todo el resto aunque no se conozcan intentan rescatarlos y presionar para liberarlos.
Ellos nunca se hacen trampas cuyo resultado vaya contra ellos, ellos se hacen trampas que los ayuden y beneficien.
Luego, te das cuenta, que en todos los casos, todo ese ego es una coraza.
Se tienen un autoodio que hasta en México tiene nombre (malinchismo).
Los españoles no tenemos esa capacidad de hacer piña, precisamente porque tenemos capacidad de autocrítica, y nos han acomplejado al máximo.
Por eso los mexicanos necesitan para satisfacerse ver en sus teles, series y pelis, a ese 0.01% de blancos, a menudo argentinos o españoles, y a nosotros nos ponen negros y chinos por todas partes desde hace 25 años, cuando hace 30 en España no veías a un inmigrante.
Ellos anhelan ver en la tele el México blanco que nunca existió, y nosotros aceptamos ver en la tele la nueva mentira de la España multirracial.
Y esto sucede también porque el gen no blanco es mucho más racista que el gen blanco, por paradójico que sea.