Pues si
Y además se pican, tienen un raro orgullo mandinga. Sobre todo se pican con los rumanols, que también hay bastantes.
Como podrás comprender un servidor ni unos ni otros.
Los ¶sudamaricones¶ con ese ritmo y esa perrrrrrrería que arrastran, y que encima se creen buenos, que lo hacen bien.
Los rumanols con esa cabezabuque cuadriculada que no entienden nada, muy pelotas sin sentido, y a veces con un exceso de motivación que llega a ser peligroso .
Así que mejor como estás tú y como estoy yo ahora: solos ante el peligro .
K#rma y VS sub
El metro CASTRA a todo el mundo. Educa a todo el mundo. Ya puedes ser Rambo, que en nada acabas comprendiendo muchas cosas: que no somos nada, que las cosas ya no son como antes y se acercan más a como en Colombia, que no le importas a absolutamente nadie, que lo más valioso que puedes hacer es autoprotegerte a ti mismo, que en este país por nada te ganas un follón que te va a torturar años y a crear ansiedad, que una puñalada en el cuello mientras te estoy contando esto, así, de repente, te la puedo soltar en una décima de segundo, que no eres nada ni tienes autoridad y lo mismo hasta para la policía ya....
Y, además, estás sometido a la exposición de estos argumentos y a la repetición constante. Esta es la manera de transformarte. Casi cada día vas a escuchar todo lo que te he dicho. Lo vas a escuchar en distintas formas, de distintos compañeros, hoy lo vas a escuchar en el taller de Santa Eulalia, mañana por la mañana en el vestuario y mañana al mediodía lo volverás a escuchar en un vestíbulo donde te has topado con un compañero de otra línea.
Es cultura y educación constante en esto, que siempre va a estar presente.
Así que no hay chulo, ni rumano, ni negro brasileño "jiujitsu", que no acabe pensando eso y actuando en consecuencia en, como mucho, dos meses en el metro. Somos esponjas y aplicamos lo de hacer lo que veas que todos hacen y decir lo que escuchas que todos dicen.
Yo antes del metro, me venías a tocar los cojones si yo estaba sentado en un banco, y te tenías que dar de hostias conmigo. Sí pero si.
Hoy me callo cosas que serían impensables y ante gente que seria impensable que yo me callara.
Porque además esa educación del metro que te digo, ya no se va nunca. Es como lo de conducir un coche o pedalear la bicicleta.
Y fuera del metro, la verdad es que lo aprendes aunque quizá no tan rápido.
En general sean de donde sean, no veo demasiado flipado. La gente es consciente de todo lo que te digo.
Al sudamericano en esto me lo imaginaba más violento antes de hacerme segurata, pero luego generalizando son prudentes porque tienen el chip de allí, y el chip de allí es solo por hablar de más te puedes llevar un balazo en la cabeza.