¿Se sabe si el señor Alves fue en algún momento un menino da rúa? Si es asín y si su selebro puede reenviarle a esos días, quizás se adapte bien al talego si no, las va a pasar putas. No hablo de los otros internos, hablo del papeo, de la cama, de la falta de alcoholol, de la falta de golfas. Vivir a todo tren y de repente verte chapao es un putadón de aupa. Si fui yo, que no le llego ni a la suela de los zapatos económicamente hablando y las primera semanas..., pfff. Estaba acostumbrado a tener costo y coqueta de sobra, guarras, restaurantes más o menos caros, pleiesteichon, partidos de fúmbol en el campo del Cerdilla y demás caprichos; cuando vi el catre to reventao, el cagadero y los barrotes oxidaos de la ventada (dejando aparte el ruido que hacen to los personajes allí presentes) me quise morir del asco.
En cualquier caso, parece ser que va a tener tiempo para habituarse por lo que se lee por ahí. De momento prisión provisional sin fianza, de aquí a que lo vea el juez va a cagar líquido en más de una ocasión, hasta que se le haga el estómago al rancho taleguero y a los productos Bollilandia del economato.