Haces unos días presencié un acontecimiento en mi ginlasium que derrumbó mi fe en las nuevas geenraciones en general, y en el hombre en particular. Estaba yo haciendo extensiones de cuádriceps cuando se me puso al lado una pareja de treintañeros. Ambos en forma, ella no muy guapita pero de buen trasero. Venia ella con gesto malhumorado y tras de ella su novio con gesto compungido, con su brazo extendido y la mano sobre su hombro. Al llegar a mi lado ella se giró y le dijo:
- Mira, me he pasado (haciendo un ejercicio de piernas ) 5 minutos jodida, dandolo todo, asfixiada, que me tiemblan las piernas para que me sueltes que tal como lo he hecho no vale pa ná.
A lo que respondió el chumacho, mirando al suelo y entre sollozos:
- Bueno, yo solo quiero que lo hagas bien, es por enseñarte.
Y ella sentenció:
- Si yo lo hago así es porque está bien, te queda claro? Todo lo que hago yo está bien, no me tienes que criticar en nada.
El chico no respondió. Se puso a ver el movil y no se atrevió a responder.
Conclusión: La que a cada uno le salga de las pelotas, eso yes.