Pues a mí me gusta la madre de ultimatum.
No entiendo por qué no estamos hablando de la inteligencia en este ránking to shulo, eso que todas tienen pero nadie sabe dónde. Menos Interferencia, que a simple vista se le ve que es una chica lista.
A las mujeres, las inteligencias les gustan como las pollas: grandes.
Conversad inteligentemente (?¿) con una tía y descubiréis que no tardarán mucho en indicaros que "tenéis la parte femenina muy desarrollada", han llegado a convertir la inteligencia en patrimonio suyo. Todo lo que os distinga de un animal cuadrúpedo dedicado al sementalismo y os distancie de ser reducidos a bestias dedicadas a su deleite sepsual será identificado por ellas como "femenino" y, por tanto, inconscientemente entráis en la dualidad del rechazo, como eres inteligente eres femenino y, por tanto, manso con ellas... ellas sólo se follarían a un "hombre de verdad".
Para que les peten el culo no quieren a un hombre inteligente, que un hombre inteligente compara, se da cuenta de las cosas, ellas quieren no ser criadas de nadie pero sí tener un mulo de carga en el súper, un hombre que reaccione por impulsos, que le digan "muerde" y muerda, "caga" y cague. Su método de selección consiste en preguntarte o exigirte si están en modo hardcore, que demuestres tu inteligencia con la falsa promesa del chocho jugoso que en el aire flota, tranquilos que no bajará si dais en el clavo. Sin follar nos hemos quedado.
Emborrachada de poder la shurmana quiere un súbdito, un seguidor de la diosa, un besasuelos, que la lleve a la bahía, que le diga vidamía, qué guapa soy, qué tipo tengo... sentirse poderosas. ¿Y qué mejor que un arrastrado que cumpla órdenes? es como un mando a distancia, pito tieso, cadera fuera, cadera dentro, ¡ar!...
Para formar pareja, es decir, cuando están hastiadas de follar, cuando todo aquel que reniega ya de su pagafantismo corre el riesgo de caer en el pagapisismo, cuando el coño ya no les da para más... ojo curva que la cosa cambia!... entonces quieren a un hombre inteligente, para las largas conversaciones de invierno, alguien que no nombre el sexo, que no están de ganas, el invierno es estéril... alguien que intuyan que, por su inteligencia, no se va a tirar a otra, pasan del perro de guarda al perro de compañía. Y eso amigos míos te lo dicen mientras te palpan el brazo... no necesariamente el del medio.
Hacerse el tonto es un arte que ellas manejan a la perfección, tanto que te hacen pensar que "ser tonto" es "ser estúpido", así que sed rigurosos. Si decidís enmascarar vuestra inteligencia hacedlo con seriedad... por supuesto, a algunos de vosotros no os costará demasiado.