Ciclon Larry
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Para evitaros leer el artículo entero, os pasó los detalles más truculentos:
Dicen que fue a trabajar un par de días allá por el año 2002 y en cuatro ocasiones en 2004. Pero Silvia S., una italiana de 44 años,ni un solo mes ha dejado de cobrar puntalmente su sueldo.
Fingiendo falsas enfermedades e inventándose hasta dos embarazos ficticios, esta auxiliar de enfermería se ha convertido en la reina indiscutible del abssentismo laboral.
Silvia S. está desde ayer en arresto domiciliario, acusada de fraude agravado al Estado, un delito por el que le podrían caer hasta cinco años de cárcel, y de otro de falsedad de documentos por el que podría ser condenada a pasar dos años entre rejas.
La gran huida de Silvia S. de su puesto de trabajo comenzó en 2002, cuando trajo al mundo a su única hija. Primero se hizo diagnosticar un tipo de dermatistis .
Partos en España
Pero después decidió dar el gran salto: en 2003 se inventó que estaba encinta, y alegando que estaba sufriendo hemorragias consiguió que un médico le certificara un embarazo de riesgo.
Llegó incluso a tener la desfachatez de incluir en la declaración de la renta a ese falso hijo para poder desgravárselo.
En 2008, y visto lo bien que le había funcionado el primer embrazo psicológico, Silvia S. se inventó un nueva gestación e incluyó a ese tercer falso hijo en la declaración de la renta para tener derecho a dergravaciones fiscales.
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Yo creo que lo de esta mujer es un extremo, pero, ¿y la de casos a menor escala que hay en España? La de gente que chupa del bote y -para más cojones- se vanagloria de lo que hace? Fraudes con ayudas, con becas que no son necesarias, blablabla...
¿Y dónde coño están los inspectores de trabajo, de hacienda, para controlar todo esto?
Aporten ideas, casos, experiencias vividas...
Dicen que fue a trabajar un par de días allá por el año 2002 y en cuatro ocasiones en 2004. Pero Silvia S., una italiana de 44 años,ni un solo mes ha dejado de cobrar puntalmente su sueldo.
Fingiendo falsas enfermedades e inventándose hasta dos embarazos ficticios, esta auxiliar de enfermería se ha convertido en la reina indiscutible del abssentismo laboral.
Silvia S. está desde ayer en arresto domiciliario, acusada de fraude agravado al Estado, un delito por el que le podrían caer hasta cinco años de cárcel, y de otro de falsedad de documentos por el que podría ser condenada a pasar dos años entre rejas.
La gran huida de Silvia S. de su puesto de trabajo comenzó en 2002, cuando trajo al mundo a su única hija. Primero se hizo diagnosticar un tipo de dermatistis .
Partos en España
Pero después decidió dar el gran salto: en 2003 se inventó que estaba encinta, y alegando que estaba sufriendo hemorragias consiguió que un médico le certificara un embarazo de riesgo.
Llegó incluso a tener la desfachatez de incluir en la declaración de la renta a ese falso hijo para poder desgravárselo.
En 2008, y visto lo bien que le había funcionado el primer embrazo psicológico, Silvia S. se inventó un nueva gestación e incluyó a ese tercer falso hijo en la declaración de la renta para tener derecho a dergravaciones fiscales.
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Yo creo que lo de esta mujer es un extremo, pero, ¿y la de casos a menor escala que hay en España? La de gente que chupa del bote y -para más cojones- se vanagloria de lo que hace? Fraudes con ayudas, con becas que no son necesarias, blablabla...
¿Y dónde coño están los inspectores de trabajo, de hacienda, para controlar todo esto?
Aporten ideas, casos, experiencias vividas...